Lo anunció Tiziano Onesti, presidente del sanatorio pediátrico Nueva misión del Bambino Gesù en el hospital italiano de Karak, en Jordania
Después de la reciente campaña dedicada a la neuropsiquiatría infantil y adolescente, un equipo de especialistas ofrecerá apoyo al centro sanitario gestionado por las hermanas misioneras combonianas
"Las familias viajan incluso 300-400 kilómetros sólo para una consulta, porque aquí encuentran respuestas que no reciben en otros lugares"
Tres criterios sustentan el proyecto en Jordania: intervención centrada en la familia, es una intervención basada en recursos comunitarios y cuyo objetivo es transferir conocimientos y buenas prácticas
Tres criterios sustentan el proyecto en Jordania: intervención centrada en la familia, es una intervención basada en recursos comunitarios y cuyo objetivo es transferir conocimientos y buenas prácticas
Durante la misión que acaba de finalizar, estuvieron presentes los médicos neuropsiquiatras de la infancia y la adolescencia Fabio Quarin y Giovanni Valeri del Bambino Gesú. Se visitaron 45 pacientes, 30 de los cuales estaban en seguimiento por haber sido atendidos en misiones anteriores, y se ofrecieron actividades de capacitación a dos terapeutas locales.
“Lo que hace el Hospital Bambino Gesù con sus misiones en Karak no es una gota en el océano, es mucho más. Las familias incluso viajan entre 300 y 400 kilómetros sólo para una consulta, porque aquí encuentran respuestas que no reciben en otros lugares", dijeron sor Adele Brambilla y sor Alessandra Fumagalli durante la conexión por vídeo con Onesti.
El director médico del hospital de la Santa Sede, Massimiliano Raponi, el responsable de Relaciones Internacionales, Sandro Cristaldi, y el doctor Valeri (jefe de la Unidad de Trastornos del Espectro Autista) explicaron brevemente los tres criterios que sustentan el proyecto en Jordania. La primera es una intervención centrada en la familia, porque en Karak "no hay estructuras y el único recurso es, de hecho, la familia"; el segundo criterio “es una intervención basada en recursos comunitarios (community-based); el tercero, una intervención cuyo objetivo es transferir conocimientos y buenas prácticas (capacitación) tanto a padres como a terapeutas locales".
La misión del pasado mes de junio recibió el apoyo de la Asociación Alessandro Parini, comprometida a apoyar iniciativas de formación y desarrollo para quienes se encuentran en dificultades y creada en memoria del joven abogado, fallecido trágicamente en un atentado en Tel Aviv. El apoyo a la colaboración entre los dos hospitales "tiene como objetivo proporcionar apoyo sanitario a las comunidades locales, desarrollando capacidades esenciales para el cuidado de los niños", explicó el presidente de la asociación, Enzo Parini.
El compromiso de las combonianas
El Instituto de las Misioneras Combonianas gestiona el Hospital Italiano de Karak desde 1939, cuatro años después de su fundación. La comunidad de monjas combonianas se compromete a mantener su presencia como signo de diálogo interreligioso y de apertura hacia todos, involucrando al personal cristiano y musulmán en la acogida y la atención a los enfermos, con especial atención a los más pobres y excluidos.
La población de la provincia de Karak, a unos 140 kilómetros de la capital, Amán, incluye numerosos refugiados, sobre todo sirios -se estima que Jordania ha acogido a más de un millón de ellos desde 2011- e iraquíes. En 2013, cuando comenzó la colaboración con Bambino Gesù, se anunció la llegada de especialistas italianos con un llamamiento radiofónico que ofrecía la posibilidad de realizar una consulta gratuita de neuropsiquiatría y neurorrehabilitación pediátrica. 150 familias respondieron de inmediato. Desde entonces, más de 800 niños han sido tratados y se han realizado aproximadamente 2.300 visitas. También trabajamos en la formación de terapeutas locales y en la definición de un programa de formación para padres destinado a apoyar a los padres en el manejo de los aspectos conductuales del niño.