Junto con los desplazados tras el bombardeo de la catedral de Loikaw, en Myanmar Obispo Shwe: "La Iglesia se ha convertido en el mayor refugio para todas las personas en este tiempo de conflicto"
Meses después de que el centro pastoral de la Catedral de Cristo Rey en Loikaw (Myanmar) fuese bombardeado el 26 de noviembre y ocupado por el ejército birmano al día siguiente, las tropas siguen ocupando las dependencias y continúan dentro del templo catedralicio, parcialmente dañado, y con todos sus objetos litúrgicos profanados
Monseñor Celso Ba Shwe, obispo de Loikaw (estado de Kayah), quien también se vio obligado a evacuar el centro, junto con todos los sacerdotes, religiosos y religiosas de la diócesis, explica la situación en la que se encuentra la sede diocesana tras haber sido ocupada por los militares y en vísperas del anunciado viaje del Papa a Asia y Oceanía del próximo mes de septiembre
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Meses después de que el centro pastoral de la Catedral de Cristo Rey en Loikaw (Myanmar) fuese bombardeado el 26 de noviembre y ocupado por el ejército birmano al día siguiente, las tropas siguen ocupando las dependencias y continúan dentro del templo catedralicio, parcialmente dañado, y con todos sus objetos litúrgicos profanados.
Monseñor Celso Ba Shwe, obispo de Loikaw (estado de Kayah), quien también se vio obligado a evacuar el centro, junto con todos los sacerdotes, religiosos y religiosas de la diócesis, explica a SIR la situación en la que se encuentra la sede diocesana tras haber sido ocupada por los militares y en vísperas del anunciado viaje del Papa a Asia y Oceanía del próximo mes de septiembre.
“El Santo Padre visitó Myanmar en 2017 y ama mucho a este país”, señala. "La junta militar ha vuelto a ocupar Loikaw, la capital, que quedó casi totalmente destruida tras los combates de la llamada Operación 1111. Muy pocos residentes han regresado a sus hogares, también porque la mayoría estaban completamente destruido y la gente no sabe adónde ir. Existe el peligro de minas y municiones sin detonar y muchos creen que los combates podrían reanudarse en cualquier momento”.
En una parroquia remota con los desplazados
"Ahora vivo en una parroquia remota que está cerca de muchos campos de desplazados internos. Todos los sacerdotes y religiosos son desplazados junto con sus feligreses y algunos viven con personas en tiendas de campaña improvisadas en los campos y otros en parroquias no afectadas que están cerca de los feligreses desplazados en campos de refugiados".
"La Iglesia se ha convertido en el mayor refugio para todas las personas en este tiempo de conflicto", narra el obispo a la agencia italiana. "La gente necesita de la iglesia no sólo para la alimentación y las necesidades materiales, sino que también necesita de sacerdotes y religiosos que estén con ellos, para apoyo espiritual, acompañamiento psicológico, apoyo educativo, para servicios de salud y obviamente para ayuda humanitaria".
Consciente de que el Pontífice pide todas las semanas, tras el rezo del ángelus, por Myanmar, para que el mundo no olvide el drama que está viviendo, el obispo señala que "estamos muy agradecidos al papa Francisco, porque sentimos que comparte nuestros sufrimientos y ora por Myanmar. Obtenemos coraje y fuerza de él, de su discurso directo a los líderes mundiales en favor del sufrido pueblo de Myanmar".