"¡Qué ganas de generar problemas!" afirma el purpurado, que atribuyó "al demonio" las críticas El cardenal Cipriani denuncia a los cardenales díscolos y a quienes "pretenden analizar al Papa"
El cardenal arzobispo de Lima, Perú,
atribuyó al "demonio" y a "sus objetivos de dividir" las críticas lanzadas contra el Papa Francisco y el intento, entre algunos católicos, de contraponerlo al Papa emérito Benedicto XVI.
En entrevista con Notimex, el purpurado se refirió a la actualidad de la Iglesia católica, las discusiones en torno a temas sensibles como los divorciados vueltos a casar y la visita apostólica que cumplirá Jorge Mario Bergoglio a Perú en enero de 2018. "Esto lo digo con mucha claridad: el demonio tiene objetivos, busca dividir. Son excusas, pero el demonio disfrazado de mil teorías está quitando la paz y la serenidad en el espíritu", indicó.
"Hay que estar atentos, no seamos tontos, pero las cosas no se deben ventilar en los medios de comunicación", indicó el cardenal sobre las acusaciones lanzadas contra el pontífice. Sostuvo que la obligación de todos los fieles es mostrar cercanía al líder católico y "no buscarle tres pies al gato", porque aunque se pretenda "buscar las aristas", en realidad Francisco sólo quiere llevar el mensaje cristiano hasta la última persona, con su propio estilo.
Lamentó que algunos grupos pretendan "analizar al Papa" acusándolo de "estar en contra de los sacramentos" por su exhortación apostólica "Amoris Laetitia" sobre la familia, en la que marcó una apertura hacia los divorciados vueltos a casar, quienes hasta ahora tenían prohibido tomar la comunión e involucrarse en diversas actividades eclesiásticas.
Cipriani explicó que el deseo del Papa Francisco es alcanzar a todos, sobre todo a los pecadores, y por eso ha puesto mucha más responsabilidad a los obispos y sacerdotes para que dejen de ser burócratas y "confesores inútiles". "¡Qué ganas de generar problemas! Con todo respeto a la teología, es clara la intención del Papa de acercarse mucho más al pecador, pero también es clara su voluntad de no modificar -para nada- la disciplina de los sacramentos. Quien va por ahí, va buscando pleitos", insistió.
El arzobispo de Lima también criticó a otros cuatro cardenales, quienes hicieron públicas una serie de dudas sobre la legitimidad de algunos pasajes de "Amoris Laetitia", propiciando un fuerte debate dentro de la Iglesia. "Haberlas publicado no me parece correcto, realmente no. Creo que cualquiera puede manifestar con gran franqueza lo que quiera, pero saltar a la prensa ya es otra cosa. Me parece que se equivocaron, aunque se trata de gente buena", añadió.
Más adelante, el cardenal se refirió a la visita apostólica que cumplirá el Papa a Perú en 2018, prevista del 18 al 21 de enero, y que incluirá etapas en Puerto Maldonado, Trujillo y Lima. Aseguró que el pueblo peruano se prepara "con mucha alegría" para esa gira y que dos grupos del Vaticano ya recorrieron las diversas sedes: una comitiva encargada de los viajes apostólicos y otra de la seguridad del Papa.
Anticipó que, según la agenda preliminar, en la capital peruana Bergoglio se reunirá con monjas de clausura, sostendrá una reunión con obispos, y rezará ante los restos de los santos del país en la catedral. Además, saludará a la juventud congregada en la Plaza de Armas y celebrará una misa multitudinaria, a la cual se espera convocar a más de dos millones de personas.
"La gente quiere estar con el Papa, él ha calado mucho en las personas sencillas. Es alguien que se preocupa por los más débiles: enfermos, presos, niños, ancianos. La expectativa es grande, hay que medirla porque aún faltan seis meses, pero creo que la visita marcará un antes y un después", sostuvo.
(RD/Agencias)