01. ¿INFORME SEMANAL?
El hecho de la resurrección es algo que no se puede describir, porque es un acontecimiento que transciende nuestra historia, nuestro espacio y tiempo.
Si un equipo de televisión se hubiese desplazado a Jerusalén, al sepulcro - huerto para hacer un “informe semanal” en la mañana de Pascua, no habría podido tomar ni una sola imagen, sencillamente porque Jesús, ya Cristo resucitado, está más allá de nuestra historia, de nuestra percepción. La resurrección la vio Dios Padre, Magdalena, el discípulo amado, Magdalena, Tomás, etc. CREYERON en la FE. Vieron porque creyeron, vieron desde la fe.



02. MARÍA MAGDALENA VA AL SEPULCRO AL ALBA, PERO DE NOCHE.



María Magdalena va al sepulcro al amanecer, todavía de noche. En San Juan, y en nuestra vida. La noche en San Juan no es únicamente una cuestión horaria, sino que tiene un simbolismo psicológico y cristiano. La noche y las tinieblas en la tradición de San Juan indican siempre carencia de Cristo.


Quizás también nosotros vivimos en las sombras de la muerte. Cristo había resucitado ya, pero estaban y -quizás- nosotros estamos en tinieblas, de noche.

María Magdalena va a buscar al Señor: lo amó vivo, lo amó muerto y lo ama resucitado.


Son muchos los exegetas que leen este relato desde el Cantar de los Cantares: desde el amor.

Mª Magdalena va al sepulcro porque amaba al Señor. Juan no dice que fuese a embalsamar con ungüentos y bálsamos al Señor. Magdalena tenía un gran dolor y nostalgia del amor del Señor y siente la pena de que ya no está ni tan siquiera en el sepulcro. No sabemos dónde lo han puesto.



Magdalena busca a Jesús en el sepulcro, muerto. Será más tarde, en el camino de la fe le hará ver a JesuCristo vivo. Cristo resucitado está en Dios.
Despejar tinieblas, situaciones sombrías, gestionar desarmes, transmitir luz, cultura, fe son pasos hacia la vida, hacia la resurrección.
Creer en Cristo resucitado, creer en la vida no es un acto puramente fisiológico, ni doctrinal. Probablemente creer en la Vida y en la Resurrección es sentir nostalgia del amor, melancolía de Dios.

03. EL DISCÍPULO AMADO Y PEDRO
Los dos discípulos salen al mismo tiempo. Quien llega antes a la fe en el Resucitado es quien más ama. EL QUE MÁS AMA, MÁS CORRE. Esto nos ocurre en todos los ámbitos de la vida.
Es evidente que no se trata de una carrera atlética, un pequeño maratón, sino que se trata más bien de un PROCESO DE FE.
El “Discípulo AMADO” representa a todo creyente que vive en el amor al Señor, o más sencillamente es todo ser humano que ama en la vida. (No olvidemos que Dios es amor, (1Jn 4,8).
Quien ama (discípulo amado) cree en la vida, en la Resurrección.
Hay que estudiar, cuidar la exegesis sobre la resurrección, pero a la fe en la Vida y en la Resurrección se llega por el amor.
La resurrección no fue un grandioso espectáculo, un golpe de fuerza del Deus ex machina. La Vida es más sencilla y humilde.
El místico antropólogo Teilhard de Chardin escribía.



La muerte nos entrega totalmente a Dios, nos traspasa a Él. En correspondencia, hemos de entregarnos a ella con gran amor y abandono, ya que no nos queda otra cosa que hacer, cuando se nos presenta, que dejarnos dominar y conducir enteramente por Dios.
La cruz elevó a Jesús al ámbito de Dios.

También en nosotros la gracia está también en el fondo de la pena, de la tiniebla.

04. FELIZ PASCUA.


Desde la mañana de Pascua se abre una nueva vida, un nuevo modo de ver la vida para el creyente. El que ama, tiene prisa, corre, ve y cree. Tengamos prisa y corramos por vivir en paz y esperanza.


Resucitamos en cada vida que nace, en cada momento que nos perdonan y perdonamos, en cada gesto de acogida, en la esperanza infinita...


Desde la Resurrección del Señor: Feliz Pascua.