Bach, concierto para dos violines BWV 1043

¡Feliz domingo! Hoy es la solemnidad de Pentecostés y Bach se va a encargar de darle un brillo especial. Será con una obra que sí es verdaderamente conocida, especialmente con el dúo de amor que representa su increíble segundo movimiento.

Antes vamos con algo de la biografía de Johann Sebastian Bach (1685-1750), compositor alemán nacido en Eisenach. Dejamos a Bach con sus cualidades tocando en órgano en Leipzig. Tres veces al año había allí una feria que significaban un revulsivo para la ciudad hasta el punto que las escuelas cerraban y casi todo el mundo se veía envuelto en ellas. Sin duda, el por entonces mayor órgano de Sajonia (el de San Pablo) y el mejor organista alemán vivo (Bach) constituían una gran atracción para esas ferias. Es posible que interpretase sus conciertos para órgano con acompañamiento de cuerdas que posteriormente transformaría en sus conciertos para clave, algo que también había hecho en Dresde para alegría de todo el mundo. Desde el punto de vista musical, Bach era único en Leipzig y no tenía ningún rival posible.
Escuchemos el Concierto para dos violines, cuerdas y continuo en re menor, BWV 1043; es conocido habitualmente como Doble Concierto. Se baraja entre 1717 y 1723 la fecha de composición, es decir, mientras estaba en Cöthen. Aunque no tiene la sensualidad de la obra de Vivaldi (la educación de Bach desde el punto de vista del luteranismo lo marcó mucho) sí está lleno de lirismo. Se abre el concierto con un movimiento en forma de fuga con dos temas que contrastan y que se desarrollan en un ritornelo. El movimiento centrar es, como dije en la introducción, una conversación de amor entre dos amantes (los violines) que se solapan y se entrelazan. Termina con un movimiento en compás ternario que casi es una sonata en forma embrionaria.
La partitura de la pieza puede descargarse aquí.
La interpretación es de Shunske Sato y Emily Dean (violines) y la Netherlands Bach Society.