Liturgia del 7º DOMINGO ORDINARIO 2025 (C)
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Una vez más la "piedra de tropiezo" es la LITERALIDAD con que muchos todavía leen y predican el Evangelio
Comentario inicial:
1º) Una vez más la "piedra de tropiezo" es la LITERALIDAD con que muchos todavía leen y predican el Evangelio. Desde mi pequeñez afirmo con rotundidad: "Todo lo que excede la REALIDAD y la RACIONALIDAD no es de Jesús", porque Él vino a mostrarnos el Camino real. ¿O es que Jesús es para ti el "tontito útil e ignorante", predicado por muchos, que llegó para derramar su sangre por tus pecados con un prólogo de variadas utopías? Hay que leer el MENSAJE, al margen del marco de la cultura y religión de entonces. Ni el marco, ni el lienzo, ni los colores... hay que ir al MENSAJE de la Sabiduría y por tanto lógico y coherente.
2º) "Amar al enemigo" no significa acostarse con él y mucho menos imitarlo. Cuanto más lejos mejor, me dice la sensatez (cuando eso es posible). Si te ataca una avispa, no vas a meter la mano en el avispero. Lo bondadoso, si son avispas humanas, es no fumigarlas y aplastarlas, sino emplear la sabiduría popular "se consigue más con una gota de miel, que con un barril de hiel". ¿Y cuál es la miel de Jesús? Pues uno de los goznes del Cristianismo: la BONDAD. Que no es otra cosa que la "capacidad de hacer el bien".
Todavía recuerdo que en Filosofía nos enseñaban que "bonum est diffusivum sui" (el BIEN se expande por sí mismo). Pues todo el Evangelio de hoy solo nos habla de eso, de impregnarnos del BIEN infinito del que hemos salido para actuar con BONDAD. Así de simple, así de razonable, así de profundo.
Es muy difícil o imposible SENTIR amor con la sensibilidad herida, pero sí se puede ACTUAR con amor. Los mártires que murieron perdonando lo saben muy bien.
3º) Permitidme una confesión: Lo que más me cuesta es "amar a los dirigentes de nuestra Iglesia" porque el ESCÁNDALO y la INCOHERENCIA no pueden venir de Dios, porque ellos destrozan el Evangelio desde dentro, porque someten a sus hermanos en vez de amarlos y alimentarlos.
Dos ejemplos: ¿Qué nos puede enseñar o motivar la primera lectura de hoy? ¿Por qué la cadena de TV13, la de los Obispos españoles, es de las que más difunden VENGANZA y VIOLENCIA? La tengo vetada en mi casa por pura higiene mental, ni siquiera por ser cristiano.
4º) ¡NO recéis POR el Papa! Nos van a aturdir estos días con esa insistencia. Una vez más se destruye "desde dentro" la FE y la CONFIANZA en el Abba de Jesús. ¿No está nuestro Papa en los brazos del Amor Infinito? ¿Vas a aumentar o modificar tú ese inamovible Amor con tus incoherentes peticiones? ¡Qué mal nos han enseñado los maestros y doctores! Por algo nos lo advirtió Jesús...
¡Reza CON el Papa! Intenta seguir su LUZ y su EJEMPLO, apriétate a su BONDAD, su ENTREGA, su SENCILLEZ, su UNIVERSALIDAD, su FORTALEZA en la enfermedad, su PAZ... Eso sí es coherente con el Evangelio. Lo otro es lo mismo que hacían las religiones primitivas con sus ídolos.
Por último, PERDONAD la hiriente COHERENCIA de este mínimo comentarista. Eso también es Evangelio.
Con todo mi cariño
Jairo del Agua
7º DOMINGO ORDINARIO 2025 (C)
El amor permanente y entrañable de Dios Padre, que nos habita y sostiene, la presencia luminosa de Jesús Resucitado, su Luz y el impulso de su Espíritu ESTÁN con todos vosotros.
