Declaración de la Comisión Permanente del Episcopado La Iglesia argentina critica las peleas verbales "no exentas de crueldad" de los políticos

Advirtió que esos lenguajes "atentan seriamente contra la unidad que tanto necesitamos como pueblo" y anheló que la enorme solidaridad ante la catástrofe en Bahía Blanca, que mostró que "nos necesitamos los unos de los otros", les sirva para recapacitar
“Constrastando con este inmenso dolor, no deja de ser un signo de esperanza la reacción espontánea de nuestro pueblo de una compasión que baja a las manos, que se hace gesto de ternura, llegando incluso hasta el heroísmo de dar la vida”, dice el pronunciamiento
| Sergio Rubin
(Valores Religiosos).- La Iglesia criticó duramente este miércoles las descalificaciones entre los políticos y los dirigentes en general, al señalar que “los lenguajes despreciativos, por momentos no exentos de crueldad, atentan seriamente contra la unidad que tanto necesitamos como pueblo” y anheló que la solidaridad puesta de manifiesto ante la catástrofe en Bahía Blanca, que evidenció que “nos necesitamos los unos a los otros”, les sirva para recapacitar.
Fue a través de una declaración de la comisión permanente de la Conferencia Episcopal -el organismo que congrega a todos los obispos del país-, que realiza esta semana en Buenos Aires su primer encuentro del año y que comienza expresando su “profundo dolor por la tragedia de Bahia Blanca, especialmente de los que perdieron a los seres queridos, y de los que quedaron sin casa, sin bienes”.
“Constrastando con este inmenso dolor, no deja de ser un signo de esperanza la reacción espontánea de nuestro pueblo de una compasión que baja a las manos, que se hace gesto de ternura, llegando incluso hasta el heroísmo de dar la vida”, dice el pronunciamiento titulado “Transformar los signos de los tiempos en signos de esperanza”.

Tras afirmar que “la solidaridad es una muestra evidente que nos necesitamos los unos a los otros”, señalan que “valoramos agradecidos cómo en medio de la catástrofe, las distintas instituciones, al organizar seria y delicadamente la solidaridad, rescatan, salvan y ayudan a sostener empecinadamente viva la esperanza”.
“Qué bueno sería que esta actitud de cuidar la dignidad de la persona humana, sobre todo cuando se muestra más vulnerable, ayude a dar respuesta a la otra realidad que se advierte tristemente en nuestra sociedad y en la dirigencia”, dicen en una implícita referencia a los duras polémicas que surcan diariamente la escena nacional.
En ese sentido precisan: “Nos referimos a las actitudes y expresiones que lastiman, a esos lenguajes despreciativos, por momentos no exentos de crueldad, que atentan seriamente contra aquella unidad que tanto necesitamos como pueblo, para ponernos la patria al hombro, para salir adelante”.
Texto completo del comunicado:
Transformar los signos de los tiempos en signos de esperanza
"La esperanza no será defraudada" (Rom. 5,5)
En estos días de encuentro como Comisión Permanente de la Conferencia Episcopal Argentina, no podemos estar ajenos a las realidades que vivimos como argentinos.
Por un lado, el profundo dolor ante la tragedia en Bahía Blanca, especialmente de los que perdieron a sus seres queridos, y de los que quedaron sin casa, sin sus bienes. En un abrir y cerrar de ojos se derrumbó el fruto de años de trabajo, esfuerzo y sacrificio? y sus sueños. La expresión de nuestra gente es muy fuerte: "¡Perdimos todo!".
Compartimos el #mensaje de los obispos reunidos en la 199° Reunión de la #ComisiónPermanente del @EpiscopadoArg: "Transformar los signos de los tiempos en signos de #esperanza".#199CP#Comunicación#CEAhttps://t.co/mEpc4aKyOR
— Conferencia Episcopal Argentina (@EpiscopadoArg) March 12, 2025
Contrastando con este inmenso dolor, no deja de ser un signo de esperanza la reacción espontánea de nuestro pueblo de una compasión que baja a las manos, que se hace gesto de ternura, llegando incluso hasta el heroísmo de dar la vida. La solidaridad es una muestra evidente que nos necesitamos unos a otros. Valoramos agradecidos cómo en medio de la catástrofe, las distintas instituciones, al organizar seria y delicadamente la solidaridad, rescatan, salvan y ayudan a sostener empecinadamente viva la esperanza.
Qué bueno sería que esta actitud de cuidar la dignidad de la persona humana, sobre todo cuando se muestra más vulnerable, ayude a dar respuesta a la otra realidad que se advierte tristemente en nuestra sociedad y en la dirigencia. Nos referimos a las actitudes y expresiones que lastiman, a esos lenguajes despreciativos, por momentos no exentos de crueldad, que atentan seriamente contra aquella unidad que tanto necesitamos como pueblo, para ponernos la patria al hombro, para salir adelante.
Ambas realidades dejan en claro la necesidad de que "rescatemos" a la persona y su dignidad, que la pongamos en el centro de nuestros intereses, de nuestros servicios, y proyectos.
Por supuesto, en estos días la salud del Papa Francisco ha ocupado nuestra oración, porque además del profundo cariño que le tenemos, necesitamos sus palabras y gestos que son para el mundo un testimonio del cuidado de la dignidad de cada ser humano y de la casa común. Su inspiración y su coherencia nos ayudan a caminar juntos hacia un mundo justo, solidario y fraterno.
El jueves 13 de marzo a las 19 h. en la Catedral de #BahíaBlanca (Sarmiento 72) se celebrará una Misa pidiendo a Dios el consuelo para las víctimas de la inundación y dando gracias por toda la solidaridad que en estos días une y renueva en la esperanza.#Comunicación#CEApic.twitter.com/sovx5LgIMB
— Conferencia Episcopal Argentina (@EpiscopadoArg) March 12, 2025
Estamos celebrando el jubileo bajo el lema "Peregrinos de esperanza". Deseamos que estos 'signos de los tiempos' positivos de humanidad y compromiso, fuentes de esperanza y de paz, destierren a los de deshumanización e indiferencia, fuentes de división y resentimiento (Cf. Bula convocatoria al Jubileo 7).
Que la Virgen de Luján, patrona de la Argentina, nos ayude a mirar con el corazón, y a cuidar con nuestras obras la fragilidad de nuestro pueblo.