No quisiera que tomaras mi silencio por desconsideración a tu persona aunque sepas que no hay nada de eso sino abierta simpatía personal. Pero ya que me dedicas un artículo creo que es de elemental correspondencia responderte con otro. Aunque no tenga claro lo que te pueda decir. Por supuesto que siempre amistosamente.

El que no estemos de acuerdo nos ocurre muchas veces y siempre nos ha servido de motivo de divertimento. Seguro que nuestras charlas serían mucho más aburridas si pensáramos los dos igual.

Lo de zurrar la badana yo no lo tengo tan claro. Me limité a un análisis contable. ¿Le zurra la badana a la Caja de Castilla La Mancha quien dice que su situación económica es insostenible? Yo entiendo que no.

Lo de que tus compañeros, que no sé si son Lamet, Martínez de Velasco y Gómez Acebo o quienes redactan 21rs, "de forma profesional y con un fuerte compromiso de fe llevan a cabo una labor imprescindible para entender el catolicismo social de la España de los últimos 90 años", perdona que me ahorre las negritas, es un juicio personal tuyo que, liberal como eres, estoy seguro no nos obligas a compartir. Yo en los compromisos de fe no me meto, son cosas muy personales y que sólo juzgará Dios. Imprescindible pienso que no es nadie. Todos somos muy prescindibles. Y me da la impresión, aunque puedo estar equivocado, que en la mayoría de los estudios, y son muchos, sobre el catolicismo social de los últimos 90 años, 21rs o el trío de la bencina, apenas deben aparecer citados.

La canonización del P. Damián supongo que no tiene nada que ver con la revista ni con el trío. Y que escriba en la revista el cardenal Amigo sólo dice eso. Que escribe el cardenal Amigo. No que comparta, por ejemplo, el articulejo que pone a Benedicto XVI de chupa de dómine. Al igual que de que yo escriba en RD no se infiere que suscriba las tesis de Masiá. Tampoco el que hayas hecho en la revista tus primeros pinitos periodísticos canoniza nada. Aunque haga comprensible tu afecto.

En lo de tu simpatía por la congregación de los Sagrados Corazones no puedo tampoco entrar. Respeto absolutamente el derecho de cualquiera a tener los amigos que le dé la gana. Y ni tú ni yo nos creemos esa estupidez de que los amigos de mis amigos son mis amigos.

De los comentarios en nuestros artículos qué te voy a decir a ti. Tú y yo respondemos de lo que decimos. No de lo que otros dicen en los comentarios.

Y ya lo del dolor es cosa muy personal. Creo que tiene algo que ver con los pocos años. Luego te van saliendo escamas. Y miras todo con más tranquilidad. En otro caso estás abocado al infarto o a la úlcera de estómago.

Y no se me ocurre que más decirte. Desde una amistad discrepante en muchas cosas.