Istmina, Medio San Juan, Litoral de San Juan y Bajo Baudó, en el Departamento de Chocó, Colombia, son los municipios afectados por grupos insurgentes y bandas criminales que amenazan a las comunidades afrodescendientes e indígenas wounaán por el control del territorio.
Hacia un humanismo integral
“Nuevamente, en nombre de la Diócesis de Istmina-Tadó, dirijo un nuevo llamado en bien de la paz y la reconciliación, camino hacia un humanismo integral, para estas comunidades de hermanos afrodescendientes, wounaán y mestizas”, se lee en la nota publicada por Monseñor Álvarez Gómez.
#VuelveYJuega el desplazamiento y la violencia en el Chocó.
1200 desplazados en Itsmina... Y no pasa nada.https://t.co/Rf7aqZCXI5— Juan Pablo Calvás (@JuanPabloCalvas) September 27, 2021
En este contexto, el prelado urge la presencia del Estado y de organismos nacionales e internacionales, “cuya razón de ser fundamental es la vigilancia y cuidado de los derechos humanos integrales”. Así como también, pide a la Iglesia, a través de la Santa Sede, de los episcopados europeo, estadounidense, de las Cáritas, e instituciones eclesiales para que constaten y tiendan la mano ante la situación compleja que viven estas poblaciones.
Acoso a comunidad indígena Wounaán
El comunicado diocesanohace referencia a la visita pastoral y humanitaria realizada el 24 y 25 de septiembre, por parte de una comisión de Pastoral Social de la Diócesis de Istmina, junto a las Alcaldías Municipales de Istmina y Medino San Juan, la Defensoría del Pueblo, ACNUR, WOUNDEKO (Consejo de Autoridades del Pueblo Wounaán de Colombia), en la cual se constataron los “acosos que sufren las comunidades indígenas Wounaán de La Unión Chocó, San Cristóbal, Puerto Olave, La Lerma y Unión Wounaán, de manos de las AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) o Clan del Golfo y del ELN (Ejército de liberación nacional), por el dominio de territorios.
#EsNoticia | Decenas de líderes junto con sus familias recorrieron diferentes calles de #Quibdó y exigieron a las autoridades el cese de la violencia, lo más preocupante dicen que ya van más de 100 homicidios y en su mayoría son de jóvenes de la Zona Norte.https://t.co/Gt8gs2oxVb
— CNC CHOCÓ (@cncchoco) September 27, 2021
Según las cifras presentadas por las instituciones, un total de 1.200 personas estarían desplazadas de sus territorios. En el municipio de Puerto Olave se han acogido a 250 familias y se abrió un corredor humanitario,para acompañar el traslado a lugares más seguros, de unas 584 personas de la comunidad Wounaán, reunidas en 118 familias.
Voz y acción de la Iglesia
“La Iglesia de Istmina-Tadó, con la Iglesia Católica en general, no ceja en el empeño de ser voz y acción de todos los que, sin ninguna distinción, claman por la justicia y la verdad. Todo homicidio es un fratricidio y la sangre humana, derramada como consecuencia de la espalda que le damos a Dios”, concluye el comunicado.
Finalmente, el prelado anuncia que la semana del 11 al 15 de octubre, la diócesis de Istmina, en unión con la Coordinación Regional del Pacífico Colombiano (CRPC), los Consejos Comunitarios Mayores y Menores, los Cabildos Indígenas de Istmina y Medio San Juan estarán visitando estas comunidades. Asimismo darán a conocer el llamado “Pacto por la vida y la paz” que tendrá lugar el 2 de octubre, en Ciudad Mutis, municipio de Bahía Solano.
🟢 REGIONES | Iglesia lanza SOS por amenazas a comunidades en San Juan y litoral pacífico chocoano. Obispo de Istmina-Tadó, advierte de posibles genocidios que podrían llegar a ocurrir en estos territorios del pacífico.https://t.co/gydqwk3OfCpic.twitter.com/10w0ys4XUP
— Conferencia Episcopal de Colombia (@episcopadocol) September 27, 2021