Denuncia a los que intentan “aprovechar estos momentos para su propio beneficio” El papa pide “en estos momentos de turbación, una conciencia recta y transparente, que pueda hacerse ver de Dios sin avergonzarse”

Se acerca la primera Semana Santa virtual de la Historia y el Papa Francisco continúa celebrando la eucaristía diaria, a las 7:00 de la mañana en la capilla de Santa Marta. Acompañado de unos cuantos residentes, a primera hora de la mañana eleva su súplica al Señor. Francisco ofrece la misa por todos los que hacen el bien en estos tiempos de pandemia, pero también denuncia a los que se aprovechan "en su propio beneficio" y pide, para todos, "una ocnciencia recta y transparente", que no se avergüence ante Dios.

Antes de comenzar, el Papa ofrece la eucaristía: “En estos momentos de turbación y dolor, a veces la gente tiene la posibilidad de hacer una u otra cosa. Muchas cosas buenas. Pero también algunos tienen ideas de hacer cosas no tan buenas. Aprovecharse del momento para su propio beneficio. Recemos hoy, para que el Señor nos dé a todos una conciencia recta, transparente, que pueda hacerse ver de Dios sin avergonzarse”

La primera lectura del libro del profeta Ezequiel: “Haré de ellos un solo pueblo en mi tierra...Y no adorarán más a sus ídolos...Les liberaré y les purificaré y serán mi pueblo y yo seré su Dios...Firmaré con ellos una alianza de paz eterna...Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo”

Lectura del evangelio de Juan: “Muchos, después de la resurrección de Lázaro, creyeron en Él...Algunos fueron a los fariseos...¿Qué hacemos? Este hombre hace muchos signos...Uno de ellos, Caifás les dice: Es conveniente para vosotros que 'uno solo hombre muera por todo el pueblo'...Profetizó que Jesús iba a morir...Desde entonces, decidieron matarlo...Estaba cercana la Pascua d ellos judíos...”

Homilía improvisada del Papa

“Hacía tiempo que los sumos sacerdote estaban inquietos. Pasaban cosas extrañas en el país. Primero, Juan, al que al final le dejaron tranquilo. Después, vino este Jesús y comenzó a hacer signos y milagros. Sobre todo, a hablarle a la gente, que lo entendía y lo seguía. Y no siempre observaba la ley. Un revolucionario pacífico. Este lleva tras sí a la gente, que lo sigue”

“Estas ideas le llevaron a hablar entre ellos sobre este tema. Preocupados. Algunos fueron a verlo para ponerlo a prueba. Siempre el Señor tenía una respuesta clara. Como la de la mujer esposada siete veces...¿Con cuál de estos maridos será esposa? Y el respondió y ellos se fueron avergonzados por la sabiduría de Jesús”

“O la adúltera...El que esté libre de pecado que tire la primera piedra...Y se fueron humillados. Esto hacía crecer la conversación. Tenemos que hacer algo. Después, mandaron a los soldados a prenderlo. Y no li hicieron”

“Tras la resurrección de Lázaro, muchos judíos iban muchos a verlo. Algunos para informar después a los fariseos. Los murmuradores de siempre fueron a los doctores de la ley y ellos hicieron una reunión formal. Esto es muy peligroso. Hay que tomar una decisión. Reconocen sus milagros. El pueblo se irá con ellos y nos dejará. Y los romanos destruirán nuestro templo y nuestra nación. Una justificación. Odiaban al ocupador romano, pero políticamente habían encontrado un equilibrio”

“Uno de ellos, Caifás, el más radical: 'Es conveniente que un solo hombre muera por todo el pueblo'. Hace la propuesta: eliminémoslo. Juan dice que profetizó que Jesús debía morir por la nación. Y decidieron matarlo. “

“Todo un proceso, que comenzó con pequeñas preocupaciones y terminó en esta sesión. UN proceso que crecía, que cada vez estaba más seguro de la decisión que había que tomar: Este tiene que ser eliminado. Esta forma de proceder de los doctores de la ley es una figura de cómo actúa la tentación en nosotros.Esto era obra del diablo que quería destruir a Je´sus. Así actúa la tentación en nosotros. Comienza con poca cosa, un deseo una idea. Crece, se contagia a otros y, al final, se justifica. Estos son los tres pasos de la tentación del diablo en nosotros. Comenzó con poca cosa, crece y se contagia a los otros y, al final, se justifica: Es necesario que muera uno por el pueblo”

“Y todos se fueron a casa tranquilos. Todos nosotros, cuando seamos vencidos por la tentación, terminamos también tranquilos, porque hemos encontrado una justificación para el pecado”

“Tendremos que tener la costumbre de ver este proceso de la tentación e nosotros. Un proceso que nos hace cambiar el corazón del bien al mal y nos lleva por el mal camino...Difícilmente nos vienen las tentaciones de golpe. El diablo es astuto y sabe hacer este camino. Cuando nos encontramos en un pecado, en una caída, lo primero es pedir perdón al Señor. Y después, preguntarse: ¿cómo inició este procesó, cómo creció, a quién contagié y cómo me justifiqué para caer? La vida de Jesús es un ejemplo para nosotros. Y lo que le pasó a Él terminará pasándonos a nosotros. Gente buena que viene a nosotros y, a menudo, no la escuchamos. No olvidemos nunca que siempre detrás de un pecado o de una caída está una tentación que comenzó con poco, creció, se contagió y, al final, encontró una justificación para pecar. Que el Espíritu Santo nos ilumine en esta consciencia interior”.