Estudio confirma la importancia de la familia durante la pandemia. Más de 130 mil niños quedaron huérfanos por la pandemia de Covid19: Reporte sobre la familia en México 2022
A casi tres años de la llegada del Covid19, la Dimensión Episcopal de Familia del Episcopado Mexicano, presentó el Reporte sobre la familia en México 2022: Retos y transformaciones en clave de esperaza, un compendio de estudios e investigaciones especializadas sobre la realidad de la familia mexicana en el contexto postpandémico.
Ahí especialistas coincidieron en la importancia de la familia para enfrentar crisis como la de la pandemia por Covid19, pero reconocieron los problemas que tuvieron que enfrentar durante estos años, por la muerte de familiares, divorcios y problemas económicos por pérdida de empleo.
Jimena Hernández corresponsal en México
Con la participación de especialistas como Martinique Acha Alemán, del Centro de Estudios de Familia, Bioética y Sociedad (CEFABIOS), Fernando Pliego Carrasco; especialista en sociología del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM y Mons. Alfonso Miranda Guardiola, titular de la Dimensión de Pastoral Familiar del Episcopado Mexicano, se realizó la presentación del Reporte sobre la familia en México 2022: Retos y transformaciones en clave de esperaza, donde se comentó sobre la importancia de la familia en la sociedad y sobre todo destacaron los efectos de la pandemia en la educación, salud, economía y empleo.
Un dato trascendente que dio a conocer ese informe es que 131,325 niños mexicanos se quedaron huérfanos por perder a uno o ambos padres durante la pandemia de Covid-19, y más de 141 mil menores perdieron a su cuidador principal, menores que se encuentran en riesgo de abandono emocional, físico y social.
Además de que a causa de la pandemia se habla de un rezago educativo de dos años y el aumento de la pobreza por aquellos mexicanos que se quedaron sin ingresos o los vieron disminuidos considerablemente.
Martinique Acha Alemán de CEFABIOS afirmó que debido a la pandemia miles de familias se enfrentaron a retos nunca antes vistos, pero resaltó que durante estas crisis la familia es el tema sociocultural más relevante en la sociedad contemporánea de México ya que se convierten en una red principal de apoyo para las personas, pues en esta es donde se encuentra la esperanza.
La investigadora afirmó que el reporte invita a la sociedad, al Estado y a todos los grupos a comprender que:
“La familia es un bien social y de su salud depende el bien común. Una nación necesita familias con raíces, de jóvenes que conozcan de dónde vienen y que puedan renovar, innovar y mirar con optimismo el futuro”.
Durante su participación, el obispo de Monterrey, responsable de la la Dimensión de Pastoral Familiar del episcopado mexicano insistió en que "la familia es un don de Dios para la humanidad, un tesoro precioso que debe ser sostenido y protegido siempre".
Y aunque reconoció que el matrimonio y la familia enfrentan varios desafíos, también aseguró que la pandemia de COVID-19 ha dejado en claro la grandeza de la familia, de sus valores y experiencias que humanizan, un lenguaje de ternura, compasión y protección:
"La vida familiar es como un gran salvavidas en medio de la tempestad; pero también es cierto que el matrimonio y la familia se están enfrentando a inmensos desafíos materiales, culturales y espirituales".
"Hoy somos más conscientes, que formamos una familia y equipo, donde, para salir adelante, cada quien debe poner su parte, dando prioridad a la razón y a la sabiduría, y rechazando todo lenguaje de violencia, polarización o guerra", compartió.
¿Cómo se conforman los hogares mexicanos después de la pandemia?
El sociólogo Fernando Pliego, aseguró que México atraviesa por un periodo de desprestigio entre las relaciones hombre y mujer, lo cual afecta de manera directa a la familia y, por ende, en la sociedad en su conjunto.
Y es que la composición de los hogares en México, cambió mucho durante y después de la pandemia.
En el año 2000 las parejas casadas eran 60.06 por ciento, cifra que en 2020 cayó a 43.59 por ciento; por otro lado, las parejas en unión libre pasaron de 13.34 por ciento en el 2000 a ser 20.43 por ciento en 2020. En tanto que los hogares en donde la cabeza es una mujer sola de ser 14.59 por ciento en el 2000 se incrementó a 17.70 por ciento en el año 2020.
En cuanto a los jóvenes entre 18 a 29 años que en el año 2000 estaban casados era de 34.3 por ciento, 20 años después cayó a 14.2 por ciento, es decir que se redujo a menos de la mitad. Mientras que los que viven en unión libre pasaron de 14.2 a 25.9 por ciento.
Destacó la cifra de que los jóvenes casados por el civil y religiosamente que representaban un 18.3 por ciento ahora sólo son el 4.9 por ciento.
“Esto quiere decir que los jóvenes típicos consideran que hay un abismo entre lo que proponen la Iglesia católica y las demás comunidades religiosas y su visión del tema fundamental de la vida social: familia, pareja, sexualidad”, señaló.
El Reporte sobre la familia en México 2022: Retos y transformaciones en clave de esperanza tomó en cuenta los censos de población y encuestas representativas levantados en dieciséis países localizados en todos los continentes cotejados con índices de bienestar social y los indicadores de educación, seguridad física, funcionamiento de la pareja, salud sexual y reproductiva, ingresos y trabajo, así como vivienda entre otros.
Y se suma a otras investigaciones que se han realizado en America Latina en un contexto post pandemia, con el objetivo de hacer un llamado a gobiernos, empresas y sociedad civil a atender las urgentes necesidades y problemáticas que viven las familias mexicanas.
