Una sala de los Museos Vaticanos, habilitada para el proceso El juicio por los abusos en el seminario de los monaguillos del Papa concluirá en septiembre
La próxima audiencia de este juicio tendrá lugar el próximo 15 de julio en esta aula que era un antiguo laboratorio polivalente de los Museos del Vaticano
El tribunal del Vaticano cerrará por vacaciones hasta el próximo 20 de septiembre cuando después de escuchar a todos los testigos y dar la posibilidad a los acusados de presentar alegaciones se dictará sentencia
La audiencia por el juicio por presuntos abusos sexuales en el preseminario 'San Pío X', donde viven en comunidad los aspirantes a seminaristas y monaguillos, en su mayoría menores de edad, se ha celebrado en una sala habilitada de los Museos Vaticanos.
El presidente del tribunal del Vaticano, Giuseppe Pignatone, ha apreciado durante el juicio que al ser de mayor tamaño se pueden respetar mejor las normativas anticovid ya que los asistentes pueden estar más distanciados.
La próxima audiencia de este juicio tendrá lugar el próximo 15 de julio en esta aula que era un antiguo laboratorio polivalente de los Museos del Vaticano. El tribunal del Vaticano cerrará por vacaciones hasta el próximo 20 de septiembre cuando después de escuchar a todos los testigos y dar la posibilidad a los acusados de presentar alegaciones se dictará sentencia.
El pasado 25 de mayo, el Papa decidió trasladar fuera del perímetro que define el territorio del Vaticano el preseminario 'San Pío X', fuera de los muros que circunscriben el espacio del Estado más pequeño del mundo.
Según la oficina de prensa del Vaticano, la decisión de Francisco de mudar el preseminario, que con anterioridad se situaban en los jardines del Vaticano, fue motivada para dar la oportunidad a los chavales de estar más cerca de los "lugares donde realizan sus estudios y practican sus actividades recreativas".
No obstante, en el comunicado, la oficina de prensa del Vaticano no hizo referencia al juicio en curso que ha sentado en el banquillo de los acusados a Gabriele Martinelli, de 28 años, que era seminarista cuando se produjeron los presuntos abusos sexuales y que se ordenó sacerdote en la diócesis de Como (norte de Italia) en 2017 y al sacerdote italiano Enrico Radice de 71 años, que ejercía entonces rector en el seminario, y al que se le acusa de encubrimiento.