Monseñor Lorca Planes aseguró anteayer que “nunca” se había celebrado una eucaristía con connotaciones políticas La foto de las banderas de la Dictadura y de la Falange, en la puerta de la capilla del seminario de Murcia donde se celebró la misa por Franco
El obispo se ha convertido en cómplice de la mentira y de la actitud permisiva del rector del seminario y obispo auxiliar electo hacia la eucaristía por el Dictador
¿Tendrá monseñor Lorca las agallas necesarias para rectificar y pedir perdón a los medios de comunicación vilipendiados y a su santo pueblo de Dios engañado?
Lo más probable es que cierren filas, busquen a los supuestos 'traidores' hasta debajo de las piedras, y pongan en marcha represalias contra ellos
Lo más probable es que cierren filas, busquen a los supuestos 'traidores' hasta debajo de las piedras, y pongan en marcha represalias contra ellos
“Aseguramos que nunca se ha realizado en ninguno de los seminarios diocesanos (en nuestra Diócesis tenemos tres) un acto político durante la celebración de la Eucaristía, ni en ninguna otra actividad o celebración”. Así reza uno de los párrafos del comunicado con el que el obispo de Murcia, monseñor Lorca Planes, pretendía descalificar “una noticia publicada en un portal web”, sin atreverse siquiera a citar a Religion Digital.
Nuestro portal había denunciado dos días antes que el pasado 20 de noviembre se había celebrado una misa en sufragio de Franco en la capilla del seminario, con la bandera de la dictadura y con el consentimiento del todavía rector del seminario y obispo electo de Cartagena-Murcia, Sebastián Chico.
Pero la vieja técnica del encubrimiento y la igualmente añeja de 'matar al mensajero' para eludir responsabilidades se ve desmentida por los hechos. Obra en nuestro poder la prueba evidente de que el señor obispo, acompañado de toda su Curia, mentía a sabiendas.
Se trata de una foto, en la que aparecen la bandera de la Falange y la antigua bandera española de la época de la dictadura, colocadas a la puerta de la capilla del Seminario Mayor de San Fulgencio, precisamente el día 20 de noviembre, cuando se celebró la eucaristía por el alma de Franco, a petición de cuatro seminaristas que simpatizan abiertamente con Vox y con la ultraderecha.
Y, además, no ocultan su sensibilidad política, porque, como asegura el comunicado del obispo, "en ninguno de los seminarios de la Diócesis de Cartagena se condiciona el pensamiento político de los jóvenes que allí se forman".
En la instantánea se ve claramente que las banderas están en la puerta de la capilla de “Mártires fulgentinos', los cuatro mártires de la guerra civil, que eran seminaristas en el seminario de San Fulgencio.
Las medias verdades del comunicado de monseñor Lorca Planes se vuelven, pues, contra él, que, con su actitud de cierre de filas ante una acusación verosímil y destapada por sus propios curas, se ha convertido en cómplice de la mentira y de la actitud permisiva del rector del seminario y obispo auxiliar electo hacia la eucaristía por el Dictador.
¿Qué hará, ahora, monseñor Lorca Planes? ¿Tendrá las agallas necesarias para rectificar y pedir perdón a los medios de comunicación vilipendiados y a su santo pueblo de Dios engañado? ¿O más bien, se seguirá escondiendo, encubriendo la verdad y llamando a un 'prietas las filas'? ¿Moverá ficha el Nuncio, Renzo Fratini, y hará llegar esta información al Papa, para que no vuelva a ser engañado, a la hora de nombrar obispos?
Conociendo los mecanismos 'mafiosos' de la casta clerical, que tanto denosta Francisco, lo más probable es que cierren filas, busquen a los supuestos 'traidores' hasta debajo de las piedras, y pongan en marcha represalias contra ellos. Al más puro estilo de la camorra. La misma estrategia que la seguida en los casos de abusos sexuales. ¡Es que no aprenden ni se convierten!