Liturgia del 8º DOMINGO ORDINARIO 2025 (C)

Comentario del ignorante:
Podríamos llamar a este Evangelio el de la COHERENCIA, hilo conductor de la HUMANIDAD que nos vino a predicar Jesús. Este Evangelio DENUNCIA claramente muchas de las "doctrinas incoherentes" que mantiene nuestro Catolicismo.
La sentencia: "por los frutos los conoceréis" es tan evidente y coherente que no entiendo como los profesionales de la Religión pueden caer en el engaño y olvidarla. Solo con eso el mundo sería de otra manera.
Pensemos en su aplicación a la Política y a tantos tragapanes que engañan, manipulan y pervierten, cargando a sus naciones de dolor, indigencia y violencia. A veces los frutos tardan en llegar, pero llegan con todo su veneno y muerte...
Religiosos, ignorantes y tal vez con buena voluntad, caen en el "error político" y se convierten en "guías ciegos". La Política y la Economía se han convertido en terreno propicio para el engaño. Bastaría que los votantes tuvieran presente este Evangelio, que alguno tradujo después: "El Pueblo que olvida su historia (los amargos frutos pasados), está condenado a repetirla".
En la Religión también se cultiva mucho árbol malo, con el agravante de IMPONER a los creyentes la obligación de aceptar el árbol y sus frutos. No hay más que recordar los frutos de "doctrinas incoherentes" y la difusión de unas imágenes de Dios que provocan la HUIDA y el RECHAZO, en vez de "religare" (volver a unir al ser humano con su Creador).
Pienso en las MENTIRAS, que muchos fieles se tragan por rutina e ingenuidad.
- Del amor del "Corazón de Jesús", por ejemplo, incoherente con el "dios sádico" de la doctrina redentora.
- De la "Iglesia pobre y servidora", llenita de riquezas, ostentación e imposiciones por los cuatro costados.
- Del "celibato obligatorio" que se da de bruces con la realidad del Pueblo y la biología humana, expulsando a muchos buenos profetas, o tentando la presión humana que, a veces, explota con escándalo.
- De la llamada "muerte natural" para no acudir en auxilio de los moribundos, en ocasiones arrastrados durante largo tiempo por el dolor, la angustia y la impotencia para salir de la culpabilidad que les imponen los "guías ciegos".
- De las "idolatrías múltiples" para manipular y conseguir dominar a un Ser eterno, omnisciente y omnipotente, justificadas por el inocente título de "piedad popular"...
¿Pero quien enseña y guía al Pueblo? ¡Cobardes! "Más valdría que los ataran una rueda de molino al cuello y los echaran al mar" (Lc 17,2).
Todo eso y mucho más son FRUTOS de un ÁRBOL, que dicen plantado en el Evangelio, pero que solo da "fruto venenoso e inmisericorde", impropio del HUMANISMO sembrado por Jesús de Nazaret.
Y aquí me quedo, porque habría tanto que decir... Por favor, nos han creado "inteligentes, con voluntad y libertad", no lo neguemos con INCOHERENCIAS que son la negación de nuestra esencia humana.
Una Religión que da frutos malos será arrasada y abandonada: "No quedará piedra sobre piedra" (Lc 21,6) aunque esté construida con oro y piedras preciosas. "Mirad, no os dejéis engañar. Porque vendrán muchos usurpando mi nombre y diciendo: "Yo soy" ... No les sigáis" (Lc 21, 8).
La Creación la administramos los humanos. O usamos la COHERENCIA, raíz básica de la Inteligencia, o nos hundiremos en la miseria material y humana de los traficantes de la MENTIRA, fruto amargo de los manipuladores de la HUMANIDAD, aún de aquellos que lo hacen con "buena voluntad" pero sin bajar al fondo de la VERDAD basada en la REALIDAD: Los FRUTOS son las CONSECUENCIAS, como tantas veces repito... De la "ley de la causalidad" (A tal causa tal efecto, a tal árbol, tal fruto).
Con todo mi cariño
Jairo del Agua
8º DOMINGO ORDINARIO 2025 (C)
Y comenzamos una Misa coherente:
El amor permanente y entrañable de Dios Padre, que nos habita y sostiene, la presencia luminosa de Jesús Resucitado, su Luz y el impulso de su Espíritu ESTÁN con todos vosotros.
