Una semana en la Iglesia latinoamericana: el resumen de Luis Miguel Modino ¿Vacaciones para la violencia en América Latina?
En Brasil este domingo 28 de enero se celebra el Día Nacional de Combate al Trabajo Esclavo, y es curioso que en 2023 hubo un número récord en liberación de trabajadores que estaban en condiciones de esclavitud o análogas a la esclavitud y eso tiene que llevarnos a cuestionarnos sobre las malas condiciones de trabajo en el continente
Como Iglesia somos llamados a tener una palabra cada vez más contundente, que lleve a la sociedad a buscar alternativas de vida, sobre todo para los más pobres, para aquellos que más sufren, también para la Naturaleza
El mes de enero en América Latina es tiempo de vacaciones y uno se pregunta por tantos trabajadores que en este continente no puede disfrutar de vacaciones, y no pueden hacerlo porque las condiciones de trabajo muchas veces son precarias.
En Brasil este domingo 28 de enero se celebra el Día Nacional de Combate al Trabajo Esclavo, y es curioso que en 2023 hubo un número récord en liberación de trabajadores que estaban en condiciones de esclavitud o análogas a la esclavitud y eso tiene que llevarnos a cuestionarnos sobre las malas condiciones de trabajo en el continente, algo sobre lo que la Iglesia brasileña y las iglesias de los diferentes países del continente nos llaman a reflexionar y actuar.
Junto con eso nos encontramos con la situación de Argentina, que no parece mejorar con el nuevo gobierno. De hecho, la crisis aumenta, la gente que pasa hambre cada vez es más. La violencia en Ecuador, la violencia en Haití, con el secuestro de las religiosas, que es algo que colma el vaso de una situación que viene viviéndose hace muchos y muchos años en la isla caribeña. El Papa Francisco ha reaccionado, la Iglesia de América Latina y el Carie ha reaccionado, la Vida Religiosa del continente ha reaccionado, inclusive un obispo haitiano se ha ofrecido como rehén a cambio de las religiosas que están secuestradas.
Son muchas las situaciones que provocan dolor en el continente y que tienen que llevarnos a pensar en cómo cambiar las condiciones de vida, las condiciones de trabajo, las condiciones de todo en América Latina y el Caribe. Y que eso sea algo que pensemos, que reflexionemos, que nos demos cuenta de que no podemos continuar por este camino y que como Iglesia somos llamados a tener una palabra cada vez más contundente, que lleve a la sociedad a buscar alternativas de vida, sobre todo para los más pobres, para aquellos que más sufren, también para la Naturaleza.
Las agresiones continúan siendo constantes, a la Naturaleza, a los pueblos indígenas, los pueblos originarios, que son los verdaderos cuidadores, los maestros en el cuidado de la casa común. Son muchos los temas que van apareciendo, inclusive en este tiempo de vacaciones, y que uno tiene que, por lo menos, pensar, escuchar y descubrir qué es lo que Dios está queriendo decirnos con esta realidad que se vive en América Latina y el Caribe.