El cardenal está acusado de abusos en un juicio del que no se tienen detalles La diócesis de Melbourne abandonará la defensa legal de George Pell
(Cameron Doody).- La Iglesia australiana quiere pasar página definitivamente a la era Pell. Eso es lo que desprende de comentarios ofrecidos este jueves por el nuevo arzobispo de Melbourne, Peter Comensoli, quien ha confirmado que desmantelará el controvertido programa de indemnizaciones a víctimas de abusos clericales establecido por el todavía Prefecto de la Secretaría de Economía de la Santa Sede, ahora sentado en el banquillo de los acusados por supuestas agresiones sexuales a menores.
"No sé lo que será, pero no será la 'Respuesta de Melbourne' ni 'Hacia la Sanación'", declaró Comensoli, preguntado por periodistas en el Club de Prensa de Melbourne sobre el nuevo programa de indemnizaciones que están preparando los obispos australianos como parte de su respuesta a las conclusiones de la Real Comisión anti-pederastia.
La llamada 'Respuesta de Melbourne' es el programa de compensaciones que el cardenal Pell estableció por su propia cuenta en 1996, siendo por entonces arzobispo de la ciudad, mientras que 'Hacia la Sanación' es el programa adoptado por el resto del episcopado nacional, solo dos meses después.
Una de las diferencias claves entre los dos programas es que mientras 'Hacia la Sanación' nunca limitó la cantidad de dinero que podía recibir una víctima de abusos, sí lo hizo la 'Respuesta de Melbourne', el protocolo que Pell se empeñó en implementar él solo. Una estrategia que, según informaron medios Fairfax a finales de 2015, podría haber ahorrado la Iglesia de Melbourne hasta 62 millones de dólares australianos (38 millones de euros).
Pero aunque Comensoli ha confirmado así que habrá un nuevo programa de indemnizaciones -y eso se espera a nivel nacional- no es el único cambio importante que habrá en cuanto a la búsqueda de justicia para las víctimas de abusos en la archidiócesis de Melbourne.
El flamente arzobispo -quien solo tomó posesión en julio- también ha confirmado que la archidiócesis abandonará la defensa legal empleada tanto por Pell como su sucesor (y predecesor de Comensoli), Denis Hart, que garantizaba que no se le podía demandar a la Iglesia porque no existía como una entidad legal.
Explicando los cambios, Comensoli enfatizó que solo se puede construir confianza "siendo confiable". "No construyes confianza saliendo y diciendo, '¡Confía en mí!' Lo haces por tus propios actos personales", recalcó, enfatizando que la Iglesia tiene que desprenderse de su imagen "corporativa" y recuperar su esencia de "humildad".