Y con tu Espíritu
MONICIÓN DE ENTRADA
Seguimos desgranando el “discurso del llano” del evangelio de Lucas, con frases cargadas de sabiduría como la que destacamos hoy: Cada árbol se conoce por su fruto. Qué gran criterio para discernir personas e instituciones. Y por supuesto, para mirarnos en el espejo y ver qué fruto estamos dando. Celebremos con gozo en esta Eucaristía nuestra unión con Jesús y nuestra fraternidad.
ACTO DE RECONOCIMIENTO
Así como Dios ha dotado a los árboles de savia que hace que den fruto, también nos ha dotado a nosotros de una savia especial: Nuestros dones y cualidades que debemos cultivar para dar frutos de amor y buenas obras. Por ello le damos gracias a Abba y nos comprometemos a vivirlas en nuestro desarrollo personal y en contribuir al bien común de la humanidad.
Nos comprometemos a vivir la PAZ, la paz que nos da sentirte en nuestro interior y que debe manifestarse buscando siempre la paz con los demás. Por eso decimos: Nos comprometemos Señor
Nos comprometemos a vivir la FELICIDAD, la que Tú nos concedes al descubrirnos el sentido trascendente de nuestra vida que no depende de circunstancias exteriores sino de saber que Tú nos habitas y acompañas siempre. Por eso decimos: Nos comprometemos Señor
Nos comprometemos a vivir el AMOR, el amor a nosotros mismos y a los demás, el que tú nos inspiras en nuestro interior y nos impulsas a vivirlo con nuestro comportamiento hacia los demás. Por eso decimos: Nos comprometemos Señor
Dios Padre Amoroso TIENE misericordia de nosotros, comprende nuestros fallos y nos guía de su mano a la vida eterna. Amén.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo….
Tú que quitas el pecado del mundo, TÚ TIENES PIEDAD DE NOSOTROS...
Tú que quitas el pecado del mundo, TÚ ATIENDES NUESTRAS SÚPLICAS
Tú que estás sentado a la derecha del Padre, TÚ TIENES PIEDAD DE NOSOTROS
ORACIÓN COLECTA
Nos reúnes alrededor de tu mesa, porque necesitamos tu Palabra y tu Pan. Gracias Padre porque nos invitas siempre, gracias porque siempre eres pan y palabra, luz y alimento. Gracias Padre por Jesús, nuestro Señor. Amén.
Lectura del libro de Sirácida (27, 4-7)
Cuando se agita la criba, quedan los desechos;
así, cuando la persona habla, se descubren sus defectos.
El horno prueba las vasijas del alfarero,
y la persona es probada en su conversación.
El fruto revela el cultivo del árbol,
así la palabra revela el corazón de la persona.
No elogies a nadie antes de oírlo hablar,
porque ahí es donde se prueba una persona.
Salmo 91
R/. Es bueno darte gracias, Señor.
V/. Es bueno dar gracias al Señor
y tocar para tu nombre, oh Altísimo;
proclamar por la mañana tu misericordia
y de noche tu fidelidad. R/.
V/. El justo crecerá como una palmera,
se alzará como un cedro del Líbano:
plantado en la casa del Señor,
crecerá en los atrios de nuestro Dios. R/.
V/. En la vejez seguirá dando fruto
y estará lozano y frondoso,
para proclamar que el Señor es justo,
mi Roca, en quien no existe la maldad. R/.
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios.
Hermanos:
Cuando esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita:
«La muerte ha sido absorbida en la victoria. ¿Dónde está, muerte, tu victoria? ¿Dónde está, muerte, tu aguijón?».
El aguijón de la muerte es el pecado, y la fuerza del pecado, la ley.
¡Gracias a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo!
De modo que, hermanos míos queridos, manteneos firmes e inconmovibles.
Entregaos siempre sin reservas a la obra del Señor, convencidos de que vuestro esfuerzo no será vano en el Señor.
Lectura del santo Evangelio según san Lucas.
R/Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, dijo Jesús a los discípulos una parábola:
«¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? No está el discípulo sobre su maestro, si bien, cuando termine su aprendizaje, será como su maestro. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: “Hermano, déjame que te saque la mota del ojo”, sin fijarte en la viga que llevas en el tuyo? ¡Hipócrita! Sácate primero la viga de tu ojo, y entonces verás claro para sacar la mota del ojo de tu hermano.
