Las Hijas de la Caridad y Berakah llevan a Vitoria una idea inspirada en S. Vicente de Paul 13 Casas, un proyecto “admirable” “necesario” “urgente” y que ofrecerá un “alivio” a muchas familias
Monseñor Elizalde: “No basta la buena voluntad, hacen falta medidas lúcidas y concretas como 13 casas"
Mari, migrante: "Queremos que nos brinden una oportunidad a todos los que un día llegamos aquí"
Jesús Prieto: “Los rumores perversos que circulan en nuestra sociedad son un problema para facilitar los alquileres”
Martin Fiz: “el 13 es un número de equipo”
Jesús Prieto: “Los rumores perversos que circulan en nuestra sociedad son un problema para facilitar los alquileres”
Martin Fiz: “el 13 es un número de equipo”
| Vicente Luis García Corres (Txenti)
Este jueves se presentaba en público el proyecto 13 casas en Vitoria. Las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, de la mano del Programa Berakah, se han lanzado a generar la confianza de propietarios de viviendas vacías en Vitoria-Gasteiz y ofrecerlas para alquilarlas a familias necesitadas de vivienda, a un precio justo de mercado y con las garantías de uso debidas.
Aunque el programa se puso en marcha hace unos meses es ahora cuando la puesta de largo se hace con la colaboración de cuatro personas, llamadas embajadores del proyecto 13 casas: José Ángel Cuerda, primer alcalde de la democracia en Vitoria; Martín Fiz, atleta olímpico; Jesús Prieto profesor en la Universidad de Deusto; y Juan Carlos Elizalde, obispo de Vitoria. El Diácono permanente, Fidel Molina, delegado de la Diócesis de Vitoria para el Programa Berakah ha informado que ya han conseguido poner en marcha 3 viviendas. Destaca cómo además este proyecto pone en contacto a los propietarios con los inquilinos, logrando romper tabúes y estereotipos, prejuicios y desconocimientos.
Motivos de salud impidieron la presencia en el acto del exalcalde Cuerda quien, en un audio facilitado a los medios con la nota de prensa reconocía que “aunque el nivel de vida en Vitoria-Gasteiz es bueno, sin embargo hay muchas familias que lo están pasando mal.” Por eso el proyecto 13 casas le parece “admirable”
El primero en tomar la palabra fue el obispo de Vitoria, monseñor Elizalde, quien, entre otras cosas dijo: "...Las familias más empobrecidas necesitan viviendas para alquilar. Algo tenemos que hacer. Conseguir 13 viviendas en 1 año garantizando el alquiler, generar una relación de confianza con el propietario, tenemos que encontrar 13 propietarios que alquilen sus viviendas por no más de 600€ al mes. Como hizo San Vicente de Paúl en París construyendo 13 casas. No basta la buena voluntad, hacen falta medidas lúcidas y concretas como 13 casas .".
Seguidamente el maratoniano Martín Fiz tomó la palabra como otro de los embajadores del proyecto y animó a todos a ser ese jugador número 13 para este proyecto, recordó el origen inmigrante de sus padres, por lo que le resulta fácil empatizar con la gente que hoy lo pasa mal.
Desde el mundo de la cultura ponía la voz de apoyo al proyecto 13 casas el profesor Jesús Prieto, quien decía en su intervención: "Todos los que estamos aquí, somos migrantes. Los rumores perversos que circulan en nuestra sociedad son un problema para facilitar los alquileres. Con este proyecto S.V.P. 13 Casas, se garantiza un seguimiento exhaustivo de las viviendas a sus propietarios. Es una cuestión de ciudadanía, y humanidad. En su Artículo 1 la Declaración de Derechos Humanos habla del comportamiento fraternal de los seres humanos. Este proyecto, me reconforta con la Iglesia comprometida...".
Quizá la intervención más emotiva la puso Mari, peruana y primera beneficiada del proyecto 13 casas: "Queremos que nos brinden una oportunidad a todos los que un día llegamos aquí", decía emocionada.
Para cerrar las intervenciones se le ofreció la palabra al alcalde de Vitoria-Gasteiz, Gorka Urtaran, quien tras reconocer que proyectos como 13 casas son necesarios porque las instituciones no llegan a dar respuesta a toda la demanda, añadió: "La situación de exclusión residencial es la más acusada y extrema. Se produce por desconfianza, y por discursos que no ayudan a establecer esa confianza. Tenemos pisos vacíos, en muy mal estado, y queremos establecer convenios con el Gobierno Vasco para su rehabilitación".
Al acto fueron invitados representantes de las inmobiliarias de Vitoria-Gasteiz, su participación puede ser clave en la campaña de generar confianza en el propietario de viviendas del mercado de alquiler.