Y con tu Espíritu
MONICIÓN DE ENTRADA
Este domingo la liturgia nos propone un texto que es puro evangelio. “Amad a vuestros enemigos”, “al que te pegue en una mejilla, preséntale la otra”. La primera sensación es que el listón está demasiado alto. Para no quedarnos en el desánimo, el amor del que habla Jesús no se refiere a un sentimiento. “No se nos exige simpatía o amistad con el enemigo sino el amor de Dios al que tenemos que imitar”. Se trata de comprender que todos somos iguales en dignidad. Debemos trabajar para encontrar esa armonía fraterna. Nadie por encima de nadie
ACTO DE RECONOCIMIENTO
Dios nunca nos pide nada por encima de nuestras propias fuerzas, él sabe hasta dónde podemos llegar. Por ello nos ha dado los dones y cualidades que tenemos, y a través de las cuales Él actúa en nosotros. Por ello las reconocemos, le damos gracias y nos comprometemos a vivirlas en nuestro desarrollo personal y en hacer todo el bien posible a los hermanos.
Gracias Señor por el don de la PAZ, la interior que nos da tu presencia y la exterior que tenemos que construir todos juntos. Nos comprometemos a vivirla cada día diciendo: Nos comprometemos Señor
Gracias Señor por el don del AMOR, el que tú nos manifiestas en nuestro interior y en todo lo que nos das, y el que nosotros queremos dejar rebosar hacia los hermanos. Nos comprometemos Señor
Gracias Señor por los dones de la BONDAD y la AYUDA queremos vivirlos preocupándonos de nuestro desarrollo personal y de ayudar a los demás en todo lo que podamos. Por eso decimos: Nos comprometemos Señor
Dios Padre amoroso TIENE siempre misericordia de nosotros, conoce nuestras limitaciones y nos guía de su mano a la vida eterna.
GLORIA
Gloria a Dios en el cielo…
Tú que quitas el pecado del mundo, TÚ TIENES PIEDAD DE NOSOTROS...
Tú que quitas el pecado del mundo, TÚ ATIENDES NUESTRAS SÚPLICAS…
Tú que estás sentado a la derecha del Padre, TÚ TIENES PIEDAD DE NOSOTROS…
ORACIÓN COLECTA
Señor, sabemos que el amor es entrega y valentía, es sonrisa y esperanza, es un sueño que no se acaba y nos llena de ilusiones. Queremos dar amor, para encontrar amor, y así, sentirnos felices y unidos en la vida. Amén
Lectura del primer libro de Samuel (26,2.7-9.12-13.22-23):
En aquellos días, Saúl emprendió la bajada hacia el páramo de Zif, con tres mil soldados israelitas, para dar una batida en busca de David. David y Abisay fueron de noche al campamento; Saúl estaba echado, durmiendo en medio del cercado de carros, la lanza hincada en tierra a la cabecera. Abner y la tropa estaban echados alrededor.
Entonces Abisay dijo a David: «Dios te pone el enemigo en la mano. Voy a clavarlo en tierra de una lanzada; no hará falta repetir el golpe.»
Pero David replicó: «¡No lo mates! que no se puede atentar impunemente contra el ungido del Señor.»
David tomó la lanza y el jarro de agua de la cabecera de Saúl, y se marcharon. Nadie los vio, ni se enteró, ni se despertó: estaban todos dormidos, porque el Señor les había enviado un sueño profundo.
David cruzó a la otra parte, se plantó en la cima del monte, lejos, dejando mucho espacio en medio, y gritó: «Aquí está la lanza del rey. Que venga uno de los mozos a recogerla. El Señor pagará a cada uno su justicia y su lealtad. Porque él te puso hoy en mis manos, pero yo no quise atentar contra el ungido del Señor.»
Salmo 102
R/. El Señor es compasivo y misericordioso
Bendice, alma mía, al Señor,
y todo mi ser a su santo nombre.
Bendice, alma mía, al Señor,
y no olvides sus beneficios. R/.
Él perdona todas tus culpas
y cura todas tus enfermedades;
él rescata tu vida de la fosa
y te colma de gracia y de ternura. R/.
El Señor es compasivo y misericordioso,
lento a la ira y rico en clemencia;
no nos trata como merecen nuestros pecados
ni nos paga según nuestras culpas. R/.
Como dista el oriente del ocaso,
así aleja de nosotros nuestros delitos;
como un padre siente ternura por sus hijos,
siente el Señor ternura por sus fieles. R/.
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (15,45-49):
El primer hombre, Adán, fue un ser animado. El último Adán, un espíritu que da vida. No es primero lo espiritual, sino lo animal. Lo espiritual viene después. El primer hombre, hecho de tierra, era terreno; el segundo hombre es del cielo. Pues igual que el terreno son los hombres terrenos; igual que el celestial son los hombres celestiales. Nosotros, que somos imagen del hombre terreno, seremos también imagen del hombre celestial.
