"Elabora y expande el espíritu de diálogo y respeto de la Iglesia de Portugal" Anselmo Borges: El cura filósofo, que se interroga sobre el futuro del mundo y de la iglesia
Anselmo Borges, cristiano, portugués e ibérico, analista cultural, filósofo y teólogo, es un pensador muy significativo, no sólo por sus libros académicos (cf. nota final), sino por sus colaboraciones semanales en la prensa portuguesa, publicadas muchas de ellas también en RD,donde somos colegas.
Él ha recogido en este libro, de un modo sistemático y bien organizado, unos setenta trabajos breves, publicados muchos de ellos a largo del año pasado (2021) y unidos después (noviembre 2021) en este volumen de ediciones Gradiva, especializada en temas de antropología y psicoanálisis.
Un libro que va ya por la tercera edición en tres meses, lo que muestra el interés que autor y tema han suscitado en Portugal y el extranjero. Aprovecho la ocasión para presentar su obra en castellano y para presentarle como maestro, colega y amigo
Borges busca y propone una iglesia de Jesús, esto es, desde el proyecto de su vida y reino, una iglesia que se adapta a las necesidades del momento actual y, sobre todo, a los impulsos de Cristo y de la iglesia primitiva
Un libro que va ya por la tercera edición en tres meses, lo que muestra el interés que autor y tema han suscitado en Portugal y el extranjero. Aprovecho la ocasión para presentar su obra en castellano y para presentarle como maestro, colega y amigo
Borges busca y propone una iglesia de Jesús, esto es, desde el proyecto de su vida y reino, una iglesia que se adapta a las necesidades del momento actual y, sobre todo, a los impulsos de Cristo y de la iglesia primitiva
Anselmo Borges ha estudiado teología en la Universidad Gregoriana (Roma), Sociología en la École des Hautes Études deParis, y Filosofia en las Universidades de Tubinga y Coimbra, donde recibió su doctorado y actualmente enseña como profesor. Este libro ofrece un testimonio significativo de su magisterio de conjunto, no sólo en la iglesia católica, sino en la cultura religiosa y política, social y personal de otros países, especialmente en España, como indicaré en los siete puntos siguientes, partiendo del libro que ahora presento, El mundo y la iglesia ¿qué futuro?: O mundo e ha igreja. Que futuro?
El libro lleva un prefácio de María de Belem Roseira, que ha sido ministro de Salud, con un postácio de Paulo Rangel, eurodiputado. Su libro sobre el Papa Francisco fue presentado por el Presidente de la República, en la Fundación Gubelkian de Lisboa. Eso indica el clima de diálogo entre cultura y religión que existe el Portugal, a diferencia de España. El libro muestra la capacidad de diálogo de la iglesia, que aquí es menos frecuente. Ante libros como éste, uno siente envidia de Portugal. Bravo, Anselmo Borges.Felicidades Portugal.
1.Anselmo Borges recoge y refleja el mejor espíritu de acogida, diálogo y compromiso social de Portugal, como pude comprobar acompañándole en diversas universidades y centro de estudio el año 2013, con ocasión del lanzamiento de su libro en colaboración: Quem Foi/Quem É Jesus Cristo? Pude entonces descubrir con admiración la gran cultura de convergencia y diálogo político de la sociedad portuguesa (muy por encima de lo que sucede en España).
La cultura es, ante todo, un espacio de cruce y de fecundación de pensamientos. El pueblo portugués que conocí y conozco es un pueblo de inmensa cultura humana, por su humanidad, por su conocimiento de las diversas lenguas, por su espíritu de acogida, de conversación, de diálogo maduro, en humanidad, en sentimiento, en saudade y canto, en poesía. Desde la primera “globalidad portuguesa” de finales del siglo XVI, cuando sus barcos empezaror a cruzar los mares de oriente, todos los hombres y mujeres de esta aldea global somos un poco portuguess.
2.Borges elabora y expande el espíritu de diálogo y respeto de la Iglesia de Portugal, una iglesia sin rupturas interiores, una iglesia donde en principio se busca el consenso y colaboración (no el enfrentamiento) entre diversos grupos y tendencias , tanto en el pueblo como en la jerarquía, a diferencia de lo que suele suceder en España.
Así lo descubrí el año 2001, como profesor invitado de la Universidad Católica de Lisboa, lo seguí viendo y admirando en mi nuevo “curso” con A. Borges el año 2013, desde Braga y Oporto hasta Coimbra y Figueira de Foz. Nunca me sentí extrañado o descartado como extraño o distinto, sino todo lo contrario. Supe que había una comunión de vida por encima de las diferencias o, mejor, a causa de ellos.
3.Tiempo para pensar (págs. 33-153). Este libro de A. Borges se divide en cuatro partes, la primera titulada Tempo para pensar, partiendo del motivo de la COVID 19, que a muchos nos ha obligado a trazar una pausa de reflexión y compromiso en las tareas más urgentes de la vida, no sólo en un plano de búsqueda racional y cristianismo de Iglesia, sino también de vida económica y social.
