El domingo 22 de mayo el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado de Su Santidad, en su homilía de la misa celebrada en Cascia con motivo de la fiesta de Santa Rita subrayó:
“En esta tierra de fe y de paz, que es Umbría, espero que las negociaciones comiencen cuanto antes y que podamos alcanzar por fin la tan deseada paz”
El purpurado la recordó como la "santa de los imposibles y la abogada de los casos desesperados". De ahí que dirigiendo su mirada a ella para encomendarle la oración por una solución del conflicto en Ucrania.
“Que se rompa cuanto antes la inútil espiral de muerte en Ucrania”
Santa Rita, afirmó el cardenal Parolin, es el emblema de la "virtud del perdón, de la paz y de la caridad". A ella “rendimos homenaje para poner en sus manos las debilidades del hombre”, y a su intercesión – subrayó – “encomiendo las numerosas intenciones del Santo Padre Francisco, que no cesa de hacer oír su voz a diario para que se rompa cuanto antes la inútil espiral de muerte en Ucrania".
“Utilizar la violencia es el modo de agravar los problemas”
La violencia nunca es una respuesta y las vicisitudes de la humilde mujer de Roccaporena nos enseñan – explicó el cardenal Parolin – que "jamás resuelve los conflictos, sino que sólo aumenta sus dramáticas consecuencias". Y concluyó diciendo:
“Lo experimentamos todos los días y me pregunto por qué no logramos comprenderlo de la historia, de la actualidad. Utilizar la violencia es el modo de agravar los problemas”
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