El patriarca emérito de Kiev ompara la guerra de Rusia contra Ucrania con la batalla bíblica entre David y Goliat Filaret: "Ucrania vencerá a Rusia porque Dios está con Ucrania, no con Rusia"

En una entrevista concedida a la redacción georgiana de Azattyk, el patriarca ortodoxo emérito de Kiev Filaret (Denisenko), de 93 años, compara la guerra de Rusia contra Ucrania con la batalla bíblica entre David y Goliat, que terminó con la victoria del muchacho contra el gigante.

Filareto resume en su historia personal todas las contradicciones, religiosas y de todo tipo, de Rusia y Ucrania durante el último medio siglo. Jerarca eclesiástico “soviético” durante mucho tiempo, en 1976 fue uno de los concelebrantes de la consagración episcopal del joven Kirill, actual patriarca de Moscú, con el cual las relaciones se han estancado en un profundo rencor mutuo. En 1990 era el principal candidato a la sede patriarcal de Moscú, pero fue superado por el metropolitano de Leningrado Aleksij (Ridiger), con el apoyo precisamente de Kirill, quien se convirtió en su sucesor en 2009. Filareto decidió entonces emprender su propio camino y en 1992, aprovechando la independencia nacional de Ucrania, se autoproclamó patriarca de Kiev, el único en la historia.

El artífice de la autocefalia

Durante años se mantuvo como un estandarte aislado del nacionalismo religioso, con una estructura eclesial muy endeble de la que, no obstante, surgió su brillante secretario personal Epifanyj (Dumenko). En 2019 Epifanyj fue reconocido por Constantinopla como metropolitano de Kiev, con el apoyo del presidente de Ucrania Petro Poroshenko. Pero no se confirmó el título patriarcal de Kiev, que sigue sujeta al patriarcado ecuménico, dejando a Filareto solo con el título de "emérito". El anciano y fogoso patriarca, sin embargo, no aceptó quedar marginado y a pesar de su venerable edad sigue presidiendo de manera autónoma a un grupo de leales.

Filareto afirma que "Ucrania vencerá a Rusia porque Dios está con Ucrania, no con Rusia: está del lado de la verdad, no de la mentira. Y la victoria de Ucrania será una victoria para toda Europa y para todos los países pacíficos”. La entrevista tuvo lugar mientras los líderes ucranianos hablaban sobre el avance de la línea del frente contra el invasor, que está siendo rechazado en Kharkiv.

Filareto comenta luego las proclamas de su antiguo "ahijado" Kirill, quien "dice negro en lugar de blanco y viceversa, cuando afirma que Rusia nunca ha invadido a nadie, y mucho menos a Ucrania... ¡todo el mundo puede ver la verdad!". Tampoco le agrada la entrevista al Papa Francisco, donde este habla de los "ladridos" de la OTAN a las puertas de Rusia: "No tenemos nada que temer de la OTAN y Rusia no tiene motivos para temer a Ucrania, más bien los que están en peligro son otros países que limitan con Rusia, que sin duda es un país agresor. Los rusos consideran que el Cáucaso y Asia Central también son tierras rusas”.

"El Papa intenta tranquilizar a Moscú"

Según el patriarca emérito, “el Papa intenta tranquilizar a Moscú, por eso dijo que quiere ver a Putin antes de venir a Kiev. Pero nosotros creemos que eso no tiene mucha importancia, todos los caminos son buenos para defender la paz, y en eso estamos de acuerdo con el Vaticano”. Aunque ha quedado aislado en las relaciones eclesiásticas, Filareto se alegra de que en estas difíciles circunstancias se refuercen las posiciones de la Iglesia Ortodoxa autocéfala: "En el futuro en Ucrania habrá una sola Iglesia ortodoxa nacional, en la cual confluirán también las parroquias que ahora controla el patriarcado de Moscú; un país independiente debe tener una Iglesia independiente, como en otras naciones ortodoxas”.

El anciano jerarca concluye con el deseo de que todos los pueblos se unan en la oración por la paz y en defensa de Ucrania, “porque cuando otros nos ayudan, se están ayudando a sí mismos”.