No conozco de nada a Benigno Blanco ni a Ignacio Arsuaga. Jamás hablé con ninguno ni tampoco me he interesado por sus organizaciones: el Foro Español de la Familia y Hazte Oír. No sé exactamente que se proponen ni con que medios.

Parece que ambas entidades tuvieron importante participación en organizar la gran reunión de personas del 17 de octubre en defensa de la vida. Mi asistencia fue por el fin de la manifestación y no por vinculación a las entidades convocantes. Que ni sé cuales fueron. Al ver cerrando el acto a Benigno Blanco pensé que debía ser personaje importante en el evento y me pareció bien lo que dijo. Aunque sin provocar en mí ningún entusiasmo especial.

Regresé a mi casa satisfecho por la multitud que había visto y así lo expresé en el Blog. Supuse que los organizadores estaría satisfechos de la respuesta lograda y no volví a acordarme ni del Foro Español de la Familia ni de Hazte Oír. Hasta que hoy me encuentro con una noticia en Infocatólica según la cual parece que andan a la greña.

http://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=4618

No sé cuales son los motivos de la misma pero como para pensar que no tenemos remedio. Consiguen un éxito espectacular y, en vez de aprovecharlo como plataforma para otros posteriores, a tirarse los trastos a la cabeza.

Como en la COPE, como en la Asociación de Víctimas del Terrorismo, como en el PP, como en el partido de Rosa Díaz, como en Izquierda Unida... Como en la misma Iglesia. Debe ser una característica hispánica la de que si llegamos a ser dos a la semana ya reñimos entre nosotros.

No sé si tiene razón Blanco o la tiene Arsuaga. Lo más probable es que ninguno de los dos totalmente. Tal vez hayan disputado la piel del oso cuando todavía el plantígrado está vivísimo. Podría entenderse que, una vez cazado, se discutiera quien era el que se llevaría la cabeza para adornar el salón de su casa. Pero cuando no hay oso, ni casa ni salón parece suicida reñir. Deben estar oyendo ya las carcajadas del oso.

Yo ni quito ni pongo rey ni tengo señor al que ayudar. Pero lo que hoy anuncia Infocatólica me parece tristísimo y no preludia nada bueno. Con la manifestación del 17 O se había encendido una lucecita de esperanza para cientos de miles de niños que van a ser asesinados en el vientre de sus madres. Que pena que quienes habían encendido esa lucecita se empeñen en apagarla. Me temo que Dios se lo va a tener en cuenta.