Renueva tu fe, tu bautismo, tu opción de vida. 11 de enero: Creer en la Iglesia
Tiempo de Comunión
11 de enero
Preparación renovación bautismal
Texto bíblico
“¿Quién es el que vence al mundo sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios? Este es el que vino por el agua y la sangre: Jesucristo. No solo en el agua, sino en el agua y en la sangre; y el Espíritu es quien da testimonio, porque el Espíritu es la verdad. Porque tres son los que dan testimonio: el Espíritu, el agua y la sangre, y el testimonio de los tres es único” (1Jn 5, 5-8).
Reflexión
El Credo de Nicea profesa: “Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro”. Y el rito de la renovación de las promesas bautismales, termina con las palabras del ministro: “Que Dios todopoderoso, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos regeneró por el agua y el Espíritu Santo y que nos concedió la remisión de los pecados, nos guarde en su gracia, en el mismo Jesucristo nuestro Señor, para la vida eterna”. Y todos responden: Amén.
El testimonio requiere varios testigos para que pueda darse crédito a lo que se afirma. Jesús, en conversaciones con Nicodemo, afirma: “En verdad, en verdad te digo: El que no nazca de agua y de Espíritu no puede entrar en el reino de Dios. Lo que nace de la carne es carne, lo que nace del Espíritu es espíritu. No te extrañes de que te haya dicho: “Tenéis que nacer de nuevo” (Jn 3, 5-7). El nuevo nacimiento acontece por el sacramento del bautismo y por el perdón de los pecados.
Es momento propicio para confesar el Credo y para recibir el don de la misericordia, como celebración de la renovación bautismal, y para lucrar la gracia del jubileo.
Propuesta
Renueva tu fe, tu bautismo, tu opción de vida.