Pues no hay árbol bueno que dé fruto malo, ni árbol malo que dé fruto bueno; por ello, cada árbol se conoce por su fruto; porque no se recogen higos de las zarzas, ni se vendimian racimos de los espinos.
El hombre bueno, de la bondad que atesora en su corazón saca el bien, y el que es malo, de la maldad saca el mal; porque de lo que rebosa el corazón habla la boca».
Palabra del Señor.
R/Gloria a tí Señor Jesús
HOMILÍA
Tengo un amigo con el que dialogo mucho sobre temas religiosos y sobre la Biblia. Él insiste mucho en que la Biblia hay que entenderla al pie de la letra, y yo me esfuerzo en explicarle que no es un libro de historia y que hay que comprenderla en el contexto en el que fue escrita y lo que los autores de los diversos libros querían transmitir a sus lectores.
Tal es el caso del evangelio de hoy: son recopilaciones de dichos de Jesús que condensan su propuesta de vida. Junto a las parábolas, constituyen el núcleo esencial del evangelio.
Pero el problema es que se nos han explicado e impuesto como normas morales y vivimos angustiados por no estar a la altura de una moral tan exigente.
Por ello hoy más que hablar del mensaje del texto, vamos a fijarnos en la forma peculiar que tenía Jesús de decir las cosas, lo cual nos ayudará a comprender mejor el mensaje.
Jesús era semita, y los semitas no emplean conceptos para expresar sus ideas, sino que recurren a imágenes y analogías que resultan mucho más ricas y rotundas para hablar de lo trascendente.
Pongamos un ejemplo: cuando uno de nosotros dice que una persona es “hospitalaria”, todos entendemos lo que quiere decir, pero su expresión carece de la fuerza y la riqueza que en el fondo encierra el concepto. En cambio, un semita probablemente lo diría de esta forma: «La puerta de su casa está siempre abierta». Esta expresión tiene una fuerza muy superior a la del concepto seco con que nosotros la expresamos.
Lo más característico del lenguaje de Jesús son las parábolas-cuentos sencillos por los que todos pueden comprender el mensaje que quiere transmitir. Pero también hay que resaltar las exageraciones. Cuando quería poner el énfasis en algo, inventaba una gran exageración y ya nunca se olvidaba.
Tal es el caso de hoy con lo de la “viga en el ojo ajeno…” o “no se recogen higos de los espinos o uvas de las zarzas”
Con ello quiere, ante todo, prevenirnos contra quien cree que tiene que instruir a los demás, exigiéndonos lo que ellos mismos no dan. Todos conocemos personas así; muchos dirigentes religiosos o no religiosos se comportan así.
Pero también se refiere a cada uno de nosotros, nos habla de nuestras relaciones con las personas, de la tendencia que podemos tener a exigir a los demás lo que no nos exigimos a nosotros, de la actitud de creernos mejores que los demás, con derecho a juzgar, criticar y condenar. Eso es hipocresía, un defecto que Jesús critica. Y que el Papa Francisco nos recuerda constantemente previniéndonos contra el chismorreo.
Lo importante es tratar de mejorar nosotros mismos cada día y ejercitar la autocrítica; así no valoraremos ni juzgaremos a las personas por impresiones exteriores, equivocadas y superficiales.
Lo importante no son las palabras sino los hechos, los frutos que dicen como es el árbol. La forma de hablar y de actuar, con cariño, con bondad, con amabilidad, con solidaridad, con transparencia, con coherencia, o por el contrario con egoísmo, con prepotencia, con orgullo, con indiferencia, con superficialidad, son los frutos que demuestran cómo es el corazón de las personas.
En nuestra sociedad necesitamos personas que construyan. Construyamos a nuestro alrededor, en nuestro entorno unas relaciones diferentes hechas de confianza, bondad y cordialidad. Sabiendo acoger a las personas porque así ya las estamos liberando de la soledad e infundiéndole fuerza.
Desarrollando la comprensión, para que la persona sienta que, a pesar de sus errores, en nosotros, en mí, encontrará siempre alguien que la comprenderá y no la condenará. Alguien que la escuchará y la alentará para enfrentarse a sus dificultades.
