La Iglesia reivindica la vigencia de las vocaciones religiosas en plena crisis numérica Misioneros de ida y vuelta: 'Di sí al sueño de Dios'

En momentos de sequía vocacional, 'Di sí al sueño de Dios'. Este es el lema de la 56 Jornada Mundial de la Oración por las Vocaciones y la Jornada de Vocaciones Nativas, que se celebra este domingo en todo el mundo y que, desde hace años, convocan conjuntamente la Conferencia Episcopal, CONFER, Obras Misionales y la Conferencia Española de Institutos Seculares (CEDIS).

Según los datos de la CEE, la Iglesia española cuenta con 18.164 sacerdotes diocesanos y 53.918 religiosos. Los monjes y monjas de clausura suman 9.322. Según CONFER, actualmente hay 407 instituciones, con 38.952 religiosos, de los que 9.562 son hombres y 29.390 mujeres. Los religiosos temporales suman 888 (256 hombres y 632 mujeres). Finalmente, los miembros de institutos seculares suman 2.415.

Cifras preocupantes en un país que, tradicionalmente, fue un vivero de vocaciones. Ahora, se ven más religiosos y religiosas del extranjero, 'importados' de otras latitudes. ¿Necesidad o tal vez la vieja Europa necesita ser reevangelizada?

"Quiero volver a Ghana"

Una de ellas es Faustina Dartey, religiosa ghanesa de la Congregación de los Santos Ángeles Custodios, que siempre quiso ser misionera... y ahora está en Europa. “Mi sueño sería volver algún día a Ghana como misionera (no hay sede de la congregación en su país natal), pero ahora estoy en la manos de Dios, esperándole, que mande donde quiera que me vaya”. Por el momento, irá a Brasil.

Él solo esperaba mi respuesta

Por su parte, Catherine Declercq (francesa, aunque nacida en Estados Unidos), ha vivido desde hace años en España, donde se consagró en el Instituto secular de las Cruzadas de Santa María, la obra fundada por el padre Morales. “El Señor me fue llamando a entregar la vida en ese Instituto. Él lo tenía pensado y solo esperaba mi respuesta”, apuntó.

“Estamos en casa en cualquier país del mundo”, recalcó, refiriéndose a la universalidad de la vocación en la Iglesia. “Es muy difícil vivir la fe solos”.

Ruiz-Mateos

Finalmente, un seminarista de Madrid. Y no cualquier cosa. Alejandro Ruiz-Mateos, familiar del famoso empresario, ya fallecido, es seminarista de sexto curso en el Seminario Conciliar de Madrid. Tras dedicarse al Márketing y la Publicidad, se planteó la llamada. Este mes de junio espera, “con temor y temblor, pero con ilusión”, su ordenación como diácono.

“Pasaron diez años desde que me lo plantee por primera vez. Me apetecía entre poco y nada ser sacerdote”, recordó, evocando su pasado familiar. “Todo comenzó en Cuatro Vientos, en la vigilia con Juan Pablo II, cuando dijo que merecía la pena dedicar la vida a la causa de Cristo”.