Lectura del santo evangelio según san Lucas (6,27-38):
R/Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «A los que me escucháis os digo: Amad a vuestros enemigos, haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, orad por los que os injurian. Al que te pegue en una mejilla, preséntale la otra; al que te quite la capa, déjale también la túnica. A quien te pide, dale; al que se lleve lo tuyo, no se lo reclames. Tratad a los demás como queréis que ellos os traten.
Pues, si amáis sólo a los que os aman, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores aman a los que los aman. Y si hacéis bien sólo a los que os hacen bien, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores lo hacen. Y si prestáis sólo cuando esperáis cobrar, ¿qué mérito tenéis? También los pecadores prestan a otros pecadores, con intención de cobrárselo.
¡No! Amad a vuestros enemigos, haced el bien y prestad sin esperar nada; tendréis un gran premio y seréis hijos del Altísimo, que es bueno con los malvados y desagradecidos. Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo; no juzguéis, y no seréis juzgados; no condenéis, y no seréis condenados; perdonad, y seréis perdonados; dad, y se os dará: os verterán una medida generosa, colmada, remecida, rebosante. La medida que uséis, la usarán con vosotros.»
Palabra del Señor
R/Gloria a Ti Señor Jesús
HOMILÍA
¡Vale Señor! Después de proponernos las bienaventuranzas ahora nos sales con un plan, una hoja de ruta que requiere, como punto básico, ponerse a la escucha. “A vosotros que me escucháis os digo…”.
Con tantas distracciones alrededor es posible que ni siquiera lleguemos al punto básico. Pero no nos pongamos negativos, vamos a pensar que sí, que llegamos a escuchar desde dentro: “Amad a vuestros enemigos”.
Esto nos suena contra natura. El individualismo reinante nos pone en guardia: cualquiera puede ser el enemigo. Bajar la guardia es complicado. ¿Qué significa este mensaje?... y hay más: “Haced el bien a los que os odian, bendecid a los que os maldicen, orad por los que os calumnian”. Algunos ya tuvieron bastante, y se retiraron.
“Haced el bien… sed misericordiosos… no juzguéis… perdonad… dad…”. “Amad a vuestros enemigos”, escuchamos de nuevo quienes quedamos expectantes.
Pero ¿podemos hacer eso? Es muy posible que interpretemos este evangelio mirando siempre hacia fuera, a los otros. Tendríamos que revisar, humildemente, lo que sucede dentro de cada uno.
Empecemos por descubrir un poderoso enemigo interno: el ego. Campa a sus anchas tomando decisiones sobre quien es amigo, quien enemigo. Sus prácticas son sibilinas, egoístas, discriminatorias, selectivas, abusivas, y va tejiendo una red que es la envidia de la araña más ingeniosa. El miedo es su principal arma, disimulada con síntomas de prepotencia, ambición y exigencia. Y quien se sienta libre de esto “que tire la primera piedra”
Ahora miremos hacia fuera, al complicado entramado mundial: guerras, abusos, leyes injustas, discriminación por color de piel, por ser pobre, por ser mujer; alambradas y muros que señalan a los que llegan como enemigos; usos y abusos financieros delictivos amparados en marcos legales envueltos en oscuridades difíciles de detectar; muertes y detenciones de personas activas en la denuncia y en la ayuda a los más desfavorecidos… y volvemos a escuchar: “Amad a vuestros enemigos”.
Existe otra posibilidad. Mirémonos a un espejo, compartamos una pregunta con nuestra imagen: ¿Alguien piensa en mí como un enemigo, alguien concreto con intención desea causarme algún mal? Es duro.
En este choque de trenes vive el ser humano sin reconocer que la humanidad es una y que, aunque camine orgullosamente erguido, no llegará a ser quien está llamado a ser hasta que cambie las herramientas que empuña desde hace millones de años por otras, mucho más sutiles: la bondad, la misericordia, el perdón, la generosidad, el cuidado, la ayuda desinteresada, oración, la bendición.
Nos propones un plan al revés que nos deja confusos, aturdidos. Nos propones conversión. Nos empujas hacia el precipicio para ver si reaccionamos y aprendemos a vivir desde el Amor, con una única inscripción en la hoja de ruta que recibimos al llegar a este mundo: “Amaos unos a otros como yo os he amado”. Así no habrá enemigos sino hermanos.
