Antonio Aradillas Virgen 'independentista'

(Antonio Aradillas).- De entre las penúltimas noticias tan reiterativas que nos proporcionan los medios de comunicación social relacionadas con Cataluña, por su contenido religioso, me compete reflexionar, aquí y ahora, sobre alguna de ellas. Se trata del dato, documentado fotográficamente, aunque tal vez no comentado como hubiera sido deseable, de la aparición de la imagen de la Santísima Virgen de Monserrat, en un lugar privilegiado del salón elegido para la fugaz e importante ceremonia de la "toma de posesión" (elección), del nuevo presidente del Gobierno de la región catalana.

. Haciéndome eco del sentir de muchos ciudadanos cristianos, catalanes o no, a la Virgen no se le debe imbricar en políticas y politiquerías de carácter independentista de ninguna clase y condición, y ni aún con la más inocente de las intenciones sagradas. Las letanías de la Virgen, con inclusión de la advocación de Monserrat, constituyen un "númerus clausus", por exigencias del mismo culto divino, por lo que adjuntarle el "ora pro nobis" al pedir y reconocer la titulación de "independentista", me parece rondar los linderos de la profanación y de la blasfemia.

. Tal "parecer" se integra en el ámbito del convencimiento, cuando la presencia de tan sacrosanta imagen exigió, y dio por supuesta, con su implantación, la desaparición de signos y símbolos constitucionales y estatutarios, como fotos y banderas, legalmente requeridos en tales ceremonias. Y que conste que no se trata tan solo de ritos y normas ancestrales, carentes de contenido, sino de actitudes y determinaciones comprometidas y, por demás, comprometedoras, en las que la paz y la convivencia de muchos se exponen a gravísimos riesgos.

. La imagen de la Virgen, al amparo de cualquiera de sus advocaciones, no es "independentista" en el sentido político y partidista del término. Es "independiente", pero tal y como se describe, narra, reza y ensalza, en todos y en cada uno de los versículos de su "Magníficat" evangélico.

. La Virgen tampoco es, solo o preferentemente, de izquierdas, de derechas o medio pensionista. Es de todos y para todos los partidos y sus partidarios. Su forzada e interesada adscripción -en ocasiones, hasta con su correspondiente carné-, en uno u otro bando, le ocasionó y le ocasiona, torrenteras de lágrimas en su faz y en la de sus hijos.

. Por tanto, lo de monárquica, dictatorial, demócrata o republicana, ni encajó ni encaja en la Virgen y menos en la de Monserrat, con remembranzas a los reyes aragoneses, a las nueve -¡nueve¡- veces que visitó -peregrinó- el emperador Carlos V, y a las dos que lo hizo Felipe II, quienes, uno y otro, murieron con una vela encendida en sus manos, bendecida precisamente en la abadía de Monserrat, tal y como era devota costumbre en la clase pudiente de la época.

. "Republicana" la Virgen, -"corazón de Cataluña"-, difícilmente podrían Ella y sus administradores haber aceptado la donación de un trono de catorce -¡14¡- arrobas de plata, por parte de la familia Cardona, ni seguir siendo poseedora de tantas, tan artísticas y valiosas joyas y riquezas con las que expresaron y reconocieron su agradecimiento, los devotos montserratinos.

.El Abad Oliva, Wilfredo el Velloso, Alfonso X "el Sabio" en varias de sus "Cantigas", Lope de Vega, Miguel de Cervantes, Schiller, Goethe, Mistral ...jamás hubieran podido cantar el "republicanismo" de la Virgen de Monserrat, de suya imagen refiere la leyenda áurea que había sido labrada por el mismo evangelista san Lucas, valiéndose de las herramientas del taller de san José, sirviéndole de modela la propia Virgen María, siendo después porteada a Roma por el apóstol san Pedro. Restaurada, dorada y policromada en el siglo XII, "asentada sobre un trono en actitud hierática de realeza", canónicamente coronada -la primera en España- en 1881, gracias a la distinción del papa León XIII, cualquier mote o apodo, menos el de "Republicana", le resultaría hoy aceptable.

. Mientras tanto, y sin cuestionar en nada su pía intención, los obispos de la "Provincia Eclesiástica Tarraconense", "felicitan a Torra, nuevo presidente, y le ruegan a la Virgen que ilumine a los nuevos gobernantes en el camino a seguir para servir con justicia y firmeza a nuestro país, "buscando el diálogo con otras instituciones del Estado, para el bien común de todos los catalanes".

Espero que, así como "in re, vel in voto", anteriores gobernantes tuvieron dispuesto el acceso al monasterio "bajo palio", también a los nuevos no se les retire posibilidad tan patriótica.