Vida Ascendente y la Delegación de pastoral para la Tercera Edad organiza en Vitoria la 1ª Jornada de charlas bajo el epígrafe “Depositarios de la Memoria”. Esta primera conferencia girará en torno a la figura de Emilia Pardo Bazán, y será impartida por la profesora de Enseñanza Media Julita Corral, quien ha titulado su ponencia “Emilia Pardo Bazán. ¿Qué nos diría hoy día?” 

Esta mujer se considera heredera espiritual de quien es considerada una de las grandes figuras literarias de su época, aunque Julita, y a tenor del curriculum de esta mujer, señala con acierto que “Emilia Pardo Bazán, lo fue todo”

Emilia Pardo-Bazán y de la Rúa-Figueroa (La Coruña, 16 de septiembre de 1851-Madrid, 12 de mayo de 1921), condesa de Pardo Bazán, fue una novelista, periodista, empresaria, ensayista, crítica literaria, poetisa, dramaturga, traductora, editora, pedagoga, catedrática y conferenciante, introductora del naturalismo en España. Fue una precursora en sus ideas acerca de los derechos de las mujeres y el feminismo. Reivindicó la instrucción de las mujeres como algo fundamental y dedicó una parte importante de su actuación pública a defenderlo. Entre su obra literaria una de las más conocidas es la novela Los pazos de Ulloa (1886).

¿Qué justifica traer hoy a la memoria el legado de Pardo Bazán?

Por un lado, el centenario de su muerte puede ser un motivo más que suficiente. Clara Campoamor definió en la crónica de su sepelio, que esta mujer “pasó de la vida a la inmortalidad”. Por cierto, un sepelio al que solo acudieron hombres. 

Julita repasará durante su conferencia aspectos de la biografía de esta mujer que “lo fue todo”. Partiendo de textos de esta gran literata del s.XIX y principios del XX ofrecerá respuestas a cuestiones de rabiosa actualidad y ofrecerá datos anecdóticos como el de la ausencia de mujeres en sus funerales.  

Pero Julita quiere reivindicar en Vitoria dos aspectos, que considera poco difundidos, de la vida y obra de Emilia Pardo Bazán: “Ella fue la autora de San Francisco de Asís”, los dos volúmenes que Pardo Bazán dedica al poverello de Asís son claves en el conocimiento de la figura de este santo universal. Y de su vida poco se ha dicho de su condición de Franciscana Terciaria, como tal murió y fue enterrada, y, señala Julita, “creo que Vitoria puede congratularse de haber destacado este aspecto de Emilia Pardo Bazán en el centenario de su muerte.” 

Pero ¿Qué diría Pardo Bazán de ese supuesto lenguaje inclusivo de “los las lxs l@s”?

No lo habría aceptado porque era una amante del español. Siempre ensalzó la lengua castellana y defendió el español como un idioma que unía a los pueblos. No habría aceptado estos términos. 

¿Qué diría Pardo Bazán de la última decisión en materia de educación que permite pasar de curso con suspensos?

No lo aceptaría porque Doña Emilia valoraba el trabajo y el esfuerzo. El trabajo dignifica a la persona, en el esfuerzo está el reconocimiento del ser humano. Emilia Pardo Bazán es el ímpetu y el canto al trabajo por encima de todo.  Y si me permites una opinión personal como docente: eliminar los exámenes de recuperación de septiembre es robar al alumno la posibilidad de superarse y descubrir sus propias potencialidades. Lo que se presenta como un castigo en la realidad  es una oportunidad que muchos van a dejar de tener. Nunca sabremos lo que muchos alumnos, por sí mismos, y haciendo un esfuerzo extra podrían haber alcanzado por méritos propios.

¿Qué diría Pardo Bazán de la manipulación de iconos feministas como ella?

El feminismo de Emilia Pardo Bazán se fundamenta en tres pilares: El acceso de la mujer a la educación universitaria superior, para ello utilizó hasta sus influencias y amistad con el rey Alfonso XIII; Igualdad legal de hombres y mujeres. Emilia Pardo Bazán no concebía el poder del marido sobre la esposa en muchos temas legales; La independencia de la mujer estaba muy ligada al derecho al trabajo, el trabajo era clave en el proceso de independencia de la mujer.  Y su feminismo tiene raíces cristianas, y así lo dice en el congreso pedagógico de 1892. 

En la charla que ofrecerá Julita este viernes a las 18 horas en el aula San Pablo de la Diócesis de Vitoria también se repartirá el texto de un artículo que escribió Dña. Emilia tras su paso por la Vitoria de principios de siglo, donde ensalza el desarrollo urbanístico de la ciudad y hace referencia a unas obras de Ribera que hoy se pueden ver en el Museo de Arte Sacro, San Pedro y San Pablo y un Cristo que Pardo Bazán pone a la altura del Cristo de Velázquez. 

Non solum sed etiam 

Qué importante es que desde la Iglesia ensalcemos a cuantos fueron adelantados a su tiempo, y desde postulados evangélicos defendieron lo que hoy parecen obviedades y entonces eran grandes luchas. Así Dña Emilia Pardo Bazán ensalzaba la defensa de los derechos de la mujer con el Evangelio en la Mano; Claret, abolicionista y defensor del diaconado femenino; Francisco de Asis, quien más ecologista que él que trata de hermanos al lobo, al viento y hasta la muerte; … y así podríamos ir citando cientos de nombres de hombres y mujeres, adelantados a su tiempo, que hoy, algunos son izados como iconos de luchas “modernas”, pero qué curioso, olvidando las fuentes de las que aquellos bebían.