El antiguo jesuita formuló las denuncias sobre el caso Pedrajas en la prensa Jesuitas de Bolivia piden a Pedro Lima que formalice sus denuncias de encubrimiento y abusos cuanto antes

La Compañía de Jesús en Bolivia pidió este lunes a un exintegrante de esa orden que formalice ante la Fiscalía sus denuncias de un supuesto encubrimiento en el caso de los presuntos abusos sexuales perpetrados por el español Alfonso Pedrajas y otros dos sacerdotes que ya murieron.

La institución se refirió en un comunicado a las denuncias hechas por Pedro Lima Salazar, "antiguo novicio" jesuita, ante la prensa local "sobre un presunto encubrimiento del caso Pedrajas" y acerca de los abusos que presuntamente cometieron otros dos sacerdotes ya fallecidos.

La entidad pidió a Lima "que cuanto antes pueda formalizar las mismas ante la Fiscalía" boliviana" y los canales creados por la Compañía" para recibir estas denuncias.

"Lima contará con toda nuestra escucha y colaboración, al igual que cualquier otra persona que desee hacer denuncias", señaló la Compañía de Jesús.

También recordó que tiene habilitado un correo electrónico en el que ofrece "acompañamiento con profesionales en psicología, con absoluta confidencialidad, y apoyo en la formalización de la denuncia en las instancias correspondientes".

Los jesuitas ratificaron que continúan "colaborando" con la Fiscalía en la tramitación de la denuncia presentada por su provincial, Bernardo Mercado, para que se investigue el caso de Pedrajas, "autor confeso del delito de pederastia" y a los posibles responsables de encubrir sus abusos que les "horrorizan y avergüenzan".

La Compañía de Jesús reiteró a las víctimas que comparte y comprende "su dolor, rabia, impotencia y frustración" y expresó solidaridad con quienes "por tantos años han cargado con esta aflicción sin recibir la atención y justicia integral que merecían".

"Por ello debemos pedir perdón. Pero de nada serviría reconocerlo si no actuamos ahora a la altura de las circunstancias, como lo estamos haciendo con total firmeza, bajo la consigna de tolerancia cero ante los abusos a menores y personas vulnerables", concluye el comunicado.

El periódico español El País publicó hace unos días una investigación que realizó con testimonios de víctimas y allegados sobre un diario del jesuita Pedrajas en el que habla de su vida sacerdotal y parece hacer un recuento sobre los presuntos abusos a decenas de niños y adolescentes bolivianos.

Pedrajas fue subdirector y luego director desde 1971 del Colegio Juan XXIII, en la ciudad de Cochabamba, que era un internado. También trabajó en otras instituciones educativas del país y antes de radicar en Bolivia estuvo en escuelas de Perú, y Ecuador entre 1961 y 1971. En 2001 presentó una denuncia ante el provincial de la Compañía de Jesús en Bolivia, el español Ramón Alaix, contra los sacerdotes Alfonso “Pica” Pedrajas, Luis Tó y Antonio "Tuco" Gausset, pero no halló respuesta

Según El Correo del Sur, Lima afirma en una conversación que "ya tomó conocimiento del comunicado emitido por la Compañía de Jesús, que insta al 'antiguo novicio' a formalizar sus denuncias".

"Hoy día me tratan a mí como una forma de menosprecio y con trato degradante, como novicio de los jesuitas que presento denuncia. Yo no fui novicio de los jesuitas, yo fui jesuita con votos cuando me dimitieron, entonces tal vez una forma de desprecio, de trato degradante que te da la Compañía a través de los medios de comunicación. Ahí está el comunicado: 'convocamos al antiguo novicio'. Yo no fui antiguo novicio cuando me dimitieron, yo fui jesuita como ellos", reclama Lima en una entrevista que se publicará hoy en este medio.

La Compañía de Jesús presentó la semana pasada una denuncia en la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv) en La Paz para que indague los supuestos abusos sexuales del español Pedrajas.

También fueron suspendidos ocho provinciales mientras se realiza la investigación, cinco de ellos estaban en funciones antes de que Pedrajas falleciera en 2009 y los otros tres después de la muerte del sacerdote español.

La Procuraduría boliviana formalizó por su parte una denuncia penal y pidió una "investigación a fondo, ya que no es un hecho aislado".

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