Este es el comunicado que Berakah hizo público para dar a conocer el proyecto:
El ‘Proyecto 13 Casas’, lanzado desde las parroquias del Casco Viejo vitoriano, requiere múltiples apoyos que permitan la captación de viviendas para personas en situación de exclusión, voluntarios para hacer un seguimiento y el respaldo económico de donantes particulares y organizaciones de todo tipo que lo garantice. Muchas personas desconocen los mecanismos administrativos para poder acceder a una vivienda pública y son rechazados en el mercado ordinario de la vivienda, bien por su situación administrativa irregular, en el caso de las personas migrantes, bien por no disponer de avales suficientes como una nómina fija, ingresos demostrables… o bien por las propias características personales de las personas necesitadas de este servicio. Ante la única alternativa de vivir en la calle, en pensiones, en habitaciones, la mayor parte de las veces en situaciones muy precarias, o en vivienda inadecuada, como pueden ser trasteros, garajes u ocupas, Berakah se ha puesto manos a la obra para evitar estas situaciones.
El País Vasco es la cuarta comunidad autónoma que tiene los alquileres más elevados por lo que no es de extrañar el complicado acceso a estos por parte de muchas familias. Son ya varios años los que avalan el trabajo de los voluntarios de Berakah en torno a programas de vivienda accesibles a personas vulnerables y en riesgo de caer en la pobreza. Ante un mercado inmobiliario alejado de rostros e historias personales, el ‘Proyecto 13 Casas’ pretende romper tabúes y acompañar a inquilinos y propietarios en una relación de confianza y cercanía que garantice una vivienda digna para personas necesitadas y una seguridad en el momento de arrendar para los propietarios. Así, desde Berakah se ha creado un fondo solidario a base de donaciones de particulares y de organizaciones privadas para con ello poder pagar el alquiler año tras año en estas 13 viviendas. Este fondo avala el pago anual a los propietarios y se haría cargo de posibles desperfectos en la vivienda. Un tutor personal de Berakah controlaría que todo discurre bien, mes a mes.
Los objetivos que buscan sus promotores son captar 13 viviendas para permitir el acceso a recursos habitacionales dignos a personas vulnerables, lograr que las personas puedan mantenerse en la vivienda y adquieran las habilidades para conservarla de manera autónoma y mejorar en los inquilinos la salud, el bienestar, las relaciones familiares y sociales, el acceso a un empleo y participar en la vida social y cultural de la ciudad. Desde Berakah se pide apoyo a particulares, organizaciones privadas, asociaciones, parroquias, etc. para poder llevar a cabo estos fines.
Este proyecto rompe con la situación del mercado de cara a las personas más vulnerables y es puente para recuperar la confianza entre arrendador y arrendatario. Las principales ventajas que ofrece el ‘Proyecto 13 Casas’ son: un estado de tranquilidad para el propietario durante todo un año gracias a la garantía total de cobro y del estado de la vivienda, y de cara al arrendatario sirve para tener acceso al mercado de alquiler, desarrollar sus competencias de inserción social, ser autosuficiente y gestionar sus propios recursos, entre otros. De cara a la sociedad, alquilar viviendas, que hasta ahora se encuentran cerradas, y acabar con el miedo y los prejuicios adquiridos nos convierte en una ciudad acogedora, compasiva y solidaria, capaz de disfrutar de la riqueza de la interculturalidad.
Por ello, Berakah insiste en la necesidad de apoyos para los tres pilares sobre los que se sustenta el ‘Proyecto 13 Casas’. Por un lado confirmar un fondo de garantía solidaria que dé tranquilidad a todas las partes, por otro, un equipo de voluntarios que sirva para acompañar a inquilinos y propietarios y finalmente 13 viviendas, y más si fuese posible, para comenzar con este servicio de alquiler en beneficio de personas que la necesitan”.
Non solum sed etiam
Pido disculpas por si resulta falta de modestia por mi parte, pero, ya que tuve el honor y privilegio de presentar y conducir este acto, voy a recoger alguna de mis palabras con las que asistentes al acto se han quedado y recogido en sus redes sociales:
"..Quienes aquí estamos tenemos la experiencia de que hay más gozo en dar que en recibir. De la mano de las Hijas de la Caridad de San Vicente Paúl y Berakah, queremos dar confianza mutua y seguridad mediante un fondo solidario a propietarios para que alquilen sus viviendas...".
"Un posible eslogan para estas Navidades podría ser: “La Ilusión nunca faltará a su cita. Pero este año espérala en casa”, que este deseo sea una realidad para muchas más familias en estas Navidades.”
Etiquetas