La política es "poder" y "proyecto": la cuestión capital
Me explico. En España estamos asistiendo al penoso espectáculo, que están ofreciendo los dirigentes del PSOE. Como es lógico, la gente se hace muchas preguntas ante lo que está pasando. Pero tengo la impresión de que son poco los que afrontan la cuestión capital, que subyace y sustenta el verdadero problema. El único problema que de verdad importa. Tal problema no está en saber quién debe mandar en el PSOE, sino cuál es el proyecto de país y de sociedad por el que los socialistas – y todos los españoles – tenemos que afanarnos.
Digo, por tanto, que lo que menos importa es que el poder lo tenga Pedro Sánchez o lo tenga Susana Díaz. Lo determinante y decisivo para España (y para el mundo) es si lo que importa de verdad a nuestros gobernantes es hacerse con el poder o es luchar contra el sufrimiento, que se produce en un país cuando ese país es gobernado por políticos que roban, mienten, dan leyes de las que se sigue inevitablemente una sociedad desigual, injusta, opresora de los débiles y defensora de los canallas.
Por todo esto, me pregunto ahora mismo: ¿de qué nos sirve que el poder lo tenga fulano o lo tenga quién sea? ¿No será más importante y urgente que el poder lo tenga quien sabemos que se va a enfrentar de verdad a los corruptos, que va a luchar contra la corrupción, contra el engaño y la mentira, contra la desigualdad (en derechos) entre los ciudadanos, contra el paro, contra una educación y una sanidad mal atendidas, contra tantos y tantos miedos que a todos nos atenazan?
Me dan miedo los políticos insensibles ante el sufrimiento de tantos millones de ciudadanos que ya no pueden seguir tirando de esta forma de vida que nos han impuesto. Cuando cada día se nos informa, en los medios, de tantos casos de corrupción, cuyos protagonistas han sido quienes ha tenido más poder, yo me pregunto: ¿pero qué proyecto de vida y de sociedad tenía esta gente en su cabeza y en su corazón? ¿a dónde querían (y quieren) llevar a España? ¿No es ésta la cuestión más apremiante que a todos nos interesa tener clara y, sobre todo, tener resuelta? Pues esto, ni más ni menos, es lo que hoy pude quedar resuelto o, por el contrario, puede quedar sepultado para bastante tiempo, quizá para siempre.