Haz desierto en tu corazón 13 Año de Oración
El desierto, lugar de la Palabra
13 Año de preparación para el jubileo 2025
Año de oración
“Yo, el Señor, he hablado. Estableceré con mi rebaño una alianza de paz: exterminaré los animales dañinos de la tierra para que pueda habitar seguro en el desierto y dormir en los bosques. De bosques y desiertos en torno a mi montaña haré una bendición. Enviaré la lluvia a su tiempo, lluvia de bendición” (Ez 34, 24-26).
El desierto Lugar de la Palabra
Dios recrea el desierto en lugar habitable, donde pasan las cosas de Dios y el alma, cunado nada ni nadie estorba el encuentro.
En el desierto cabe hacerse como roca áspera o como la arena suave y obediente al viento del Espíritu. En poco tiempo se recorren los extremos más contrarios; se puede pasar de la llamada al abismo y a la desesperanza al éxtasis inenarrable del beso de Dios. Es posible experimentar la soledad más terrible o llegar a confesar, sin inventarlo, que la vida está en las manos paternales de Dios. En el desierto el tiempo puede ser violento o pasar como un soplo.
El desierto es fuerte, recio, árido y a la vez fascinante por su anchura y claridad, donde se descubre otra belleza más honda y se escucha otra voz más profunda, muchas veces no sin dolor. El desierto, lugar de silencio y soledad, es tierra matriz, se percibe con sorpresa la voz en las entrañas, un sentimiento desconocido, que anida donde no entra ni puede entrar nadie y producen la atracción del manantial o el miedo a lo desconocido.
Propuesta
Haz desierto en tu corazón