"Los actos atroces de esos sacerdotes fueron encubiertos con mentiras", reconoce el actual obispo El triste récord de la diócesis alemana de Essen: 200 abusadores en solo 65 años de historia

La diócesis alemana de Essen, es un ejercicio de transparencia, acaba de presentar un informe sobre los abusos sexuales en esa sede, creada en 1958, que arroja unos datos en donde se han identificado más de 400 casos y 201 presuntos perpetradores, sin que, al menos hasta 2010, los afectados pudieran encontrar apoyo en sus pastores, “al contrario”, según informa Katholisch.

Según cifras de la diócesis, un total de 201 personas fueron acusadas, incluidos 129 clérigos y 19 religiosos. De estos, 33 fueron condenados en virtud de la ley penal o en procedimientos canónicos, y hubo un total de 53 cargos penales contra los acusados. 163 personas han solicitado una prestación por sufrimiento sufrido, de las cuales 141 ya han sido decididas, lo que ha supuesto que la diócesis ha desembolsado un total de 2,58 millones de euros en ayudas a los afectados, según la misma fuente.

Trasladados a otras diócesis

Según señala el informe, elaborado por el Instituto de Investigación Práctica y Consultoría de Proyectos de Múnich (IPP), “era común que los sospechosos fueran trasladados a otras oficinas y diócesis, por lo que los perpetradores a menudo podían seguir teniendo contacto con niños y jóvenes”.

En este sentido, destaca ahora la actitud del obispo, Franz-Josef Overbeck, quien, en una primera declaración, reconoció que "los actos atroces de los sacerdotes, que conocemos desde la investigación legal del escándalo de abusos en los últimos años, han sido encubiertos, minimizados o encubiertos por transferencias y mentiras".

Agradecimiento a las víctimas

Por ello, se ha comprometido a una mayor profesionalización del trabajo para prevenir la violencia sexual, a la vez que enfatizó el agradecimiento por la colaboración de las víctimas en este informe. “Mi agradecimiento, por lo tanto, va en primer lugar a los afectados que, a pesar de la injusticia que les infligieron los representantes de la Iglesia, ahora se comprometen a aceptarla. De esta manera, nos ayudan a convertirnos en una diócesis en la que prevenimos la violencia y violaciones lo mejor que podamos", señaló Overbeck.