CREDO
Sacerdote.- ¿Creéis en Dios, que es nuestro Padre, que ha hecho todas las cosas y nos cuida con amor?
Todos.- Sí, Creemos.
Sacerdote.- ¿Creéis en Jesucristo, que ha puesto su Morada entre nosotros, para hacernos conocer a Dios Padre?
Todos.- Sí, Creemos.
Sacerdote.- ¿Creéis en el Espíritu Santo que vive entre nosotros, y anima a la Iglesia y a todos para hacer un mundo mejor?
Todos. Sí, Creemos.
Sacerdote: ¿Creéis en la resurrección y en la Vida eterna, que ya comenzamos a disfrutar aquí y disfrutaremos plenamente al final de nuestro camino por esta vida?
Todos. Sí, Creemos.
ORACIÓN UNIVERSAL
La Palabra que hemos escuchado hoy nos invita a abrir los ojos, a vivir y actuar con criterios sólidos que no son los que en nuestra sociedad imperan. Oremos:
Nos comprometemos con la Vida.
• Nos comprometemos a que la Iglesia, comunidad de los discípulos de Jesús, no sustituya el seguimiento por el culto; el servicio a los pobres por la cercanía con los ricos y el amor por la censura o el juicio.
Nos comprometemos con la Vida.
• Nos comprometemos como creyentes a cultivar nuestra interioridad para que en nuestro corazón sólo alberguemos actitudes buenas y liberadoras.
Nos comprometemos con la Vida.
• Nos comprometemos a proclamar una fe viva, una fe coherente con la propuesta de Jesús, una fe que se expresa en obras, en definitiva: una fe encarnada.
Nos comprometemos con la Vida..
• Nos comprometemos en nuestros barrios y entornos a ser invitación a una vida vivida en clave de servicio solidario y gratuito, que interpelemos y apuntemos siempre hacia Dios y la Vida.
Nos comprometemos con la Vida.
• Nos comprometemos a luchar contra cualquier tipo de injusticia y violencia, siendo semillas de bondad en lo cotidiano, en lo pequeño; ofreciendo palabras y gestos de paz y comunión.
Nos comprometemos con la Vida.
Padre y Madre buena, queremos ser conscientes de nuestra pertenencia a una Iglesia comprometida con la causa de los más débiles y nos esforzaremos en llevar luz, consuelo y esperanza a todos . Con Jesucristo nuestro Señor. Amén
En el momento de presentar la OFRENDA de toda la Iglesia oremos a Dios Padre Misericordioso
El Señor reciba de tus manos esta OFRENDA…
ORACIÓN OFRENDAS
Ponemos en tu mesa nuestra vida, nuestra carne y nuestra sangre, nuestro pan y nuestro vino; queremos que nuestra vida entera, como la de Jesús, sea una ofrenda completa a Dios y a nuestros hermanos. Por el mismo Jesús, tu hijo, nuestro Señor.
PREFACIO
El Señor está con vosotros
Y con tu Espíritu
Levantemos el corazón
Lo tenemos levantado hacia el Señor
Damos gracias al Señor nuestro Dios
Es justo y necesario
A Ti, Señor, levantamos nuestro corazón y te dirigimos esta oración.
Te damos gracias, Padre santo, porque es justo y necesario,
porque realmente es bueno y justo bendecirte en todo momento.
Tú eres consuelo y compañía de nuestra humanidad,
Tú nos das el deseo de vivir y la vida misma.
Gracias, Dios Padre, porque eres puro amor y estás en nosotros.
Nos mueves a amar a todos y hacer el bien.
Queremos imitarte, ser tu imagen, transparentarte, hacerte visible
y que nuestros prójimos te descubran en nuestra vida.
Uniendo nuestras voces a cuantos te aclaman hoy en el mundo, te cantamos agradecidos este himno de reconocimiento y alabanza.
SANTO, SANTO, SANTO
CONSAGRACIÓN Y PLEGARIA
Nos hemos reunido alrededor de esta mesa, Padre Dios para recordar la vida de tu hijo Jesús de Nazaret y testimoniar que nosotros sí creemos en él y queremos seguirle.
Queremos ser su familia, sus discípulos y amigos.
