Día Jubilar en la Parroquia San Jaime Apóstol Moncada con motivo del Año Jubilar Cáliz de la Pasión, celebración en el día de la fiesta del milagro eucarístico que presenció Inés, una niña de corta edad, en la Navidad de 1392, cuando vio al Niño Jesús en la forma que levantaba el sacerdote en el momento de la consagración durante varias misas seguidas a las que acudió con su madre.

La pequeña que asistía a MIsa con su madre ayudó a disipar las dudas sobe su consagración al sacerdote que regía la cura de almas en la época en que ocurrió, durante el Cisma de Occidente, por haber sido ordenado por un obispo que seguía a un Papa considerado cismático. La pequeña fue sometido a unas pruebas con hostias consagradas y otras no, señalando curiosamente las consagradas al decir que en ellas veía al "chiquet", el Niño Jesús cuando éstas eran consagradas en Misa o tras ella.

El sacerdote que dudaba de su consagración, quedó tranquilo al ver que milagrosamente se confirmaba su validez. El acto se suspendió por la pandemia y se ha recuperado con la nueva normalidad, precisamente en el día que comienza la etapa sin mascarillas, una docena de pueblos.

Cuando se decretó el Año Jubilar del Santo Cáliz de la Pasión del Señor el cardenal declaró templos jubilares los de aquellos municipios de la Diócesis donde a lo largo de la historia habían ocurrido milagros eucarísticos.  En Moncada está el Seminario Metropolitano, el Seminario Comboniano, el Seminario de los Legionarios de Cristo, la Casa Madre de las Hermanas Terciarias de la In maculada y otras comunidades religiosas. Párroco de la parroquia histórica de Moncada es el joven y dinámico sacerdote, Javier Grande, hermano del presidente de Cáritas Diocesana, Nacho Grande.

Fue un día lleno de bendiciones para toda la comunidad parroquial, pueblo de Moncada y Diócesis de Valencia, pequeña Inés fuente de amor y gratitud para todos junto al Señor. La celebración la presidió el Cardenal Antonio Cañizares, Arzobispo de Valencia, comenzando con una pequeña procesión y la apertura de la puerta santa de la parroquia. En su homilía, se refirió a la niña Inés como una fuente de bendición para Moncada, conocer a Jesús, dejarnos amar por él, amarlo a él y unos a otros en este tiempo jubilar. Desde que murió Inés en Moncada hay un resplandor, con la presencia de Cristo y gratitud en oración.

El Cardenal Arzobispo Antonio Cañizares, durante al celebración, anunció el impulso para el proceso de inicio de beatificación y canonización de la Venerable pequeña Inés, que con gran alegría recibió el párroco Javier Grande y resto de asistentes, una gran noticia para la comunidad y pueblo de Moncada.

Al finalizar se bendijeron unas pinturas del milagro de la pequeña Inés, que serán colocadas cerca del lugar donde por primera vez vió en las formas consagradas al niño Jesús, al "chquet".