La Almudena se transforma en la catedral de todos en una misa presidida por Benavent Los obispos españoles, con las víctimas de la DANA: “No estáis solos”
107 obispos, además del Nuncio y decenas de sacerdotes (muchos de ellos valencianos), presentes en la catedral de La Almudena, junto a representantes de las autoridades y poderes de las distintas Administraciones
“Cuando pensamos en los fallecidos y en sus familias que han quedado rotas, en las personas que han perdido sus casas, su trabajo, en aquellas que se han salvado después de pasar una larga noche en situaciones dramáticas y, han vivido una experiencia que les marcará profundamente, nuestros sentimientos son tan profundos, que las palabras parecen insuficientes para decir un mensaje de esperanza”
“Ha habido personas que en las horas más dramáticas han arriesgado su vida para salvar la de los demás; hemos visto la solidaridad de asociaciones e instituciones, entre las que hay que mencionar a la Iglesia"
Al comienzo de la Eucaristía, el presidente de la CEE, Luis Argüello, invitó a todos a rezar por los que "han sufrido la tremenda catástrofe de la riada", con la muerte de más de doscientas personas, y la "inmensa destrucción" en casas. "Queremos ofrecer nuestra esperanza y nuestro compromiso de caridad", apuntó.
Al término de la ceremonia, se rezó una oración especial por los afectados por la DANA. Junto a la misa de hoy, la CEE también ha convocado una colecta, el próximo domingo, en todas las eucaristías que se realicen en España, en favor de los damnificados por esta catástrofe
“Ha habido personas que en las horas más dramáticas han arriesgado su vida para salvar la de los demás; hemos visto la solidaridad de asociaciones e instituciones, entre las que hay que mencionar a la Iglesia"
Al comienzo de la Eucaristía, el presidente de la CEE, Luis Argüello, invitó a todos a rezar por los que "han sufrido la tremenda catástrofe de la riada", con la muerte de más de doscientas personas, y la "inmensa destrucción" en casas. "Queremos ofrecer nuestra esperanza y nuestro compromiso de caridad", apuntó.
Al término de la ceremonia, se rezó una oración especial por los afectados por la DANA. Junto a la misa de hoy, la CEE también ha convocado una colecta, el próximo domingo, en todas las eucaristías que se realicen en España, en favor de los damnificados por esta catástrofe
Al término de la ceremonia, se rezó una oración especial por los afectados por la DANA. Junto a la misa de hoy, la CEE también ha convocado una colecta, el próximo domingo, en todas las eucaristías que se realicen en España, en favor de los damnificados por esta catástrofe
No fue un funeral porque, formalmente, no podía serlo, pero sí una misa en recuerdo, casi ‘de Estado’, por las víctimas de la DANA en Valencia, en Letur, en Cuenca, en Málaga. La práctica totalidad de los obispos españoles, acompañados por representantes de otras religiones y representantes de administraciones y poderes públicos se congregaron esta tarde en la catedral de La Almudena de Madrid, en una sentida Eucaristía presidida por el arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, y que contó con una imagen de la Virgen de los Desamparados, patrona de la capital levantina, presente en el altar. También se celebró con una réplica del santo cáliz que se conserva en la catedral de Valencia.
“Durante estos días los valencianos, y también el Santo Padre, le hemos dirigido nuestras miradas llenas de amor”, subrayó al término de su homilía Benavent, mirando la talla. “En Valencia la invocamos como Madre de los Desamparados. Los que más sufren son los que ocupan el primer lugar en su corazón. Ella, que fue la que más cerca estuvo de su Hijo en el momento de la cruz, es la que está hoy más cerca de todos los que sufren. Que lleguen a experimentar su consuelo y su cercanía maternal”, clamó, ante “unos acontecimientos que nos han consternado a todos, y que estamos llamados a vivir desde la fe”.
Entrada de los obispos españoles @Confepiscopal en la #CatedralDeLaAlmudena dónde se celebra la Eucaristía en memoria de las víctimas de la #DANA@archimadridpic.twitter.com/0FZn59YQpW
— Of. Información CEE (@prensaCEE) November 19, 2024
“Cuando pensamos en los fallecidos y en sus familias que han quedado rotas, en las personas que han perdido sus casas, su trabajo, en aquellas que se han salvado después de pasar una larga noche en situaciones dramáticas y, han vivido una experiencia que les marcará profundamente, nuestros sentimientos son tan profundos, que las palabras parecen insuficientes para decir un mensaje de esperanza”, arrancó el arzobispo de Valencia, quien se ha manchado de barro a lo largo de estas semanas visitando las poblaciones afectadas, y que esta tarde quiso lanzar un mensaje de esperanza en medio de la catástrofe y frente al “terrible sufrimiento” de las víctimas.