Damos gracias por tantos hombres y mujeres que hicieron y hacen de su vida una obra de arte de Amor. Y nos proponemos en serio imitarlos.
CREDO
Sacerdote.- ¿Creéis en Dios , que es nuestro Padre, que ha hecho todas las cosas y nos cuida con amor?
Todos.- Sí, Creemos.
Sacerdote.- ¿Creéis en Jesucristo, que ha puesto su Morada entre nosotros, para hacernos conocer a Dios?
Todos.- Sí, Creemos.
Sacerdote.- ¿Creéis en el Espíritu Santo que vive entre nosotros, y anima a la Iglesia para hacer un mundo mejor?
Todos. Sí, Creemos.
ORACIÓN UNIVERSAL
Jesús nos invita a luchar contra todo tipo de injusticia, a remar contra corriente de lo que propone nuestra sociedad, sin odio ni venganza, perdonando y amando a los enemigos. Oremos.
Deseamos ser cauce de perdón y amor.
• Nos comprometemos con una Iglesia, comunidad alternativa de Jesús, que perdona, acoge, consuela, respeta y dignifica.
Deseamos ser cauce de perdón y amor.
• Nos comprometemos con el proyecto del Reino de Jesús de Nazaret, que nos invita al amor sin fronteras, que abarca a todos en la diversidad, sin venganzas ni juicios, y que se da gratuita y desmedidamente.
Deseamos ser cauce de perdón y amor.
• Nos comprometemos con una vida en clave de perdón, que lucha por la justicia social, ética y política; sin conformarnos con lo establecido socialmente.
Deseamos ser cauce de perdón y amor.
• Nos comprometemos con unas relaciones interpersonales que sean incluyentes, que acepten lo diferente, que humanicen y dignifiquen a todos.
Deseamos ser cauce de perdón y amor.
• Nos comprometemos con una educación para nuestros niños y jóvenes que hablen del perdón sin condiciones, de la entrega solidaria, del amor que no calcula y mide.
Deseamos ser cauce de perdón y amor.
Padre bueno, queremos ser en esta sociedad semillas del Reino de Jesús, ser puente hacía otra forma de vida y de relación entre nosotros. Damos gracias por Jesús nuestro Hermano y Maestro, que vive por los siglos de los siglos. Amén.
En el momento de presentar la OFRENDA de toda la Iglesia oremos a Dios Padre Misericordioso
El Señor reciba de tus manos esta OFRENDA…
ORACIÓN OFRENDAS
Te presentamos el pan y el vino frutos de la tierra y del trabajo de los hombres y mujeres. Representan la comida y la alegría de vivir. Junto a ellos ofrecemos nuestras vidas: el deseo de compartir la comida, la alegría de la vida, y el amor, también, hacia los que no nos caen bien; así conseguiremos una convivencia feliz y en paz. PJNS
PREFACIO
El Señor está con vosotros
Y con tu Espíritu
Levantemos el corazón
Lo tenemos levantado hacia el Señor
Damos gracias al Señor nuestro Dios
Es justo y necesario
Gracias Padre Dios porque
permanece entre nosotros la buena noticia de Jesús,
que cambió nuestras mentes,
nuestras viejas religiones,
con un solo y sencillo mandamiento,
el del amor fraterno.
Tenemos un sueño.
Soñamos con la felicidad de todos los seres humanos,
soñamos con un mundo ideal, justo y solidario,
al que Jesús llamó tu Reino.
Soñamos en realizar el sueño de tu Hijo:
que nos amáramos los unos a los otros,
como hermanos, como amigos,
como él hizo en su vida.
Correspondió a tu amor, Padre Dios,
dedicando su vida a hacer felices a los demás.
Recordamos ahora, como él nos pidió,
su entrega hasta el final por la causa del Reino.
Y te damos gracias con este himno en tu honor
SANTO, SANTO, SANTO
CONSAGRACIÓN Y PLEGARIA
Te damos gracias, porque nos enviaste a Jesús,
que nos enseña que eres compasivo,
y que eres la plenitud del amor,
del cariño y de la amistad.
Jesús nos ha reunido alrededor de esta Mesa,
como hijos de una misma familia.
