"Recuerda a Juan Pablo II, que experimentó la fragilidad no como un impedimento", dice el capellán del hospital Obediente, pero a regañadientes: Así fue Francisco al Gemelli, donde ahora también consuela a otros enfermos

A la espera de que la Sala Stampa emita el previsible comunicado dando cuenta del estado de salud del papa Francisco tras pasar su primera noche ingresado en el Policlínico Gemelli debido al agravamiento de la bronquitis que venía padeciendo desde hace varios días, comienzan a saberse algunos detalles de esas primeras horas de internamiento, que podrían prologarse hasta los cincos días, en principio algo más de lo inicialmente esperado. 

Así, además de saber que esta primera noche la ha pasado "tranquila" e incluso le ha bajado la leve fiebre que padecía, según fuentes vaticanas citadas por la televisión pública RAI, y recogidas por la agencia EFE, mientras se espera que la Santa Sede informe oficialmente de su estado, Francisco ha tenido también tiempo para preocuparse por otros enfermos que están ingresados con él en el hospital romano, según ha contado al diario La Reppublicael capellán del centro, Giancarlo Sboarina.

A este fraile menor franciscano le ha llamado la atención no sólo la resistencia física de este anciano de 88 años, y que ya conoce de otras ocasiones la planta décima del policlínico, donde son ingresados los pontífices. Le ha impresionado también su actitud de cercanía a otros enfermos, su cercanía también al dolor de los demás.

“Recuerda un poco a Juan Pablo II”

“Recuerda un poco a Juan Pablo II”, indica el padre Sboarina al diario italiano, “que experimentó la fragilidad no como un impedimento, sino como una oportunidad para dar testimonio de la fe”.

Papa Francesco al Gemelli: anche da paziente, pensa agli altri https://t.co/FUrfTuFxer

— informazione salute (@infoitsalute) February 15, 2025

El próximo comunicado de la Sala Stampa habrá de confirmar la información avanzada por la televisión pública italiana y si, efectivamente, ha remetido esa “leve” alteración febril de la que daban cuenta ayer pasadas las seis de la tarde. Lo que sí ya se sabe es que el equipo médico que le atiende insistió en su necesario ingreso y recibió con alivio la decisión final del Papa de cancelar todos sus actos y dirigirse al hospital para recibir allí el tratamiento farmacológico necesario.

Querían que fuese al hospital hace una semana

Hacía ya más de una semana que su equipo médico hubiera querido que fuese a hacerse las pruebas al hospital, según ha informado la revista America, pero, sabido lo mal paciente que es, se conformaron con que Francisco redujese su actividad y que esta se ciñese al ámbito de su residencia, en la Casa Santa Marta, para evitar exponerlo a los fríos del invierno.

Sin embargo, su actividad -en pleno Año Jubilar- ha seguido siendo muy intensa, como demuestra el hecho de que pocas horas antes de ser ingresado en la mañana del viernes 14 de febrero, mantuvo cuatro audiencias.

Pope Francis to be admitted to hospital for checks.

Francis held audiences at the Vatican on Friday morning before his hospitalization, including with the prime minister of Slovakia and CNN Chief Executive Mark Thompson. Christopher Lamb, CNN’s Vatican correspondent, who saw…

— Christopher Lamb (@ctrlamb) February 14, 2025

En una de ellas con uno de los directivos de la CNN, y en la que participó el corresponsal de esta cadena en el Vaticano, Christopher Lamb, este señaló que Francisco “estaba mentalmente alerta, pero tuvo dificultades para hablar durante períodos prolongados debido a dificultades respiratorias”.

De esta manera, este ingreso le obliga a mantener un reposo que él, por su cuenta, suele ser reacio a realizar. Pero que parecía del todo necesario, toda vez que desde la apertura de la Puerta de Santa de San Pedro, el pasado 24 de diciembre, Francisco ha multiplicado sus actos en una ya recargada agenda. En su entorno más cercano hay ciertamente alivio ahora porque al menos está bajo estricto control médico.