Leonidas Proaño, o llegar a ser la voz de los humildes “Solidaridad”, un comentario de un obispo profeta previo a “Fratelli tutti”
Este obispo de los pobres, en especial de los indígenas, murió el 31de agosto de l988. Años antes, en diciembre de 1983, hizo un retiro en Asís al lado de San Francisco, y como místico y profeta y además como valioso poeta, escribió en verso su mensaje “Solidaridad”
El poema del obispo Proaño, escrito 37 años antes, también en Asís, parece ser un comentario simultáneo a la oportuna y valiosísima Encíclica de Francisco
La Encíclica de Francisco ofrece el amar, como verbo de acción y la amistad social, como el sujeto actuante de ese verbo
La Encíclica de Francisco ofrece el amar, como verbo de acción y la amistad social, como el sujeto actuante de ese verbo
| Edgard R Beltrán
Los profetas transcienden el tiempo. Su voz es válida en todas las épocas y sigue iluminando.
El obispo Leonidas Proaño, de Riobamba, Ecuador, obispo de los pobres, en especial de los indígenas, murió el 31de agosto de l988. Años antes, en diciembre de 1983, hizo un retiro en Asís al lado de San Francisco, y como místico y profeta y además como valioso poeta, escribió en verso su mensaje “Solidaridad”.
Allí mismo, en Asís, el 4 de octubre de 2020, Francisco el de Roma firmó y proclamó su Encíclica Fratelli tutti, palabras usadas por el otro Francisco, el de Asís. El poema del obispo Proaño, escrito 37 años antes, también en Asís, parece ser un comentario simultáneo a la oportuna y valiosísima Encíclica de Francisco.
Leonidas Proaño es cristiano, obispo, místico, poeta y profeta. Como lo es su hermano Pedro Casaldáliga. No son muchos así. Ambos optaron por el pobre y por la Iglesia pobre, en una Iglesia Pueblo de Dios, al estilo Sinodal, aún sin usar ese término. Ambos se ganaron, por tanto, enemigos poderosos fuera de la Iglesia y enemigos fastidiosos dentro de la misma Iglesia. Ambos “compartieron los peligros en la lucha- por vivir en justicia y libertad- arriesgando en amor hasta la vida- en Solidaridad”. Vivieron lo que escribieron en sus poemas.
La Encíclica de Francisco ofrece el amar, como verbo de acción y la amistad social, como el sujeto actuante de ese verbo. El poema del obispo Proaño, guardada respetuosa proporción, ofrece una serie de verbos como desafiantes acciones de vida, con un sujeto común que los concreta: S o l i d a r i d a d, sinónimo práctico de amar en caridad social. Cada renglón es un eco sonoro del Evangelio de Jesús, cada palabra es para saborearla y para actuar, al ejemplo de este obispo profeta y poeta que vivió lo que escribió:
Solidaridad
Mantener siempre atentos los oídos // al grito del dolor de los demás // Y escuchar su pedido de socorro….es SOLIDARIDAD.
Sentir como algo propio el sufrimiento // de hermano de aquֵí y del de allá // Hacer propia la angustia de los pobres….es SOLIDARIDAD.
Llegar a ser la voz de los humildes // descubrir la injusticia y la maldad. // Denunciar al injusto y al malvado….es SOLIDARIDAD.
Dejarse transportar por un mensaje // cargado de esperanza, amor y paz, // Hasta apretar la mano del hermano….es SOLIDARIDAD.
Convertirse uno mismo en mensajero // del abrazo sincero y fraternal // que unos pueblos envían a otros pueblos….es SOLIDARIDAD.
Compartir los peligros en la lucha // por vivir en justicia y libertad // Arriesgando en amor hasta la vida…. Es SOLIDARIDAD.
Entregar por amor hasta vida // es la prueba mayor de la amistad // Es vivir y morir por Jesucristo….es SOLIDARIDAD.
ASIS, Dic. 1983, Obispo Leonidas Proaño