Estoy contigo
| Toño Casado
Pues Yo estoy siempre contigo
hasta que el mundo se acabe.
Cuando vas por el camino
y te arrastran los pesares,
cuando sientes que tu carga
es cual cruz insoportable,
ya no brillan las estrellas,
el futuro es una calle
oscura, sin rumbo fijo,
y nadie te mira, nadie,
yo me siento cerca tuyo
y con cariño mirándote
me reflejo en cada lágrima
secreta que derramaste.
Cuando braman los políticos
y el futuro huele a sangre,
no llueve sobre la tierra,
y el sueldo se hace menguante,
cuando vuelan los recuerdos
y las personas que amaste
son solo fotografías
que se fue llevando el aire,
cuando duelen abandonos
y gente que te dejaste,
pues Yo estoy siempre contigo
con tu corazón que aún late.
No me perdí en las alturas
ni en los reinos celestiales,
no me quedé en las Iglesias
sobre los oros y altares.
Que sepas que estoy contigo,
cada vez que respiraste,
cada sol que te levantas,
cada noche que te caes.
No estás solo, vida mía,
no estás solo, aunque sangres,
aunque te duela la vida,
mientras rías o mientras hables,
mientras sueñas, mientras luchas,
mientras seas ciclón o seas cobarde,
yo estaré todos los días
en mi Corazón guardándote,
siempre muy cerca de ti,
aunque no sepas mirarme.
No estás solo, no está sola,
Yo estoy contigo mirándote
cuando termina el poema.
Yo estoy contigo mirándote
con un Amor que ni sueñas.
Yo estoy contigo.
Y lo sabes