"Dios llega gratis. Acojamos el don que es Jesús, para luego transformarnos en don como Jesús" En la Misa del Gallo, Francisco llamó a "cambiar el mundo, la Iglesia y la historia"
Previo a su séptima Navidad como Papa, Bergoglio criticó hoy "la lógica de dar para tener" y convocó a una conversión "haciendo de nuestra vida un don"
Fuerte expectativa por el mensaje de mañana, en el que hará referencias a una serie de conflictos actuales de todo el mundo como Venezuela, Siria y Tierra Santa
Hernán Reyes Alcaide, corresponsal en el Vaticano
El papa Francisco llamó hoy a "cambiar el mundo, la Iglesia y la historia", al celebrar en el Vaticano su séptima Misa del Gallo como pontífice.
"Acojamos el don que es Jesús, para luego transformarnos en don como Jesús. Convertirse en don es dar sentido a la vida y es la mejor manera de cambiar el mundo: cambiamos nosotros, cambia la Iglesia, cambia la historia cuando comenzamos a no querer cambiar a los otros, sino a nosotros mismos, haciendo de nuestra vida un don", planteó el pontífice durante su homilía en la tradicional misa de la Basílica de San Pedro.
"Mientras que aquí en la tierra todo parece responder a la lógica de dar para tener, Dios llega gratis", agregó luego.
No esperó a que fuéramos buenos
En un mensaje centrado en la "gratuidad" que para la tradición católica tiene la figura de Jesús, el pontífice evitó criticar al consumismo o la voracidad humana, como sí había hecho en años anteriores.
"Jesús nos lo manifiesta esta noche. No cambió la historia constriñendo a alguien o a fuerza de palabras, sino con el don de su vida", recordó el Papa a los fieles que colmaron la nave central de la Basílica vaticana.
"No esperó a que fuéramos buenos para amarnos, sino que se dio a nosotros gratuitamente. Tampoco nosotros podemos esperar que el prójimo cambie para hacerle el bien, que la Iglesia sea perfecta para amarla, que los demás nos tengan consideración para servirlos", planteó el Papa en esa dirección.
"Empecemos nosotros", señaló , acompañado por 40 cardenales, 25 obispos y más de 250 sacerdotes que concelebraron la misa con él.
La celebración, como es costumbre, había iniciado con puntualidad a las 21.30 de Roma con el canto del himno conocido como "Kalenda", que marca el anuncio de la Navidad.
Doce niños de Irak, Venezuela...
Al final de la misa, el Papa llevó una estatua del Niño Jesús en procesión al pesebre de la Basílica Vaticana, acompañado por 12 niños provenientes de diversos países del mundo, entre ellos Irak y Venezuela, quienes llevaron consigo sus homenajes florales.
Al finalizar la misa de este martes, las miles de personas que acudieron a la basílica pudieron contemplar en el centro de la plaza de San Pedro el pesebre levantado delante del obelisco, realizado con madera proveniente de una tragedia climática: el temporal Vaia que azotó el noroeste italiano en 2018.
Mañana, Jorge Bergoglio dirigirá su mensaje de Navidad al mundo, en el que repasará su preocupación por varios de los conflictos actuales en el mundo e impartirá la bendición "Urbi et Orbi" (a Roma y el mundo) desde el balcón de la Logia central de la Basílica. Se esperan fuertes mensajes por la paz en general y en particular sobre Tierra Santa, Siria y Venezuela.
