"Sois valiosos. Dios está con nosotros" El cardenal Osoro y el padre Ángel, unidos por los mayores que viven en residencias
El Padre Ángel, presidente de Mensajeros de la Paz, que gestiona residencias de ancianos, ha compartido el mensaje que ha recibido de monseñor Osoro, alentando en la lucha contra la pandemia a quienes cuidan de los ancianos y recordando que la dignidad de la vida se impone de principio a fin, y "en todo ese trayecto servimos a la persona siempre"
"No nos quedemos prisioneros de la situación en la que estamos"
| Mensajeros de la Paz
Ante la grave y delicada situación que atraviesan nuestros mayores que viven en residencias, tanto el Padre Ángel como el Cardenal Osoro han unido sus fuerzas en un mensaje de ánimo y apoyo espiritual para todos los mayores así como para sus familias: “Dios está con nosotros. Sois valiosos, cuidaos, os quiero”.
El cardenal y arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha enviado unas palabras de apoyo al Padre Ángel ante la delicada situación que atraviesan las residencias de mayores debido a la pandemia producida por el Covid 19. Palabras que el Padre Ángel quiere compartir con todos dado su valor y su cariño, y a las que se une.
<Querido P. Ángel: a través de ti quisiera llegar a todos los ancianos en estos momentos para decirles: sois valiosos, tenemos la obligación de cuidaros como a todos, la vida y el tiempo de estancia en este mundo no lo decidimos nosotros, la decisión es de Dios y hemos de hacer todo lo que es posible de nuestra parte para cuidaros por tener ese valor sagrado que no ha sido dado Dios.
Queridos mayores, tened la certeza de que Dios está con nosotros, que sólo Él nos libera del miedo y que sólo Él da las medidas reales de lo que todo ser humano vale. No nos quedemos prisioneros de la situación en la que estamos, digamos al Señor tras la fiesta de San José: ayúdanos a vivir nuestra fe con el valor que el Señor de la vida da a todos los hombres. A quienes cuidáis a los ancianos sentid el gozo de saber que la dignidad y el valor de la persona es Dios quien la da y la da desde el inicio de la vida hasta el final, pero en todo ese trayecto servimos a la persona siempre. Con gran afecto, os digo: os quiero y recibid mi bendición>.