"La ideología da una única dirección, la fe te abre a todas las perspectivas" Cardenal Carlos Osoro: "La pandemia ha alumbrado un nuevo tiempo"
Se guasapea con el papa Francisco y asegura que la Iglesia está de "moda"
Como arzobispo de Madrid, ha perdido en su diócesis a más de veinte sacerdotes a causa de la covid-19
"En los momentos límite se ve la grandeza de una persona. Los sacerdotes se han entregado"
Acaba de publicar “La familia, una buena noticia. Encuentros y Conversaciones en familia” (Editorial PPC), en el que convoca a padres e hijos a reunirse todos los días para dialogar a través de las reflexiones que plantea en el texto
"En los momentos límite se ve la grandeza de una persona. Los sacerdotes se han entregado"
Acaba de publicar “La familia, una buena noticia. Encuentros y Conversaciones en familia” (Editorial PPC), en el que convoca a padres e hijos a reunirse todos los días para dialogar a través de las reflexiones que plantea en el texto
| Marina Segura Ramos, Efe
El cardenal Carlos Osoro, que se guasapea con el papa Francisco y asegura que la Iglesia está de “moda", piensa que la pandemia ha alumbrado "un nuevo tiempo de gran creatividad", que obliga a replantearse muchas cuestiones.
“El coronavirus nos ha situado en el límite ante la muerte y esto cambia la vida, a los que creemos y a los que no”, afirma en una entrevista con EFE el vicepresidente de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Madrid, quien ha perdido en su diócesis a más de veinte sacerdotes a causa de la covid-19.
Nacido hace 75 años en Castañeda (Cantabria), Osoro reflexiona que en estos momentos “a lo mejor, hay que cambiar cosas”, y subraya que ha habido “mucha creatividad en todos los aspectos, pero en la Iglesia especialmente", y es que, a su entender, la fe genera creatividad.
"La ideología da una única dirección, la fe te abre a todas las perspectivas. Es un momento nuevo”, asegura el prelado. Recogiendo una invitación del papa, ha impulsado cinco grupos de trabajo para analizar la realidad que vive Madrid y ofrecer orientaciones a la Iglesia para afrontar las secuelas de la pandemia. Lo integran economistas, filósofos, periodistas, artistas y políticos cristianos, entre otros pensadores.
A su juicio, Madrid habría sido muy distinto de no haber contado con la labor de su millar de sacerdotes. "En los momentos límite se ve la grandeza de una persona. Los sacerdotes se han entregado sin tener los medios, a lo mejor, pero han visitado a los pacientes en los hospitales y en las residencias, sabiendo que se podían contagiar, o en la misma parroquia atendiendo a la gente”, detalla.
Además, subraya que Cáritas ha recibido "el triple de demandas de ayuda". El 56 por ciento de las familias que acuden en la actualidad a esta organización católica lo hacen por primera vez.
"Ha sido bellísima –añade el cardenal- la solidaridad de la gente en este tiempo". Para Osoro la respuesta de la Iglesia ha sido excepcional. "Ver cómo se ayuda y sin mirar a quién, no se pide un carné cuando se va a la iglesia", enfatiza.
Esta iglesia, continua, “no se mueve por razones económicas, sino por anunciar a una persona que nos ha invitado a amarnos y cuidarnos los unos a los otros, a seguir adelante no pegando bofetadas sino dando un abrazo al otro".
Para agregar que "esto es esencial en la humanidad, siempre, pero en estos momentos es urgente. Por eso la Iglesia está de moda, no es un pueblo trasnochado, es un pueblo que tiene una misión tan bella, grande y extraordinaria, que además los más pobres saben captarla".
La Iglesia "no se mueve por razones económicas, sino por anunciar a una persona que nos ha invitado a amarnos y cuidarnos los unos"
El impacto económico también ha sido “muy grande” en las propias parroquias debido a la suspensión de las cuestaciones (cepillo) y celebraciones, y pese a ser Madrid una diócesis "pobre, en el sentido que aquí no tenemos grandes propiedades y debemos todavía muchos templos (se están pagando los que se construyeron años atrás), hay generosidad. Madrid tiene algo especial y es que la gente considera su casa a la parroquia de su barrio”, relata.
Osoro, quien dice guasapearse con el papa Francisco cuando es preciso, añadiendo a renglón seguido con una sonrisa que “de esto entiendo lo mínimo necesario para subsistir”, también se expresa sobre la actual situación política, aunque matiza que contesta a la pregunta en su calidad de obispo, porque él "no es político”.
“Las diatribas, el enfrentamiento, la ideologización de la vida no trae futuro, trae rupturas, trae muerte, no trae vida. Hablo como obispo, pero me gustaría que buscáramos entre todos lo mejor para los demás, no buscar lo que a mí me conviene o lo que a mí me interesa, busquemos lo que interesa a todos”, recalca.
Sobre el rifirrafe político en cuanto a la responsabilidad de lo ocurrido en las residencias de mayores considera que lo importante es buscar soluciones para que esto no vuelva a pasar en lugar de buscar “a quien cargar un guantazo”.
Por otro lado, manifiesta que durante esta pandemia se han recuperado dos sustantivos olvidados para la convivencia y que son necesarios para construir la fraternidad y la solidaridad: hijos y hermanos, porque “a veces -dice- hemos vivido de adjetivos que son secundarios en nuestra vida, yo puedo hablar del día, bueno o malo, pero lo importante es el día, el sustantivo”.
“Youtuber” durante la pandemia, fue el encargado de oficiar las misas “online” de las 19.00 horas en la catedral de la Almudena, aunque no ha sido su primera incursión en este medio, cree que esta situación ha servido a creyentes y no creyentes a valorar “la belleza, la grandeza y el apoyo que tiene la familia, que ojalá no olvidemos”.
Acaba de publicar “La familia, una buena noticia. Encuentros y Conversaciones en familia” (Editorial PPC), en el que convoca a padres e hijos a reunirse todos los días para dialogar a través de las reflexiones que plantea en el texto.