"Irak necesita su presencia y mensaje y el momento es oportuno", afirma el patriarca caldeo El cardenal Sako expresa su "gran alegría y emoción" por la posible visita del Papa a Irak

La visita del Papa Francisco a Irak en 2020 es fuente “de gran alegría, de emoción” para todo el país, un evento que une a “cristianos y musulmanes”. Es cuanto afirma a AsiaNews el primado caldeo, el Card Louis Raphael Sako, comentando el anuncio hecho ayer por el mismo pontífice durante la 92da asamblea plenaria de la Reunión de las Obras de Ayuda a las Iglesias Orientales (ROACO). “Un pensamiento insistente - estas las palabras del Papa - me acompaña pensando en Irak, donde tengo la voluntad de ir el próximo año”.

Ya en el pasado se había hablado de una posible visita del pontífice argentino a Irak, pero mientras tanto no existen las condiciones. El mismo Papa Francisco, en febrero del año pasado, había declarado que “lo estamos pensando, pero las condiciones actuales no lo permiten”.

“Ahora- cuenta el Card. Sako- el ambiente está preparado, hay mayor seguridad, todos quieren encontrar a un Papa que va a los Emiratos, a Marruecos. También Irak necesita su presencia, de su mensaje y el tiempo es el justo para que esto suceda”.

La máquina ya está en marcha

En su discurso a los participantes en la 92da asamblea primaria de la ROACO, el Papa Francisco auspició que el país “pueda mirar adelante a través de la pacífica y compartida participación en la construcción del bien común de todos los componentes también religiosos de la sociedad”. Él por lo tanto invitó a la nación y a su pueblo a no recaer “en tensiones que vienen de los jamás aplacados conflictos de las potencias regionales”.

Después de la oficialización de la visita, cuenta el primado caldeo, “la gente inició a festejar. Ayer me encontraba en Erbil, donde inauguré entre otras cosas una gran sala parroquial. En el evento estaban presentes más de 500 personas y todas aplaudieron cuando se difundió la voz de una breve presencia del Papa en Irak”.

Una presencia, precisa el purpurado, que “es fuente de satisfacción y alegría” también para el gobierno y para la dirigencia del país. “El presidente iraquí, Barham Salih - agrega- me habló pidiendo información sobre la fecha, que todavía no está fijada. Sin embargo, también aquí la máquina organizativa se puso en movimiento y ya está bien orientada”.

Los musulmanes, "felices" por la posible visita

En el Kurdistán iraquí, donde han encontrado refugio centenares de miles de refugiados, también cristianos, escapando del Estado islámico (EI, ex-ISIS) en verano de 2014, el Card. Sako participó en la toma de posesión de Nechirvan Barzani como nuevo presidente de la región autónoma. “Hoy en toda la nación- explica- hay más orden, mayor unidad. Los musulmanes, sunitas y chiíes, están felices de esta visita porque el Papa Francisco goza de un profundo respeto de los jefes religiosos, sean ellos simples fieles o jefes religiosos y políticos”.  

Su presencia, agrega el patriarca caldeo, “reforzará el diálogo en la huella de los encuentros del pasado, en particular el viaje apostólico en los Emiratos Árabes Unidos y sabrá consolidar la fraternidad humana en Abraham y la común pertenencia a Dios, que es padre de todos nosotros hermanos en la fe”. El elemento de Dios como padre común, explica, “asombrará a los musulmanes”.

En concreto, la primer visita de un pontífice en la historia de Irak será también una ocasión para el retorno de cuantos escaparon en el pasado. “El Papa recibirá una gran bienvenida- subraya el purpurado- que pide a todos, cristianos y musulmanes, de preparar lo mejor posible la llegada del Papa… una visita de paz de un hombre de verdadera paz”.