El gran escándalo que A. Borges ha puesto de relieve está en el hecho de que, en vez de conducirnos a pensar y colaborar en justicia, libertad y fraternidad, la COVID 19 está sirviendo para que aumenten las desigualdades nacionales y sociales con un alarmante crecimiento de riqueza de unas élites insolidarias frente (sobre) a un pueblo pobre. No sólo esté en riego un tipo de cristianismo, sino la misma cultura e incluso la vida humana (la existencia) sobre el mundo. Gracias, Anselmo, por situar en el principio de todos los problemas y caminos el bien de la humanidad, el desarrollo del verdadero pensamiento.
4.La segunda parte del libro (págs. 155-266) se titula El sufrimiento, la muerte y Dios. El tema no es el pensamiento abstracto, la disputa entre las diversas facultades de una universidad o entre diversos tipos de racionalismo como pueden ser el tradicionalismo, o el comunismo o el liberalismo capitalista. El problema que A. Boges ha puesto de relieve no es de ideas, sino de hombres que sufren y mueren (son asesinados), desde el tiempo de Auschwitz hasta la actualidad. El problema no es la verdad abstracta, sino el hambre la muerte, que no es una simple post-verdad, sino la proto-verdad.
Desde el sufrimiento y el hambre (muerte) se plantea la problemática del hombre, en un tiempo lleno de conocimientos y posibilidades, pero condenado a la destrucción, si es que los hombres en conjunto no cambian de forma de vida y comunicación social. Portugal fue el descubridor de la primera globalización humana, entre el siglo XV y XVI. Nadie como un portugués puede plantear el tema con más experiencia histórica y fuerza vital. En esa perspectiva, siguiendo en la línea de la la primera historia de la globalización, A. Borges se plantea con radicalidad el sentido de destrucción de la humanidad, a causa de la opresión de unos sobre otros.
5.La tercera parte del libro trata del Papa Francisco (págs. 267-368), desde una perspectiva histórica y social, teológica y escatológica. Uno puede preguntar: ¿Y por qué viene ahora el Papa Francisco? La respuesta es muy sencilla: Porque Francisco representa la primera y más honda protesta actual contra la deriva de un tipo de iglesia y sociedad que, en su forma actual, desembocan en la muerte, no sólo por injusticia social (imposición de unos sobre otros), sino también por deterioro ecológico, por destrucción del sistema de la naturaleza.
Significativamente, este libro lleva en la portada una interrogación, con la imagen de un incendio que destruye el bosque. Estamos quemando los “bosques” y pastizales del mundo por afán de enriquecernos o, mejor dicho, por deseo de enriquecimiento de algunos, que se aprovechan del incendio da la tierra de todos para medrar ellos. El pecado no está sólo en matar a otros, sino en destruir el planeta de la vida de todos, como ha destacado el Papa Francisco.
Francisco no es sólo el papa Begoglio. Francisco son todos los que buscan la fraternidad con la naturaleza, en un mundo abierto al don de Dios y a su gracia, tal como Francisco ha destacado en Fratelli Tutti.
6.La cuarta parte se titula: Uma Igreja Outra (una iglesia otra, distinta (pags. 369-462). De un modo muy significativo, A. Borges no busca una solución militar (como la que pretenden en ese momento la NATO y Rusia), ni tampoco una respuesta económica, como la que quieren el capitalismo y China, sino una comunión de comunidades, es decir, de iglesias y movimientos religiosos abiertos a la vida.
Borges busca y propone una iglesia de Jesús, esto es, desde el proyecto de su vida y reino, una iglesia que se adapta a las necesidades del momento actual y, sobre todo, a los impulsos de Cristo y de la iglesia primitiva. Éste es el mensaje más profundo del libro de Borges, un menaje de finura, de respecto y diálogo pero, al mismo tiempo, de inmensa exigencia, en línea de gracia y fraternidad, de aceptación de lo que hay y de transformación total del orden mundial.
7.Una reflexión desde España. Esos son algunos de los retos y propuesta de este libro de Anselmo, un libro portugués y universal, que el conjunto de los lectores hispanos deberíamos leer en portugués, quizá la más hermosa y honda de las lenguas romances de Iberia. Para gloria y cultura de Portugal, la mayor parte de los portugueses entienden y leen el castellano (y en inglés), tienen así una cultura más cosmopolita y dialogante que en España.
Pregunto a mis lectores: ¿Cuántos de vosotros conocéis/conocemos a un teólogo portugués? Por el contrario, Anselmo Borges conoce, cita y comenta con profundidad a más de una docena de teólogos españoles, de los que aprende, con los que dialoga, a los que alguna forma enseña y acompaña en el camino de la nueva sociedad y de la iglesia. Aunque solo fuera por eso, los “españoles” de origen deberíamos aprender de su libro.
Uma aperta, amigo Anselmo. Felicidades por tu obra, por tu libro. Un agradecimiento por tu amistad, de parte de Mabel. Nos vemos de nuevo, en Valadarers o Coimbra, o, si te parece mejor, en Salamanca.
OTRAS OBRAS