Braz de Aviz advierte de los "buitres" que se aprovechan de las comunidades religiosas El Vaticano pide "poner freno" a las ventas "ilegales" de patrimonio por parte de algunas órdenes religiosas

"Hay que frenar las enajenaciones improvisadas y a veces ilegales de algunas órdenes religiosas". Los cardenales Ravasi y Braz de Aviz denunciaron ayer las ventas "irregulares" que se están produciendo en algunos monasterios, en circunstancias no aclaradas, y para las que Roma quiere poner coto. 

Durante la presentación de la conferencia titulada "Carisma y creatividad. Catalogación, gestión y proyectos innovadores para el patrimonio cultural de las comunidades de vida consagrada", que tendrá lugar los días 4 y 5 de mayo de 2022, en el Auditorium Antonianum, los responsables de Cultura y de la Vida Consagrada del Vaticano lamentaron cómo algunas obras de arte acaban en casas de subastas, "en la red o incluso en la web oscura". O en mercadillos como el de Porta Portese de Roma, donde llegó a dar un cáliz antiguo, o un bote de incienso del siglo XVII que ahora se utiliza como recipiente para guardar caramelos.

Asegurar el decoro, evitar la especulación

"Sea por lucro o por ingenuidad", añadió Ravasi, "es precisa una catalogación más sofisticada". "Siempre es legítimo poner en el mercado ciertos bienes, pero si se dan las condiciones correctas", recalcó. Y es que "la reutilización del patrimonio artístico" debe asegurar el decoro y evitar la especulación. 

Por su parte, el secretario de la CIVCSVA, José Rodríguez Carballo, lamentó que "muchas veces nos enteramos de la desaparición de un patrimonio importante cuando ya no hay nada que hacer (...). Hay que respetar las leyes canónicas".

"Hay casos dolorosos, con dos o tres monjas que tienen un patrimonio enorme y deciden que ese patrimonio es suyo", añadió Braz de Aviz, advirtiendo de los "buitres" que aprovechan las circunstancias para comprar, casi a precio de coste, auténticas obras de arte.

El patrimonio es tuyo, pero no es tuyo

Frente a ello, Carballo llamó a comprender que "este patrimonio es tuyo pero no es tuyo: los bienes de la Iglesia son de la Iglesia, no son bienes personales". "A veces tenemos monasterios con dos, tres personas, con una edad avanzada: cambian los muebles antiguos por cosas de Ikea, y hay quien se aprovecha", lamentó.

Para Ravasi, hay cuatro aspectos que se deben tener en cuenta. "1) los marcos para la comprensión teórica de los bienes culturales de los Institutos de Vida Consagrada, 2) su catalogación, 3) su gestión, 4) la reutilización eclesial de los edificios abandonados". "Hay que hacer mucho más", concluyó el presidente del dicasterio de la Cultura.