Reus Circ Social en la estela del Circo de los Muchachos Rafa Arencón: “La tradición acrobática nos ha servido para el diálogo entre culturas y religiones”
La coeducación de chicos y chicas es algo normal
Se trata de usar el Circo, crisol de todas las artes, para el progreso personal
Benposta es un ejemplo, una capilla y una mezquita coexistieron juntas físicamente
Benposta es un ejemplo, una capilla y una mezquita coexistieron juntas físicamente
| Vicente Luis García Corres (Txenti)
En 1917 el sacerdote P. Flanagan (desde hace 8 años en proceso de beatificación) puso en marcha un proyecto, hoy diríamos de integración social, para muchachos de la calle o procedentes de orfanatos. Aquello llegó a convertirse en La Ciudad de los Muchachos, una obra que la gran pantalla dió a conocer en todo el mundo con los títulos Forja de Hombres (1938) (Spencer Tracy y Mickey Rooney) La ciudad de los muchachos (1941).
En 1960 esta obra tendría su réplica en España con el jesuíta el P. Jesús Silva quien cerca de la localidad de Ourense, en la finca conocida como Benposta, empezó a levantar la Ciudad de los muchachos. Se convirtió en la segunda gran escuela de circo del mundo, después de los rusos. La obra del P. Silva se extendió por latinoamérica y, de sus escuela de Circo salieron grandes artistas como Julio Sabala o la semilla de proyectos circenses como El Circo del Sol.
Hoy, aun cuando el mundo del circo pasa horas bajas, la disciplina, los valores, la pasta con la que se forjan los hombres y mujeres del circo siguen siendo un marco idóneo para dar una oportunidad a muchos jóvenes a los que la vida no les ha tratado bien en sus primeros años.
Y el testigo del P. Silva, que falleció en 2011 lo han tomado otras personas que siguen creyendo en aquella frase del P. Flanagan que decía insistentemente «No existe en realidad, un solo muchacho auténticamente malo»; o que persiguen esa meta marcada por el P. Silva de formar en estos centros “ciudadanos de un «mundo nuevo»”.
Una de esas personas es Rafael Arencón, pastor, o sacerdote, de la Iglesia Reformada Española, perteneciente a la comunión de Iglesias anglicanas. Rafa está casado, tiene 2 hijas, Aina de 16 y Wendy de 13, ambas participan activamente en la labor social de su padre. Es licenciado en Derecho y actualmente imparte clases de religión evangélica en un instituto de secundaria. El se define como un gran aficionado a la lectura y a la escritura y ello le ha llevado también a escribir la historia del proyecto social que tiene entre manos.
Una parte importante de su ministerio, desde hace seis años exactamente, lo dedica al proyecto Reus Circ Social. Un proyecto puesto en marcha por la ONG Grans Projectes Solidaris. Cuentan con dos pisos para extutelados, los que han dejado de ser “menas” menores no acompañados. en ellos se alojan actualmente 10 chavales. Estos pisos se les ha denominado Llar Daniels y Llar Tutu. Artísticamente en el mundo circense se denominan la Nova Moixiganga. Tienen un convenio con la Escuela Internacional del Circo de los Muchachos y la clave de este milagro reside en la fuerza del grupo, del equipo humano que cree y vive los valores que proclaman.
extractos de la entrevista
¿Cómo llega un pastor de la Iglesia Reformada a seguir las huellas de un proyecto de un jesuíta y poner en marcha Reus Circ Social?
Al igual que el P. Silva recibió de su casa el amor al circo, en su caso eran artistas, yo también fui educado en el amor al circo. Mi padre nos llevaba al circo como si fuésemos a la ópera. Conocí al P. Silva. Vi el Circo de los Muchachos de pequeño y el mensaje de ese proyecto me llegó muy adentro.
¿En qué consiste este proyecto? ¿Es solo para chicos? ¿Existe la versión para chicas o mixto?
Es una versión mixta desde el principio. La coeducación de chicos y chicas es algo normal. Se trata de usar el Circo, crisol de todas las artes, para el progreso personal. Por otro lado la dimensión comunitaria de este proyecto es importante, con la idea de la ley piramidal que sostenía el P. Silva.
¿Además de la formación circense los chavales tienen posibilidad de cursar otros estudios?
