"De las espadas forjarán arados, de las lanzas podaderas, no se adiestran para la guerra, el león comerá pasto junto al cordero" el profeta alienta la esperanza de un pueblo agobiado por la guerra, la injusticia y el desamor, se proclama la buena noticia de que una luz brilla y una humilde estrella ilumina el camino de los corazones que aman y siguen soñando nuevos estilos de vida en comunión con sus semejantes y con todos los seres con quienes estamos interligados en esta Casa Común.
Cuánto te esperamos Señor, necesitamos encontrarte escondido en la sonrisa dibujada entre lágrimas en el rostro de los niños sobrevivientes de la guerra, escondido entre las mujeres que resisten el patriarcado que sigue lastimando la vida digna para todas, a pesar de las heridas de la violencia.
Ven pronto Señor, necesitamos que tú presencia sea la fuerza que siga animando nuestra caminada, ven pronto Señor, contigo renace la vida y la ilusión de seguir viviendo, seguir amando y ensayando tu Reino de justicia, vida, verdad.