"En España hay mucha gente que trabaja bien, y hay pequeños grupos de resistencia" Francisco, a RD: "No pierdan la ilusión. Sigan luchando por esta Iglesia viva y dándola a conocer"
En el mismo despacho donde recibiera a Zelenski, Maduro o Raúl Castro, por espacio de media hora, Francisco departió, entre bromas y veras, con nuestro equipo sobre la Iglesia en España, los desafíos de futuro, su salud, los críticos extremos, la cuestión de los seminarios, futuros viajes o la vigencia del Vaticano II
"El Vaticano II fue un gol de media cancha a la Iglesia, que nos ha hecho mucho bien, y que era necesario, aunque todavía no se ha puesto en vigor todo"
“En España hay mucha gente que trabaja bien, y hay pequeños grupos de resistencia. El arzobispo de Madrid tiene que enfrentar una resistencia muy grande, pero es joven y corajudo, apóyenlo”
"Todos estos ‘hongos’ que han surgido ahora, estos sedevacantistas, que buscan cualquier cosita para interpretar a su manera. No es gente mala, es gente triste. Con una tristeza de corazón, les tengo lástima"
“A este viejo le conozco”, dijo Bergoglio al padre Ángel. “¿Me sufre?”, preguntó el presidente de Mensajeros de la Paz. “No, yo gozo contigo”. Y nosotros contigo, Papa Francisco. Y, como nos pides, seguiremos. Haciendo brotar la primavera en primavera. Hasta el día acompañó
“En España hay mucha gente que trabaja bien, y hay pequeños grupos de resistencia. El arzobispo de Madrid tiene que enfrentar una resistencia muy grande, pero es joven y corajudo, apóyenlo”
"Todos estos ‘hongos’ que han surgido ahora, estos sedevacantistas, que buscan cualquier cosita para interpretar a su manera. No es gente mala, es gente triste. Con una tristeza de corazón, les tengo lástima"
“A este viejo le conozco”, dijo Bergoglio al padre Ángel. “¿Me sufre?”, preguntó el presidente de Mensajeros de la Paz. “No, yo gozo contigo”. Y nosotros contigo, Papa Francisco. Y, como nos pides, seguiremos. Haciendo brotar la primavera en primavera. Hasta el día acompañó
“A este viejo le conozco”, dijo Bergoglio al padre Ángel. “¿Me sufre?”, preguntó el presidente de Mensajeros de la Paz. “No, yo gozo contigo”. Y nosotros contigo, Papa Francisco. Y, como nos pides, seguiremos. Haciendo brotar la primavera en primavera. Hasta el día acompañó
“No pierdan la ilusión. Sigan luchando por esta Iglesia viva y dándola a conocer”. El Papa llegó un poco antes de la cita convenida a la sala trasera del Aula Pablo VI, (la auletta) donde recibió al equipo de Religión Digital, acompañados por el padre Ángel y por sor Lucía Caram. En el mismo despacho donde recibiera a Zelenski, Maduro o Raúl Castro, por espacio de media hora, Francisco departió, entre bromas y veras, con nuestro equipo (capitaneado por el director, José Manuel Vidal, y acompañado por Pepe Lorenzo y este cronista) sobre la Iglesia en España, los desafíos de futuro, su salud, los críticos extremos, la cuestión de los seminarios, futuros viajes o la vigencia del Vaticano II.
RD cumple 25 años y lo celebra, con Francisco, en una fecha muy especial: el mismo día en que se cumplen 11 años de aquel 13 de marzo de 2013 en el que los cardenales reunidos en cónclave lo eligieron como sucesor de Pedro, tras la histórica renuncia de Benedicto XVI.
Un día especial, con un regalo especial: las decenas de miles de apoyos recibidos en la campaña RDconelPapa, que Francisco agradeció, mucho, las muestras de apoyo procedentes de todos los rincones del mundo. “Tengo defectos y hago cada vez macanas, pero tengo que agradecer a Dios por la ayuda de tanta gente, gente muy buena. Cuando voy a las parroquias, veo tanta gente buena”.
“Tengo defectos y hago cada vez macanas, pero tengo que agradecer a Dios por la ayuda de tanta gente, gente muy buena. Cuando voy a las parroquias, veo tanta gente buena”
¿Qué podemos hacer desde RD para seguir trabajando por el Concilio Vaticano II, por esta primavera? Francisco fue rotundo: “No pierdan la ilusión. El Vaticano II fue un gol de media cancha a la Iglesia, que nos ha hecho mucho bien, y que era necesario, aunque todavía no se ha puesto en vigor todo”, recalcó. Y una petición directa: “Sigan haciéndolo conocer, sigan dando conocer este bien que es esta Iglesia viva”.
“Sigan luchando”, repitió. “En España hay mucha gente que trabaja bien, y hay pequeños grupos de resistencia. El arzobispo de Madrid tiene que enfrentar una resistencia muy grande, pero es joven y corajudo, apóyenlo”, nos pidió.
Un Papa consciente de que la mayoría rezan por él, pero que bromea sobre si “¿rezan a mi favor?”, y que nos cuenta una anécdota con una anciana que, también, rezaba por él, y lo hacía para bien, “porque en contra le rezan allí dentro”.
“Y… es verdad”, reflexiona Bergoglio. “Hay gente buena, pero que no está de acuerdo” Otra cosa son “todos estos ‘hongos’ que han surgido ahora, estos sedevacantistas, que buscan cualquier cosita para interpretar a su manera. No es gente mala, es gente triste. Con una tristeza de corazón, les tengo lástima”.
Como prometimos, hoy entregamos al Papa los apoyos de RDconelPapa gracias a @pontifex@sorluciacaram y @Padreangelmensa . En breve, crónica https://t.co/WqntpbqJf1@JosMVidal1@joselorenzoloppic.twitter.com/JD1dFfutLk
— Religión Digital (@ReligionDigit) March 13, 2024
Volviendo a nuestro país, el Papa mostró su preocupación por el futuro de la formación en los seminarios, cuya reforma considera “clara” y para la que confía en Jesús Vidal. “Un seminario de 3 o 4 personas no funciona, si no tiene 15 o 20 chicos no va”.
Varias anécdotas: los rosarios, y alguno en especial para nuestros pequeños, más varias cajas para que sor Lucía Caram los lleve a Ucrania (especial fue la emoción papal al escuchar el relato del rosario que la religiosa le entregó, y que perteneció a un soldado ucraniano muerto en el frente, cuya historia relató Francisco en la audiencia posterior), la sorpresa al descubrir la belleza de los dibujos de Agustín de la Torre, y su guiño al padre Ángel. “A este viejo le conozco”, dijo Bergoglio. “¿Me sufre?”, preguntó el presidente de Mensajeros de la Paz. “No, yo gozo contigo”. Y nosotros contigo, Papa Francisco. Y, como nos pides, seguiremos. Haciendo brotar la primavera en primavera. Hasta el día acompañó.