Queremos escuchar su mensaje completo, sin recortes, conocerle mejor y aprender de él a amar y servir a los demás.
Es lo que Jesús nos pidió en su cena de despedida,
que le imitáramos en la entrega por el bien de la humanidad, y que le recordáramos en ese gesto de partirse y darse a todos.
(Pausa)
Recibimos tu Espíritu con alegría
para que santifique este pan y este vino y
se conviertan para nosotros
en el sacramento del Cuerpo y + la Sangre de Jesús, en la Persona y la Vida de Jesús, aquí significadas.
El mismo Jesús, la noche en que iban a entregarlo, cogió un pan, te dio gracias, lo partió y dijo:
(Pausa)
Tomad y comed todos de él,
porque esto es mi Cuerpo,
que será entregado por vosotros
Después de cenar, hizo igual con la copa, diciendo:
Tomad y bebed todos de él,
porque éste es el cáliz de mi Sangre,
Sangre de la alianza nueva y eterna,
que será derramada por vosotros
y por todos los hombres
para iluminar vuestras vidas.
Haced esto en conmemoración mía.
Éste es el Sacramento de nuestra fe.
Anunciamos y proclamamos tu resurrección. Ven Señor Jesús.
Por eso, Padre bueno, recordamos ahora
la resurrección de Jesús, el Salvador del
mundo, y renovamos nuestra fraternidad.
Él se ha puesto en nuestras manos
para que lo sintamos cerca de nosotros
y aprendamos a ofrecerte nuestras vidas,
a Ti, Padre de la vida y aliento de todo bien.
Tú nos escuchas, Señor Dios nuestro;
y nos das tu Espíritu de amor
a los que participamos en esta comida,
para que vivamos cada día
más unidos en la Iglesia,
con el santo Padre, el Papa Francisco,
con nuestro Obispo N…,
los demás obispos,
y todos los que trabajan por tu pueblo.
No nos olvidamos de las personas que amamos
ni de aquellas a las que debiéramos querer más.
Te damos gracias porque nuestros
hermanos difuntos… familiares
amigos y miembros de nuestra Comunidad
están ya contigo en Tu casa del Cielo.
Y un día, nos reuniremos contigo
con María, la Virgen, Madre de Dios y Madre nuestra, su esposo San José, los santos
y todas las personas de bien
para celebrar la gran fiesta del cielo.
Entonces, todos los amigos de Jesús, nuestro Señor, podremos cantarte sin fin.
(Pausa)
Por Cristo, con Él y en Él, a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén
PADRENUESTRO
PADRE Y MADRE NUESTRA
EN QUIEN SOMOS Y VIVIMOS.
Santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu reino.
Hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo
TÚ NOS DAS HOY
NUESTRO PAN DE CADA DÍA.
TÚ PERDONAS NUESTROS PECADOS
Y NOSOTROS QUEREMOS PERDONAR
A LOS QUE NOS OFENDEN.
No nos dejes caer en la tentación.
Y líbranos del mal. Amen
CORDERO DE DIOS
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, Tú TIENES piedad de nosotros
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, Tú TIENES piedad de nosotros
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, Tú NOS DAS la paz
Jesús nos invita a ser pan partido y repartido para los demás.
ORACIÓN FINAL
Vivir es dejar que el Espíritu de Dios se haga cuerpo en nuestro cuerpo humano, carne y sangre de nuestra vida concreta, para darnos LUZ y aliento en nuestros pasos.
Y para ello queremos hacer “oración de impregnación”, pararnos un rato todos los días para bañarnos en nuestro interior donde portamos el parecido contigo Padre nuestro.
Orar es dejar que la PAZ crezca dentro de nosotros y que rebose hasta los hermanos, de todos aquellos que tenemos cerca. Así seremos instrumentos de tu PAZ.
Vivir es decir: ¡Ya estoy, Señor, viviéndote dentro para derramarme fuera, como el árbol frutal que Tú creaste!
(Pausa)
BENDICIÓN
El Señor os bendice, os guarda
y en sus palmas os lleva tatuados.
Os acompaña en todos los caminos.
Y hace prósperas las obras de vuestras manos.
Sentíos siempre abrazados y bendecidos por este Dios enamorado,
Padre, Hijo y Espíritu Santo.