Salve Regina



De nuevo, nos encontramos con este título que ya lo dice todo. Esas tan rezadas palabras a la Virgen, tan meditadas y que tanto contenido tienen de por sí. El que se encargará de ponerlas hoy en música será un maestro de la antigüedad que además de un extraordinario compositor fue un maestro de otros maestros de renombre.

Dicho hombre es Giacomo Carissimi (1605-1674), maestro italiano nacido en Marino (cerca de Roma). Está considerado como el compositor romano más importante de mediados del XVII. Fue un prolífico compositor de motetes y cantatas y fue el que estableció las bases de lo que sería el oratorio latino. Los "tentáculos" de Carissimi se propagaron por toda Europa, incluso por la Europa del norte debido a los alumnos que formó. Personas como Alessadro Scarlatti, Marc-Antoine Charpentier, Johann Caspar Kerll o Agostino Steffani fueron sus alumnos, con lo que consiguieron asegurar que el legado de Carissimi fuese distribuído por doquier. Permaneció desde 1629 hasta su muerte como maestro di capella del Colegio Germánico de los jesuitas en Roma. Allí, esta congregación cuidaba especialmente la instrucción musical, de ahí el interés de Carissimi por ser fiel a ella.

En la época de nuestro maestro de hoy, las Vísperas estaban de moda; eran foco de atención de los músicos, que componían grandes salmos y magníficats para dichas celebraciones. Para una de ellas compuso el Save Regina a tres voces que te ofrezco hoy. Lo hizo siguiendo los cánones antiguos pero también modernos. Así, la primera parte de la obra cita textualmente el canto llano de la salve. Posteriormente, Carissimi trata dicho canto llano de forma contrapuntística mostrando su maestría componiendo. El maestro concluye la obra recurriendo al estilo afectivo moderno, e incluso se atreve a concluir la antífona mariana con un ritmo danzable.

Espero que disfrutes de esta belleza, interpretada por el conjunto Consortium Carissimi.

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