Joseba Segura: "Si la gente quiere sentir que está acompañada por Dios, yo creo que sí se debe bendecir" Fernando Prado, ante las bendiciones a parejas 'irregulares' y uniones gay: "No podemos mirar hacia otro lado. No podemos mandarlos al infierno"
"Yo creo que es normalizar algo que es muy habitual" recalca el obispo de San Sebastián en entrevista con El Diario Vasco, en la que aclara que "esto está pensado para personas que son creyentes", que "cuando acuden a pedir una bendición a la Iglesia es porque lo necesitan"
El obispo de Bilbao entiende que "estas cosas se han hecho habitualmente, y de forma totalmente natural, en la Iglesia"
"Nosotros no podemos mirar hacia otro lado. No podemos mandarlos al infierno, sino que los tendremos que acoger desde su misericordia, desde la caridad. Debemos acoger a estas personas y comprender su situación". Claro y rotundo, el obispo de San Sebastián, Fernando Prado, se muestra a favor de la declaración vaticana que permite la bendición a parejas en situación 'irregular, y uniones de personas del mismo sexo.
"Yo creo que es normalizar algo que es muy habitual" recalca el prelado en entrevista con El Diario Vasco, en la que aclara que "esto está pensado para personas que son creyentes", que "cuando acuden a pedir una bendición a la Iglesia es porque lo necesitan".
"Detrás de tantas personas hay mucho sufrimiento, y ante el sufrimiento de esa gente podemos pensar: ¿acaso Dios no se preocupa por ellas? Pues claro, y la Iglesia se tiene que preocupar de ellas. Esta manera de dar una bendición es una forma de acoger, lo que no significa que pueda dar una legitimación a una situación irregular", recalca el obispo de San Sebastián, quien entiende que "una bendición es decir bien a alguien a quien al fin y al cabo lo único que le queda en esta vida es acudir a Dios, reclamar una respuesta de la Iglesia. Y esta no puede ser ajena al sfrimietno de las personas que viven queriendo responder a la voluntad de Dios".
Una bendición "no significa que estemos aplaudiendo lo que hacen ni legitimando un matrimonio que no se puede dar, pero sí acogerles y darles una bendición que les ayude a entender en la vida que en la Iglesia no son rechazados", apostilla Prado, que no ve problema en que los sacerdotes practiquen esta forma de misericordia.
"Yo lo hago y lo haré con total normalidad. En todas las eucaristías el sacerdote da unas bendiciones al terminar y nunca se ha preguntado a las personas presentes por sus situaciones personales. Puedo decir que lo vengo haciendo desde que soy sacerdote", remacha.
Además de Prado, otro obispo vasco, Joseba Segura, también quiso abordar esta cuestión. En una entrevista publicada en la Diócesis de Bilbao, recuerda su etapa de misionero en Ecuador, donde “nadie se casa", se encontraba con estas situaciones de forma cotidiana.
"Cuando estás en una celebración, todas esas personas están en la eucaristía, y muchas vienen a pedir la bendición, no es una práctica extraordinaria la que el papa está promoviendo. Lo que pasa que como hay un contexto de sensibilidad en este momento en el que están mirando a ver si el Papa da este paso o da el otro paso. Y resulta que estas cosas se han hecho habitualmente, y de forma totalmente natural, en la Iglesia".
"Bendecir significa decir bien", asegura el obispo de Bilbao. "Y claro, ¿no vas a pedir que Dios acompañe a una persona? Eso lo hemos hecho permanentemente en la Iglesia católica", finaliza Segura, quien apunta que "esta concreción respsecto a las parejas es una extensión de eso mismo. Si la gente quiere sentir que está acompañada por Dios, yo creo que sí se debe bendecir".