El abogado del denunciante alega que Bergoglio "es el sucesor legal" Muerto Benedicto XVI, ¿continuará la causa por encubrimiento de abusos en Múnich ahora contra Francisco?

El fallecido Papa emérito, Benedicto XVI, tenía de plazo hasta el próximo 24 de enero para defenderse por escrito ante un tribunal alemán sobre las acusaciones de encubrimiento en un caso de abusos sexuales cuando era arzobispo de Múnich y Freising entre 1977 y 1982, presentando un escrito formal sin necesidad de testificar. ¿Qué sucederá ahora con este asunto? ¿Se cierra la demanda contra Joseph Ratzinger? ¿Pasará esta a su sucesor, el papa Francisco?

"Es cierto que, en principio, una interrupción de conformidad con el artículo 239 del Código de Procedimiento Civil se produce con la muerte de una parte", dijo la portavoz del Tribunal Regional de Traunstein, Andrea Titz. "En el presente caso, sin embargo, esto no es aplicable, ya que el fallecido estaba representado por un agente judicial", añadió en declaraciones recogidas por Zeit. Benedicto XVI, añadió, "ya no es parte en el procedimiento", aunque este no se interrumpe y, "por ley, sus herederos entrarían ahora automáticamente" en el caso.

Ratzinger había designado abogados

Joseph Ratzinger, fallecido en Nochevieja, había designado a un importante bufete de abogados para que le representara en el proceso, el cual, según señaló la citada portavoz judicial, podía solicitar la interrupción del procedimiento hasta que se aclarara quiénes eran los herederos de Ratzinger.

En este sentido, el abogado Andreas Schulz, que representa al demandante, ve ahora al papa Francisco como sucesor legal del demandado en el proceso por abusos, "ya que el difunto papa había nombrado heredero al Vaticano". "Ahora, el papa Francisco debe decidir si se esconde detrás de la inmunidad o si da validez a la búsqueda de la verdad", declaró el abogado. "Para el juicio, Francisco tiene ahora la oportunidad de abrir los archivos vaticanos y garantizar así por fin la transparencia", destacó.

En el verano de 2022, un hombre que declaró haber sido víctima de abusos por parte de un sacerdote condenado por varios casos de abusos en Garching an der Alz, presentó una demanda civil no solo contra el condenado, sino también contra Ratzinger, que era arzobispo de Múnich y Freising en el momento en que el abusador fue trasladado a su diócesis, contra la archidiócesis y contra el sucesor de Ratzinger en el cargo de arzobispo, el cardenal Friedrich Wetter, con el objetivo, entre otras cosas, de determinar si los funcionarios diocesanos encubrieron casos de abusos y posibilitaron así nuevos delitos.