El Vaticano ofrece su ayuda técnica para la restauración del templo Francisco llama a Macron para mostrar su solidaridad por el incendio que devastó Notre Dame
El presidente francés quiere reconstruir la catedral en cinco años. Roma no aportará donación económica porque desde 1905 los templos son propiedad del Estado francés
Bergoglio: "La catedral volverá a ser patrimonio espiritual de París, Francia y la Humanidad"
El Papa Francisco telefoneó ayer por la tarde al presidente francés, Emmanuele Macron, en la que le expresó "su solidaridad con el pueblo francés después del incendio que devastó la catedral de Notre Dame en París". Así lo anunció anoche el portavoz interino de la Santa Sede, Alessandro Gisotti.
Bergoglio, que ha vivido con pesar la catástrofe del pasado lunes en París, ya envió un mensaje, escrito en primera persona, al arzobispo de París, Michel Aupetit, en el que mostraba su confianza en que "la catedral de Notre Dame pueda volver a ser, gracias al trabajo de la reconstrucción y la movilización de todos, ese hermoso espacio en el corazón de la ciudad, signo de la fe de quienes la construyeron, iglesia madre de su diócesis, patrimonio arquitectónico y espiritual de París, Francia y la humanidad".
No habrá donación económica
La llamada del Papa a Macron es una de las muchas muestras de la solidaridad de la Iglesia con el pueblo francés que, sin embargo, no se traducirá en una donación económica, tal y como explicó ayer el presidente del Consejo Pontificio de la Cultura, Gianfranco Ravasi. Y es que, a diferencia de lo que sucede en España, desde 1905 los bienes de la Iglesia católica en Francia son propiedad del Estado francés. También Notre Dame.
Sin embargo, el purpurado sí apuntó a la posibilidad de que la Santa Sede pueda ofrecer su "competencia técnica" para llevar a cabo la reconstrucción del templo. Una reconstrucción que, como anunció Macron, se quiere llevar a cabo en apenas cinco años.
"Tenemos competencias de alta cualidad reconocidas en el mundo entero y podría pensarse en una eventual oferta de este nivel. Habrá que ver el estado real de la situación de la catedral de Notre Dame y la Santa Sede podría estar presente en algunos temas específicos sobre los que intervenir", subrayó Ravasi durante la presentación del stand de la Sant Sede en la Exposición de Beijing.
Ravasi, además, expresó su "conmoción sugestiva" ante el hecho de que muchos franceses y turistas "lloraran" ante el incendio de la catedral de Notre Dame. "Esto demuestra que las catedrales son un cuerpo viviente".