Cercanía y solidaridad
La celebración de esta tarde quería ser “un gesto de cercanía y de solidaridad con todos los que están sufriendo”, indicó Benavent, quien agradeció a los 107 obispos presentes (además del Nuncio y de centenares de sacerdotes, muchos de ellos valencianos) la “experiencia de solidaridad” que está sacando “a la luz lo mejor que hay en el corazón del ser humano”.
“Ha habido personas que en las horas más dramáticas han arriesgado su vida para salvar la de los demás; hemos visto la solidaridad de asociaciones e instituciones, entre las que hay que mencionar a la Iglesia, que han ofrecido sus locales e instalaciones para acoger a los afectados y ofrecerles lo que necesitaban en los primeros momentos; el testimonio de los miles y miles de voluntarios, muchos de ellos jóvenes que, de una manera espontánea, se han ofrecido para ayudar a los afectados; la profesionalidad de los cuerpos de seguridad y de todos los servidores públicos venidos de toda España, que no se han limitado a realizar su trabajo, sino que lo han hecho con un auténtico espíritu de servicio y entrega”, subrayó el arzobispo de Valencia, dando gracias a todos los que, de una u otra manera, se han volcado en la tragedia.
“Cualquier gesto y ayuda es confortador para todos nosotros”, insistió el prelado, que invocó a las víctimas, en nombre de toda la Iglesia española: “No estáis solos”. “No dudéis de que Cristo también está junto a vosotros. La presencia de las iglesias de España representadas por sus pastores, la cercanía del Santo Padre expresada en tantos gestos, que nos ha tenido presentes en sus oraciones y que nos ha manifestado su dolor, y todas las muestras de afecto que nos han llegado son expresión de unos sentimientos profundamente cristianos”, recalcó.
Porque, añadió, “no nos podemos limitar a compartir el dolor”, sino que “queremos, ante todo, compartir la esperanza”. Volviendo a recordar sus visitas a las poblaciones afectadas, Benavent destacó que “se ha sembrado esperanza, porque las personas se han sentido queridas, se ha aliviado su soledad y su tristeza, han experimentado en ellos una mano amiga”.
“Ahí han estado muchos jóvenes y adultos cristianos movidos por un compromiso de fe y, gracias a ellos, el anuncio de la esperanza cristiana, se hace más creíble”, trazó el arzobispo, quien invitó a “encontrar la alegría en Cristo”, incluso, en mitad de la tragedia.
“Cuántos voluntarios, con su compromiso y su alegría, con sus gestos y palabras, con su cercanía a los que están sufriendo, han hecho creíble el amor de Cristo y han ayudado a los que sufren a descubrir que Cristo es la fuente de la verdadera alegría. Demos gracias a Dios”
“Cuántos voluntarios, con su compromiso y su alegría, con sus gestos y palabras, con su cercanía a los que están sufriendo, han hecho creíble el amor de Cristo y han ayudado a los que sufren a descubrir que Cristo es la fuente de la verdadera alegría. Demos gracias a Dios”, finalizó.
Palabras de Cobo y Argüello y oración final
Al comienzo de la Eucaristía, el presidente de la CEE, Luis Argüello, invitó a todos a rezar por los que "han sufrido la tremenda catástrofe de la riada", con la muerte de más de doscientas personas, y la "inmensa destrucción" en casas. "Queremos ofrecer nuestra esperanza y nuestro compromiso de caridad", apuntó.
En la plegaria eucarística, Argüello pidió a Dios acordarse de “nuestros hermanos que nos han sido arrebatados por una muerte tan repentina”, mientras que el vicepresidente y cardenal de Madrid, José Cobo, invitó a abrir los ojos “para que conozcamos las necesidades de los hermanos”. “Que tu Iglesia sea un vivo testimonio de verdad y libertad, de paz y justicia, para que todos los hombres se animen con una nueva esperanza”.
Al término de la ceremonia, se rezó una oración especial por los afectados por la DANA. Junto a la misa de hoy, la CEE también ha convocado una colecta, el próximo domingo, en todas las eucaristías que se realicen en España, en favor de los damnificados por esta catástrofe.