Algunas están inspiradas en el método de Verdad y Libertad, grupo español que prohibió el Vaticano Italia, el 'paraíso' de las terapias de conversión gay que promueve la Iglesia
Lo encerraron en un armario oscuro, lo obligaron a desnudarse delante de sus compañeros e incluso le pidieron que representara su propio funeral. Durante estos rituales, tenía que plasmar en papel lo que se percibía como sus defectos, como ‘homosexualidad’, ‘abominación’, ‘falsedad’
Esas fueron parte de las prácticas que se vio obligado a hacer durante más de un año el joven Rosario Lonegro quien, tras entrar con 20 años a un seminario católico en Sicilia (Italia), se enamoró de otro hombre y sus superiores “le exigieron” someterse a una terapia de conversión fuera del seminario
“La terapia de conversión gay no se limita a una región concreta de Italia: hay reuniones de grupo y sesiones de terapia individual por todo el país, algunas incluso dirigidas por psicoterapeutas licenciados”
“La terapia de conversión gay no se limita a una región concreta de Italia: hay reuniones de grupo y sesiones de terapia individual por todo el país, algunas incluso dirigidas por psicoterapeutas licenciados”
“Lo encerraron en un armario oscuro, lo obligaron a desnudarse delante de sus compañeros e incluso le pidieron que representara su propio funeral. Durante estos rituales, tenía que plasmar en papel lo que se percibía como sus defectos, como ‘homosexualidad’, ‘abominación’, ‘falsedad’, e incluso términos más explícitos, que luego se veía obligado a enterrar bajo una lápida simbólica”.
Esas fueron parte de las prácticas que se vio obligado a hacer durante más de un año el joven Rosario Lonegro quien, tras entrar con 20 años a un seminario católico en Sicilia (Italia), se enamoró de otro hombre y sus superiores “le exigieron” someterse a una terapia de conversión fuera del seminario, según ha narrado a la BBC. “Fue el período más oscuro de mi vida”, confiesa sobre el de aquel año 2017 en el que pretendió erradicar su orientación sexual.
Prohibidas en España, Francia, Alemania, y trabajando para su ilegalización tanto en Inglaterra como en Gales, en Italia -según contaron los expertos consultados por la BBC- se duda en prohibir estas prácticas en parte debido “a la fuerte influencia católica del país”, aunque, como también señala la profesora Valentina Gentile, socióloga de la Universidad LUISS de Roma, “también es justo decir que no todo el catolicismo es hostil a la inclusión de la diversidad y que la propia Iglesia se encuentra en un período de fuerte transformación en este sentido”.
Aunque ha habido intentos por parte de gobiernos anteriores de promover una ley que prohibiera en Italia estas terapias de conversión, “no se ha logrado ningún avance” y no parece que se vaya a dar ningún paso en ese sentido con el actual gobierno de la ultraderechista Giorgia Meloni, quien “ha adoptado hasta ahora una postura hostil hacia los derechos LGBT".
En todo caso, “la terapia de conversión gay no se limita a una región concreta de Italia: hay reuniones de grupo y sesiones de terapia individual por todo el país, algunas incluso dirigidas por psicoterapeutas licenciados”, prosigue la información, que subraya igualmente que, aunque en algunos casos estas sesiones son encubiertas, “otros cursos se anuncian públicamente, y figuras conocidas de los círculos conservadores italianos buscan activamente seguidores en Internet y en plataformas de redes sociales para publicitar su capacidad de cambiar la orientación sexual”.
El método de Verdad y Libertad
En Sicilia, Lonegro debió participó sobre todo en las reuniones ‘espirituales’, alguna de varios días de duración, organizadas por el grupo español Verdad y Libertad, dirigido por Miguel Ángel Sánchez Cordón y que “se disolvió tras recibir la desaprobación de la Iglesia católica”, según recoge a misma fuente.
Eso no impidió, sin embargo, que otros siguieran los métodos de Cordón o encontraran en Internet a otros ‘gurús’ como Luca di Tolve, quien consiguió notoriedad con su libro “Yo fui gay una vez. En Medjugorie me encontré a mí mismo” o Giorgio Ponte, “un escritor muy conocido en los círculos ultraconservadores italianos”.
Tras una crisis nerviosa en 2018 que le llevó a dejar tanto la terapia como el seminario, hoy Rosario Lonegro ha salido del armario. Sigue creyendo en Dios, pero ya no quiere ser cura. Aunque tampoco le dejarían.