Recibimos tu Espíritu con alegría
para que santifique este pan y este vino y
se conviertan para nosotros
en el sacramento del Cuerpo y + la Sangre de Jesús, en la Persona y la Vida de Jesús, aquí significadas.
El mismo Jesús, la noche en que iban a entregarlo, cogió un pan, te dio gracias, lo partió y dijo:
Tomad y comed todos de él,
porque esto es mi Cuerpo,
que será entregado por vosotros
Después de cenar, hizo igual con la copa, diciendo:
Tomad y bebed todos de él,
porque éste es el cáliz de mi Sangre,
Sangre de la alianza nueva y eterna,
que será derramada por vosotros
y por todos los hombres
para iluminar vuestras vidas.
Haced esto en conmemoración mía.
Éste es el Sacramento de nuestra fe.
Anunciamos y proclamamos tu resurrección. Ven Señor Jesús.
Por eso, Padre de bondad,
celebramos ahora
el memorial que Jesús nos encargó,
y proclamamos la obra de tu amor:
Cristo, tu Hijo, a través del servicio
y la entrega de su vida
ha resucitado a la vida nueva y
ha sido glorificado a tu derecha.
Señor, Padre de misericordia, Tú derramas sobre nosotros el Espíritu del Amor, el Espíritu de tu Hijo.
Fortaleces a tu pueblo con el Cuerpo y la Sangre de tu Hijo y nos renuevas a todos a su imagen.
Derramas tu bendición abundante sobre el Papa Francisco, sobre nuestro Obispo N… y sobre todos tus hijos.
Para que todos los miembros de la Iglesia sepamos discernir los signos de los tiempos y crezcamos en la fidelidad al Evangelio; preocupándonos de compartir en la caridad las angustias y las tristezas, las alegrías y las esperanzas de los hombres, y mostrándoles así el camino de la salvación.
Gracias una vez más porque
has acogido en tu casa del Cielo
a nuestros hermanos difuntos ...
todos nuestros familiares, amigos
y fieles difuntos de esta Comunidad
Y ahora, Padre santo, nos unimos a toda tu creación
para brindar por tu mayor gloria y por la germinación de tu Bondad en nuestro mundo,
en la feliz compañía de tu hijo Jesús,
unidos a nuestra Madre María, a su esposo San José
a los apóstoles, a los santos y a todas las personas
de buena voluntad diciendo
Por Cristo, con Él y en Él, a ti, Dios Padre omnipotente, en la unidad del Espíritu Santo, todo honor y toda gloria por los siglos de los siglos. Amén
PADRENUESTRO
PADRE Y MADRE NUESTRA
EN QUIEN SOMOS Y VIVIMOS.
Santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu reino.
Hágase tu voluntad
en la tierra como en el cielo
TÚ NOS DAS HOY
NUESTRO PAN DE CADA DÍA.
TÚ PERDONAS NUESTROS PECADOS
Y NOSOTROS QUEREMOS PERDONAR
A LOS QUE NOS OFENDEN.
No nos dejes caer en la tentación.
Y líbranos del mal. Amen
CORDERO DE DIOS
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, Tú TIENES piedad de nosotros
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, Tú TIENES piedad de nosotros
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, Tú NOS DAS la paz
Jesús nos invita a ser pan partido y repartido para los demás.
ORACIÓN FINAL
Señor, ¿Por qué nos has dicho que amemos a todos? Lo intentamos, pero nos cuesta. Estamos tranquilos en casa, entre los nuestros, en nuestros negocios y en nuestras casas. Pero, Tú Señor, nos dices que salgamos, y que amemos a todos, incluso a los que no nos caen bien.
¡Son tantos para amar! Y a veces nos cansamos y nos sentimos de mal humor; nos enfadamos o nos hacemos los sordos.
Enséñanos, Señor, la mansedumbre. Que no levantemos la mano en señal de amenaza, ni pongamos cara seria a nadie.
Queremos ser sencillos y aprender a ser amigables y cariñosos. Queremos ser respetuosos, solidarios y sonrientes, aunque nos cueste y sea duro. Amén
BENDICIÓN
El Señor os bendice, os guarda
y en sus palmas os lleva tatuados.
Os acompaña en todos los caminos.
Y hace prósperas las obras de vuestras manos.
Sentíos siempre abrazados y bendecidos por este Dios enamorado,
Padre, Hijo y Espíritu Santo. Amén.