Cuando empezamos el proyecto el perfil del usuario es muy diverso, como ahora. Pero encontramos el fenómeno de los “menas” y el riesgo en el que entran cuando alcanzan la mayoría de edad. Por eso apoyarles en una formación profesional.
¿Por qué el mundo del circo para una labor de integración social?
Tiene una eficacia grandísima. El Circo es el crisol de todas las artes y todo el mundo puede encontrar algo que pueda hacer bien. Pueden tener una salida profesional en el circo pero no es el fin único del proyecto. Una anécdota, cuando hacemos ensayos repasamos todos los momentos de la actuación, desde el rito de entrada hasta cada uno de los números de malabares, equilibrismo, … lo que más gusta en una encuesta que hicimos es precisamente el rito de entrada, ese momento de comunión entre todos. Quizá es algo que nos viene dado de un pasado scout del que provenimos muchos.
¿Los chicos que pasan por esta escuela acaban teniendo recorrido en los circos ? ¿Tenéis relación con el mundo profesional del Circo?
Desde siempre hemos tenido trato con el mundo del circo tradicional. Estamos trabajando la colaboración con la escuela de Circo de Benposta que se ha vuelto a recuperar.
¿Tenéis una trupe propia, La Nova Moixiganga, que actúa regularmente, tenéis vuestro propio espectáculo, cómo se aprovecha todo ese trabajo de preparación física y artística, haceis bolos por España?
(En la Moixiganga se encuentra la referencia originaria de los que se desdobló en una versión más laica y cultural de los castellers y una lectura más religiosa en las representaciones de la Pasión de Cristo con estas construcciones humanas)
La tradición acrobática nos ha servido para el diálogo entre culturas y religiones. En Cataluña queríamos haber presentado nuestro proyecto y el espectáculo en las fiestas locales pero todo lo frenó el Coronavirus.
Hace poco pudisteis visitar Benposta, que si bien no tiene la vida que llegó a alcanzar en los 70 y 80 especialmente, sí parece que hay un intento de recuperar el espíritu fundacional y volver a ser un espacio para la integración social desde el mundo del circo. Háblanos un poco de esta visita.
Cuando llegas te impacta, habiendo conocido lo que fue, ver la sensación de lugar abandonado que tiene externamente. Pero todo cambia cuando descubres la comunidad de personas que siguen residiendo allí y cómo el poliedro se siguen dando clases de circo y cómo la sociedad ourensana ha empezado a apoyarlo. La tradición no consiste en adorar las cenizas sino en transmitir el fuego (Chesterton)
Un rasgo común de estos proyectos es el de la autogestión, la participación democrática de todos los miembros y el diálogo interreligioso. ¿Cómo se gestiona un proyecto que nace también de un seguimiento a Jesús de Nazaret con quienes su plegaria se dirige a Alá?
Benposta es un ejemplo de eso con una capilla y una mezquita que coexistieron juntas físicamente. La clave es una suma de tradiciones religiosas y desde ahí se construye futuro. En el diálogo hemos encontrado muchas oportunidades para el servicio.
Y para terminar ¿qué formas hay de colaborar con vuestro proyecto?, contratando vuestras actuaciones, acudiendo a vuestros espectáculos, ...otras formas…
Nos podéis buscar en las redes sociales y poneros en contacto. Dispuestos a dar talleres o simplemente a contar nuestra experiencia.
Non solum sed etiam
A estas alturas ya todo el que sigue este blog sabe de mi debilidad por el mundo del Circo. Por eso, cuando conocí la historia de Reus Circ Social no dudé en dedicarle un espacio. Máxime cuando en mi memoria siguen grabados esos arlequines de mallas en blanco y negro que volaban sobre la pista y hacían torres humanas imposibles, dejando claro que el fuerte soportaba al más débil y el niño siempre arriba. Una máxima que yo recibí también en mis años de boy scout, una idea que dejó impresa Baden Powell, su fundador. Pero una idea que ni era original en Powell, ni en P. Flanagan, ni el el P. Silva. Los tres la habían “visto” antes en el pasaje en el que Jesús de Nazaret pone a un niño en medio de ellos y lo hace el más grande e importante inter pares.
Nadie es malo de origen, cada cual es fruto también de sus circunstancias, y todos merecemos una oportunidad, aunque sea incluso al final del todo, como el bueno de Dimas.