Es el segundo país del mundo más afectado por el coronavirus Francisco dona 18 respiradores y 6 ecógrafos a Brasil
La ayuda de la Limosnería Apostólica es concreta y efectiva. Para ello, la atención a los detalles es máxima, para no poner en peligro el éxito real de las donaciones. "Una vez que lleguen a Brasil, estos dispositivos serán entregados y donados a los hospitales"
| Andrea de Angelis (Vatican News)
Otra donación del Papa en tiempos de pandemia. Esta vez el corazón de Francisco late por Brasil, el segundo país más afectado del mundo por el nuevo coronavirus. Tal como anuncia hoy la Limosnería Apostólica a través de un comunicado firmado por el Cardenal Konrad Krajewski - "en estos días se enviarán a Brasil 18 respiradores Draeger para cuidados intensivos y 6 ecógrafos portátiles Fuji".
Una ayuda concreta, que ha sido posible "gracias al generoso compromiso -leemos de nuevo en el comunicado- de la Asociación Hope Onlus que, altamente especializada en proyectos humanitarios de salud y educación, ha trabajado para encontrar el equipo médico de alta tecnología que salva vidas a través de varios donantes, el procedimiento de transporte y la instalación en hospitales individuales".
Francisco dona 35 respiradores para la emergencia COVID
Por tanto, la Limosnería Apostólica continúa con el compromiso incesante y universal de apoyar a aquellos en todos los rincones del mundo que son más afectados por el Covid-19. Lo hace cumpliendo lo que es la voluntad del Papa: llegar a aquellas realidades en las que la emergencia vinculada al nuevo coronavirus ha puesto en crisis los sistemas de salud ya fuertemente probados por otras urgencias y dificultades anteriores a la pandemia.
La primavera pasada los respiradores donados por Francisco llegaron al continente americano - desde Venezuela hasta Haití, pero también al propio Brasil y a otros países - y al continente asiático, con los enviados a Bangladesh por citar algunos ejemplos. La ayuda del Pontífice ha llegado también a Europa -Italia, España y Ucrania- y luego el continente africano: entre los países que recibieron los respirados están Camerún y Zimbabwe. Las donaciones continuaron durante la temporada de verano, la última de las cuales fue a Brasil.
El papel de la Nunciatura Apostólica
La ayuda de la Limosnería Apostólica es concreta y efectiva. Para ello, la atención a los detalles es máxima, para no poner en peligro el éxito real de las donaciones. "Una vez que lleguen a Brasil, estos dispositivos - se especifica en el comunicado de hoy - serán entregados y donados a los hospitales que la Nunciatura Apostólica ha indicado en el territorio nacional para que este gesto de solidaridad y caridad cristiana pueda ayudar realmente a los más pobres y necesitados". En Brasil, recordamos, hay más de 3 millones 300 mil casos de Covid-19 y al menos 107 mil víctimas.