Retiro Espiritual de Adviento Jacques Philippe regresa a Vitoria para hablar de “vivir la vida desde la esperanza y el amor”
Se abre la inscripción con plazas limitadas para participar los días 27 y 28 de noviembre en estas jornadas de la mano de este religioso francés, reconocido a nivel internacional como director espiritual y autor de numerosos libros traducidos a 24 idiomas.
| Vicente Luis García Corres (Txenti)
El Seminario de Vitoria-Gasteiz acogerá los días 27 y 28 de noviembre unas jornadas espirituales con el título ‘Esperanza y Caridad’. Con estas dos virtudes teologales como timón de este retiro, el encargado de dirigirlo será el reconocido religioso francés experto en ejercicios espirituales, Jacques Philippe.
El Padre Philippe es miembro de la Comunidad de las Bienaventuranzas, fundada en 1973 en Montpellier, Francia. Hoy está presente en 26 países y su seña de identidad es la vida contemplativa de inspiración carmelita, activamente comprometida con las personas más necesitadas y con el anuncio del Evangelio, cuyas enseñanzas van dirigidas a hombres y mujeres de toda edad, tanto religiosos como casados o no casados. En la actualidad cuentan con más de un centenar de sacerdotes, 40 seminaristas, 350 religiosos y religiosas y unas 5.000 personas asociadas entre familias y matrimonios, solteros, etc, quienes forman una comunidad de fieles repartidos por todo el mundo cuyo reflejo de vida se basa en las primitiva comunidad cristiana basada en las nueve Bienaventuranzas que predicó Jesús.
Este carismático religioso francés nació en 1947 en Lorena, región del norte que limita con Bélgica, Luxemburgo y Alemania. Tras finalizar sus estudios universitarios de Matemáticas, se dedicó a la docencia e investigación científica. Con 29 años, en 1976, conoció la recién creada Comunidad de las Bienaventuranzas, a la que se sumó ordenándose sacerdote en 1981. Fue director espiritual en la formación de religiosos y seminaristas y comenzó a dirigir retiros por toda Francia. A la par, iba escribiendo sus reflexiones acerca de la espiritualidad y del mensaje de Cristo y a comienzos del siglo XXI comenzó a impartir sus meditaciones por todo el mundo, llegando a ser uno de los autores más reconocidos sobre vida espiritual. Ha escrito numerosos libros, de los cuales ha vendido más de un millón de ejemplares, siendo traducido a 24 idiomas.
Desde esta semana, quien quiera participar en estas jornadas de dos días de duración en el Seminario de Vitoria, podrá hacerlo rellenando la ficha de inscripción disponible en la web de la Diócesis de Vitoria. Las plazas están limitadas y consta de tres sesiones el sábado y dos el domingo, repartidas entre el Aula Magna y la Capilla Pública. Entre estas, habrá también tiempo para la reflexión personal, el sacramento del perdón y adoración. El encargado de darle la bienvenida el sábado a primera hora será el Obispo de Vitoria, D. Juan Carlos Elizalde, quien concelebrará junto a él las misas del sábado y del domingo. Habrá además la opción de quedarse a comer en el propio Seminario, con un precio de 23 euros por persona.
El Padre Philippe se centrará en cómo vivir la vida cristiana desde la esperanza y el amor, dos de las tres virtudes teologales. Estas se entienden como dones de Dios hacia todas las personas que están abiertas a ellos, con el fin de crecer en su interior. Con este retiro, Jacques Philippe invita a todos a tejer un modelo de vida abierto a esa esperanza que promete el Evangelio ante el desaliento y la desesperación que muchas veces golpea el día a día y también abierto al amor de Dios que define al cristiano, con el servicio al necesitado, el perdón y la delicadeza con cada persona. En estos dos días, este religioso francés ayudará además a dar respuesta a ese reclamo que tienen muchas personas hoy en día donde tienen sed de vida espiritual y sed de Dios, enseñando técnicas para facilitar un encuentro personal con el Señor gracias a la oración. También este retiro fortalecerá la paz interior en estos tiempos de confusión e inquietudes varias, generados muchos de ellos por la pandemia.
Non solum sed etiam
Sin duda es un gran acierto que la Iglesia proponga un mensaje de esperanza y amor. Cada vez estoy más convencido de que la Iglesia ha de caminar más sobre las virtudes teologales que sobre los cánones eclesiales.
El problema es que a veces, los mismos que ofrecen estas propuestas espirituales, luego rigen sus “modus operandi” por lo que “manda la Iglesia”, y se les escapa que el Evangelio no se impone, se propone.
Si la Iglesia es un espacio de encuentro con Dios, habrá que facilitar que la gente se acerque, y no provocar que salga rebotada.