Los documentos de la CEE y el Sínodo, protagonistas del #resumensemanal de Religión Digital Del PRIVA al Instrumentum Laboris: ¿Puede la Iglesia avanzar sin el pueblo de Dios?

Seguimos como Iglesia sin contar con las víctimas en la toma de decisiones, y eso es fundamental denunciarlo. Independientemente de que las víctimas se estén convirtiendo en una pieza de juego político, que desde aquí también denunciamos, y pedimos a Iglesia, Gobierno e instituciones que dejen de jugar con las víctimas, que las pongan en el centro. Haced lo que ellas os digan, escuchadlas

Se han orillado del Instrumentum Laboris del Sínodo todos los temas de frontera, todos los temas polémicos: el celibato, el papel de la mujer, la cuestión LGTBI… aspectos que se han orillado en el debate que tendrá lugar en el aula del Sínodo, para primar el hecho en sí de la sinodalidad, lo cual está muy bien en el largo plazo, en esa carrera de fondo para construir una Iglesia más participativa

No perdamos de vista la figura del santo pueblo de Dios. No permitamos que una vez que se ha conseguido entrar, con voz y voto, en la asamblea sinodal, que los temas importantes se debatan en otro lado. Eso tampoco es evangelio

Esta semana ha venido marcada por dos eventos fundamentales. En España, por la aprobación del PRIVA, cuyo contenido habíamos adelantado en exclusiva en RD, y en el Vaticano por la presentación del Instrumentum Laboris de la segunda etapa del Sínodo Mundial de octubre.

Dos momentos intensos, con sus puntos positivos y negativos. En el PRIVA, vemos un gran avance innegable a lo que se hacía desde la Iglesia hace 15, 10 o incluso dos años, cuando el hoy presidente de la CEE prácticamente negaba, desde su puesto como secretario general, que existiera pederastia en la Iglesia española.

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Hoy ya nadie niega esa realidad, pero continuamos sin tener en el centro a las víctimas, lo cual es fundamental para el presente y el futuro, para erradicar la cultura de los abusos y el dominio en la iglesia, que hunde sus raíces en una cultura de poder, que nada tiene que ver con el Evangelio. Seguimos como Iglesia sin contar con las víctimas en la toma de decisiones, y eso es fundamental denunciarlo. Independientemente de que las víctimas se estén convirtiendo en una pieza de juego político, que desde aquí también denunciamos, y pedimos a Iglesia, Gobierno e instituciones que dejen de jugar con las víctimas, que las pongan en el centro. Haced lo que ellas os digan, escuchadlas.

Los obispos aplauden las palabras de Argüello en la clausura de la plenaria extraordinaria
Los obispos aplauden las palabras de Argüello en la clausura de la plenaria extraordinaria RD/Captura

Vimos cómo no acudió ninguna víctima a la Asamblea Plenaria Extraordinaria, a pesar de que estaban invitadas. Eso es algo que deberíamos pensar.

También deberíamos pensar cómo se han orillado del Instrumentum Laboris del Sínodo todos los temas de frontera, todos los temas polémicos: el celibato, el papel de la mujer, la cuestión LGTBI… aspectos que se han orillado en el debate que tendrá lugar en el aula del Sínodo, para primar el hecho en sí de la sinodalidad, lo cual está muy bien en el largo plazo, en esa carrera de fondo para construir una Iglesia más participativa.

Presentan el Instrumentum Laboris para el Sínodo de octubre
Presentan el Instrumentum Laboris para el Sínodo de octubre

Pero si no se habla de estos temas haremos una Iglesia mucho más coja. Es verdad que el Papa ha convocado diez comisiones para abordar estos y otros temas, pobres, formación de seminarios, evangelización digital… y es sumamente importante, pero no perdamos de vista la figura del santo pueblo de Dios. No permitamos que una vez que se ha conseguido entrar, con voz y voto, en la asamblea sinodal, que los temas importantes se debatan en otro lado. Eso tampoco es Evangelio.

Cumplimos dos meses del cisma de Belorado, sigue adelante el movimiento impulsado por Viganò, hay un movimiento que se dice católico y que campa a sus anchas en España y en otros países, y al que hay que hacer frente. Lo haremos, y lo contaremos, aquí, en Religión Digital.

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